Salmos desde el Cielo
IMPORTANTE INTRODUCCIÓN
Los Salmos, como varios profetas, y el Génesis, esconden en su interior un secreto que ha permanecido oculto desde que se escribieran (2400-3400 años).
Este principio fundamental de Dios:
“Dios no puede ser injusto y culparnos del pecado de otros diferentes a nosotros mismos (Adán y Eva)”, nos descubre por qué fuimos cada uno de nosotros personalmente los que traicionamos en el cielo. La diferenciación entre “Eva”, que designa a aquellos que codiciaron más del “Árbol de la Vida” o Esencia de Dios, y escucharon a los demonios (que son los que de entre nosotros en el cielo por codicia, además, odiaron a Dios) y los “Adán”, que designa a los que traicionaron por amor hacia su pareja “Eva”, será que en el mundo, los primeros no estarán inscritos en el libro de la Vida y no podrán escuchar a Dios y los segundos (Adán) sí podrán escuchar a Dios, y estarán abiertos a Su Palabra. Todo conforme a la justicia, pues los Eva tendrán el oído abierto a los ídolos y demonios del mundo tal y como ocurrió en el cielo.
Estos grupos clasificados por el tipo de traición serán llamados o referenciados continuamente de distintas maneras en la Biblia: Adán muchas veces son también los que escuchan, los inscritos en el Libro, las aves (que se pueden separar del mundo), Hijos de Dios, Casa de Jacob; y Eva son los necios, sordos, Hijas de los hombres, ganado (no se separan del mundo, a merced de los reptiles y alimañas, o demonios), Efraím, raza de Canaán.
Es importante, aunque no imprescindible para entender este cuasi ensayo, leer “La lógica de Dios” o “Dios para Tontos” disponibles gratuitamente en formato PDF.
Es importante también entender por qué Dios creó el mundo a partir de esta traición en el cielo. Como siempre, la razón es que Dios es justo, no se puede negar a Sí mismo; era la única manera de salvar a los que traicionaron por amor (Adán). Dado que los demonios, una vez vencidos, con seguridad iban a ser destruidos, como treta desesperada apelan a la justicia de Dios alegando que los Adán fueron traidores también, y que ellos quieren su mismo destino; a esto llamaré Chantaje igualador y lo mencionaré varias veces. Así pues, para librar a los Adán sin caer en “injusticia”, Dios solo pudo crear una nueva naturaleza, el hombre, que pudiera escapar de esa justicia unida a la antigua naturaleza celestial; debía hacerlo todo nuevo. Pero hacer esto por decreto, sería declarado igualmente injusto también por los demonios, pues a ellos no se les daría la nueva naturaleza. Así que, solo podía haber una forma de hacer válida dicha naturaleza (válida para recibir la Esencia de Dios, para Vivir realmente). El primogénito de la naturaleza celestial, el primero creado por el que transcurre la Esencia de Dios en la máxima intensidad, aquél que complació a Dios Padre y por el que se crearon el resto de la criaturas celestes, debía validar con un acto de infinito amor la nueva naturaleza hombre. De esta manera, ningún demonio podría declarar como injusta esta “recreación” porque sería declarar injusta la suya propia. (Nótese que tú también, si estás en Gracia de Dios tienes algo de su Esencia o Espíritu en ti, pero no en la máxima intensidad; da igual que lo llames Dios o Alá o como te hayan enseñado; esto, que también los musulmanes pueden sentir, los escandaliza en lo referido a Jesús, nuestro hermano en lo creado, Hijo de Dios).
En cuanto a nosotros, la justicia está en que hemos perdido la naturaleza celestial; el hecho de que nos den una nueva naturaleza humana es una dádiva, la cual, como tal, no puede ser declarada injusta porque no la hayan recibido los demonios, pues Dios, una vez liberado cualquier condicionamiento en cuanto a la justicia, se la da a quien Él quiere.
Pero, por encima de todo Dios nos ha hecho libres. El demonio alega que, de cualquier forma (humana o celestial) nosotros lo elegiremos a él o seguiremos su camino, tal y como hicimos en el cielo. De ahí que tengamos que elegir en la tierra con nuestra nueva naturaleza validada por cristo en la cruz: a Dios frente al demonio. De esta manera, en la tierra se ponen todos los componentes necesarios para que podamos elegir. El demonio seguirá presente entre nosotros, sin cuerpo, pero tentándonos continuamente tal y como estaba en el cielo. El objeto de la codicia es el Oro y otros ídolos, sustituyendo a la Esencia de Dios como tal. Esto es así porque en el mundo Dios da un paso atrás como condición imprescindible para que este funcione como prueba y se pueda dar esa justicia. La Fe necesaria hasta ahora para creer en Dios no solo se establece como justa diferenciación entre los Adán y Eva, sino cómo parte de ese escondimiento de Dios que nos da la libertad de no creer en Él y poder elegir al mundo y sus ídolos, al demonio. Todo como siempre, se hace desde la justicia.
Debemos saber que Dios nos hizo diferentes ya en el cielo, y no solo por nuestra libertad y rasgos personales sino porque tenemos varios tamaños ya desde nuestra creación. Podemos pensar en las edades diferentes que teníamos cuando traicionamos en el cielo para entenderlo mejor. Estos tamaños de alma tienen caminos distintos puestos por Dios, pero todos ellos guiados por la misericordia (no se le exige igual a un niño que a un adulto). Son 7 caminos o religiones válidas para llenarnos de Él (estos 7 pueblos, tamaños, o caminos, serán constantemente referidos en la Biblia también). De la misma forma, nos tentarán demonios de nuestro tamaño, pues efectivamente hay también 7 tamaños entre los que odiaron.
También es importante saber por qué no figuran correlativos los Salmos estudiados. La razón es porque solo reviso los huérfanos, los que no tienen autor definido. Estos aparecen de la nada como si Dios mismo fuese su autor directo. Dado que están salteados en el libro de los Salmos, su orden no es correlativo, pero todos se estudian por orden de aparición, ninguno se ha retocado para hacer que coincidan esos tres tiempos y medio de salvación:
1º Traición en cielo, 2º Junto a Dios pero no en Dios.
3º En la tierra, ½ En la tierra capaces del Espíritu Santo otra vez.
Este ensayo y los otros ya nombrados se constituyen en prueba matemática, comprensible también para los necios del mundo, pues si nadie sabía de esto y se ha transmitido inconscientemente de generación en generación por miles de años, y pueblos diferentes que “escribieron” en la Biblia una trama subyacente común escondida (ver ensayos mencionados), solo pudo ser Dios su artífice, que lo revela ahora, sin duda porque se acerca el fin.
ALGUNAS CLAVES DE LOS SALMOS
Estudiaremos entonces en riguroso orden los Salmos huérfanos y veremos que hablan desde nuestra historia del cielo.
Veremos que los salmos están organizados en ciclos para exponer repetidamente los tres tiempos y medio de nuestra historia desde el cielo. Estos tiempos coinciden como ya he dicho, en los profetas Daniel, Isaías, Jeremías, Ezequiel, Oseas; también en el Génesis, y el Apocalipsis.
Así, veremos que estos ciclos están compuestos por uno o más salmos que nos hablan de nuestra estancia en el cielo. Otro o más salmos, (estos pueden no estar), que nos hablan del ofrecimiento de Jesús en el cielo para salvarnos que dará paso a la creación del Universo, tras el chantaje del demonio pidiendo el mismo destino que los Adán (este chantaje puede también quedar representado o no, pero suele venir reflejado normalmente como mentiras, trampas, redes tendidas a los Adán). Después viene nuestro tiempo en la tierra (3er tiempo), caracterizado por la petición de ayuda a Dios, Quien suele estar desaparecido, y la mención de accidentes geográficos. Además, un momento de salvación que representa el ½ tiempo y comienza con la pasión de Cristo. En ocasiones se muestra también nuestro tiempo actual en el que se abrirá el oído a los necios (Eva) y el fin del mundo. Cabe destacar que hay una sola rebelión en el cielo en el Salmo 1-2. La razón de que esto ocurra (aparte de para mantener oculto todo hasta hoy), es que de esta manera, esa única rebelión se mantendrá como 1er Tiempo de la estructura General, no solo del resto de las veces que se muestran lo 3 ½ tiempos (11 veces + la general= 12). Luego lo veremos.
Para entender la exégesis de los Salmos tendremos en cuenta que:
La diestra del Señor representa casi siempre a Jesucristo.
Jacob y la casa de Jacob, representa a los que escuchan (Adán), Efraím a Eva.
Un “cántico nuevo” representa un cambio de tiempo. Suele ser el paso a la tierra o al ½ Tiempo, cuando se valida nuestra naturaleza por cristo.
Las 10 plagas de Egipto dibujan los escalones de bajada desde el cielo (nuestra caída) y se relacionan en orden con los acontecimientos relatados en la historia de Israel durante el Éxodo que describen nuestra subida al cielo. Entre ambos, Dios obcecando al faraón nos mostró con la historia de Israel nuestra historia de traición y salvación desde el cielo. Ambas partes unidas representan a la Escalera de Jacob (esto conviene verlo, lo añado al final p.59 aunque está en los ensayos referidos).
Por último, apuntar que más de la mitad de este ensayo serán seguramente Salmos que se pueden encontrar en la Torá o en la Biblia. Dado que la lectura de este ensayo será predominantemente en PDF, no voy escatimar en hojas para mostrarlos. Si el lector, por no usar el ordenador o preferir el soporte en papel, ha comprado este cuadernillo en Amazon, debe saber que yo no me llevo nada por él (quizá así, no le sepa tan mal ver tantas hojas rellenas de Salmos que podría encontrar gratuitamente en su Biblia, o en su Torá).
Estructura General de 3 ½ Tiempos en los Salmos
Este esquema que pongo ahora derecha parece que tiene mucha información, pero es muy sencillo.
En la columna de la izquierda veremos que están las veces que los Salmos huérfanos exponen nuestra historia de Salvación desde el cielo. En total son once.
Por el lado derecho, vemos como la estructura en general muestra una vez más nuestra historia de salvación desde el cielo.
Como vemos, la rebelión está expuesta una sola vez al principio, Salmos 1-2. Esta es la manera de que sirva para todos los 11 grupos y además sea la rebelión de la estructura general.
Vemos también unos separadores con salmos independientes en los que se reflejan también los 3 ½ Tiempos pero en un solo salmo. Estos coinciden con el grupo de “Canciones de la Subidas” que son el grupo de salmos que forman nuestra tiempo en la tierra (dentro de las canciones de las subidas hay tres grupos de salmos con los 3 ½ tiempos, que se ven por el lado izquierdo).
Todos los Salmos se estudian lo suficiente para comprobar esto, el mensaje del cuadro, o breve descripción, es tan solo eso una breve descripción, para hacernos una idea del salmo en cuestión.
Como siempre los números son importantes para el Señor. Son 12 veces que vemos los 3 ½ Tiempos. 6 veces hasta que empiezan los “Cantos de las subidas” o el periodo de la tierra que comienza en el 7º (6 días tardó Dios en hacer el mundo, y al 7º descansó, según el Génesis). 3 veces dentro de esos Cantos de las subidas o periodo “Tierra” y otras 3 veces en el ½ Tiempo (en la tierra también pero con el Espíritu Santo y probablemente aquí al final se nos hable del juicio final posterior a la Tierra).
En la “Lógica de Dios” y “Dios para Tontos”, hice un breve estudio sobre porqué los Salmos que figuran en la Biblia Griega unidos 9 y 10 (formando el único 9), deberían estarlo también en la nuestra. La razón que aduje, con otros pares más, era que en ellos se expresaban los 3 ½ Tiempos, sin embargo, ya hemos visto que Dios todo lo hace bien; así, el 10 es un “sin nombre” o huérfano y forma parte de una estructura mucho mayor como vemos aquí. Aunque ha sido para mí como un hilo del que tirar, lo cierto es que estaban bien separados, tendré que corregir aquello.
Salmos 1, 2, 10, 33, 43, 66, 67. Primera representación de los 3½ Tiempos.
- 1er Tiempo. La Rebelión en el cielo.
Sal 1:1-6 Feliz quien no sigue consejos de malvados ni anda mezclado con pecadores ni en grupos de necios toma asiento, 2 sino que se recrea en la ley de Yahvé, susurrando su ley día y noche. 3 Será como árbol plantado entre acequias, da su fruto en sazón, su fronda no se agosta. Todo cuanto emprende prospera: 4 pero no será así con los malvados. Serán como tamo impulsado por el viento. 5 No se sostendrán los malvados en el juicio, ni los pecadores en la reunión de los justos. 6 Pues Yahvé conoce el camino de los justos, pero el camino de los malvados se extravía.
Este primer Salmo se puede aplicar al principio de la rebelión del cielo o incluso al principio de todos los Salmos. Como algo general nos dice que bienaventurados los ángeles fieles que no se mezclan con grupos de necios. Lo que nos habla de la rebelión; también a cada uno de nosotros claro, aunque nuestros pecados suelen ser más personales, raro es pecar en grupo. Somos individualistas y aunque recibamos influencias, claro, el pecado no solo será nuestro, sino que lo asimilamos como tal.
Sal 2:1-12 ¿Por qué se amotinan las naciones y los pueblos conspiran en vano? 2 Los reyes de la tierra se sublevan, los príncipes a una se alían en contra de Yahvé y su Ungido: 3 "Rompamos sus cadenas, sacudámonos sus riendas". 4 El que habita en el cielo se ríe, Yahvé se burla de ellos. 5 Después les habla irritado, los espanta lleno de cólera: 6 "Yo mismo he consagrado a mi rey, en Sion, mi monte santo". 7 Haré público el decreto de Yahvé: Él me ha dicho: "Tú eres mi hijo, hoy te he engendrado. 8 Si me lo pides, te daré en herencia las naciones, en propiedad la inmensidad de la tierra; 9 los machacarás con cetro de hierro, los pulverizarás como vasija de barro". 10 Por eso, reyes, pensadlo bien, aprended la lección, gobernantes de la tierra. 11 Servid a Yahvé con temor, 12 temblando besad sus pies; no sea que se irrite y os perdáis, pues su cólera se inflama en un instante. ¡Dichoso quien se acoge a él!
Esto está claro, y ahora nos habla de manera directa, tanto que debemos interpretarlo para aplicarlo desde el mundo, porque está claro que no todos los reyes en la tierra se ponen de acuerdo a la vez para atacar a Dios y su ungido. Esto es lo que ocurrió en el cielo cuando quisimos ser por nosotros mismos, ser sin Dios. Tomar tanta Esencia de Él como quisimos y luego separarnos. Por lo demás habla de Jesucristo, el primogénito que complació y por el que las demás criaturas celestiales fueron creadas. Parece que en (4) ya está la resolución de la rebelión. Aquí, en (2) tierra es cielo. Los reyes (al menos en el mundo) suelen simbolizar a los Adán, en el cielo todos teníamos Espíritu.
EN EL CIELO PERO NO EN DIOS
DESPUÉS DE LA REBELIÓN
Salmos 10…115
- 2do Tiempo.
Sal 10:1-18 Lámed. ¿Por qué, Yahvé, te quedas lejos, te escondes en las horas de la angustia? 2 El orgullo del malvado acosa al desdichado, queda preso en la trampa que le ha urdido. 3 (Mem). Sí, de su ambición se jacta el malvado, el codicioso que bendice desprecia a Yahvé; 4 (Nun). el malvado dice altanero: "¡No hay Dios!", es todo lo que piensa. 5 En toda ocasión triunfan sus empresas, tus decisiones le traen sin cuidado, desprecia a todos sus rivales. 6 Dice para sí: "Jamás vacilaré"; como en desgracia no se ve, 7 maldice. (Sámek). (Pe). Su boca rebosa fraude y doblez, oculta su lengua maldad y perfidia; 8 se aposta al acecho entre las cañas, y asesina al inocente a escondidas. (Ain). Todo ojos, espía al desvalido, 9 acecha escondido como león en su guarida, acecha para atrapar al desdichado, atrapa al desdichado atrayéndolo a su red. 10 (Sade). Espía, se agazapa, se encoge, el desvalido cae en su poder; 11 dice para sí: "Dios se ha olvidado, oculta su rostro, no ha de ver jamás". 12 Qof. ¡Álzate, Yahvé, extiende tu mano! ¡Nunca te olvides de los desdichados! 13 ¿Por qué desprecia el malvado a Dios, diciendo para sí: "No vendrás a indagar"? 14 Res. Has visto la pena y la tristeza, las miras y las tomas en tu mano: el desvalido en ti se abandona, tú eres el auxilio del huérfano. 15 Sin. ¡Quiebra el brazo del malvado, persigue su impiedad sin dejar rastro! 16 ¡Yahvé es rey por siempre, por los siglos; han sido barridos los paganos de su tierra! 17 Tau. El deseo de los humildes tú escuchas, Yahvé, confortas su corazón, les prestas atención, 18 para hacer justicia al huérfano, al vejado. ¡Cese ya en su terror el hombre salido de la tierra!
Esto es después de la rebelión. Estamos cerca de Dios, pero no en Dios. Correspondería al 2º Tiempo, al tiempo de Caín y Abel en el Génesis, que siguen representando a los mismos: Adán y Eva, pero vacíos de Dios.
- Paso a la Tierra. Paso al 3er Tiempo.
Sal 33:1-22 ¡Aclamad con júbilo, justos, a Yahvé, que la alabanza es propia de hombres rectos! 2 ¡Dad gracias a Yahvé con la cítara, tocad con el arpa de diez cuerdas; 3 cantadle un cántico nuevo, acompañad la música con aclamaciones! 4 Pues recta es la palabra de Yahvé, su obra toda fundada en la verdad; 5 él ama la justicia y el derecho, del amor de Yahvé está llena la tierra. 6 Por la palabra de Yahvé fueron hechos los cielos, por el aliento de su boca todos sus ejércitos. 7 Él recoge, como un dique, las aguas del mar, mete en depósitos los océanos. 8 ¡Tema a Yahvé la tierra entera, tiemblen ante él los habitantes del orbe! 9 Pues él habló y así fue, él lo mandó y se hizo. 10 Yahvé frustra el plan de las naciones, hace vanos los proyectos de los pueblos; 11 pero el plan de Yahvé subsiste para siempre, sus decisiones de generación en generación. 12 ¡Feliz la nación cuyo Dios es Yahvé, el pueblo que escogió para sí como heredad! 13 Yahvé observa de lo alto del cielo, ve a todos los seres humanos; 14 desde el lugar de su trono mira a todos los habitantes de la tierra; 15 él, que modela el corazón de cada uno, y repara en todas sus acciones. 16 No se salva el rey por su gran ejército, ni el guerrero escapa por su enorme fuerza. 17 Vana cosa el caballo para la victoria, ni con todo su vigor puede salvar. 18 Los ojos de Yahvé sobre sus adeptos, sobre los que esperan en su amor, 19 para librar su vida de la muerte y mantenerlos en tiempo de penuria. 20 Esperamos anhelantes a Yahvé, él es nuestra ayuda y nuestro escudo; 21 en él nos alegramos de corazón y en su santo nombre confiamos. 22 Que tu amor, Yahvé, nos acompañe, tal como lo esperamos de ti.
Parece claro, es la creación del mundo; nuestro paso al 3er Tiempo. En (10) el plan de las naciones es el de los rebeldes (naciones por ser 7 tamaños o tipos seguramente). De generación en generación, es de Edad en Edad (de Tiempo en Tiempo). El pueblo que escogió para sí como heredad (12) son los Adán.
Sal 43:1-5 Hazme justicia, oh Dios, defiende mi causa contra gente sin amor; del hombre traidor y falso líbrame. 2 Tú eres el Dios a quien me acojo: ¿por qué me has rechazado?, ¿por qué he de andar sombrío por la opresión del enemigo? 3 Envía tu luz y tu verdad, ellas me escoltarán, me llevarán a tu monte santo, hasta entrar en tu Morada. 4 Y llegaré al altar de Dios, al Dios de mi alegría. Te alabaré gozoso con la cítara, oh Dios, Dios mío. 5 ¿Por qué desfallezco ahora y me siento tan azorado? Espero en Dios, aún lo alabaré: ¡Salvación de mi rostro, Dios mío!
Estamos en la tierra. (2) Sombrío, rechazado porque después de la traición estamos vacíos del Espíritu Santo y no lo podremos recibir hasta la redención. En (3) pide el Espíritu para entrar de nuevo en el cielo.
- ½ Tiempo. Redención.
Sal 66:1-20 [Del maestro de coro. Cántico. Salmo.] Aclama a Dios, tierra entera, 2 cantad a su nombre glorioso, dadle honor con alabanzas, 3 decid a Dios: ¡Qué admirables tus obras! Por tu inmenso poder te adulan tus enemigos; 4 la tierra entera se postra ante ti y canta para ti, canta en tu honor. [Pausa.] 5 Venid y ved las obras de Dios, sus hazañas en favor del hombre: 6 convirtió el mar en tierra firme y cruzaron el río a pie. ¡Alegrémonos en él por aquello! 7 Con su poder domina por siempre, sus ojos vigilan a las naciones, para que no se amotinen los rebeldes. [Pausa.] 8 Bendecid, pueblos, a nuestro Dios, haced que se oiga su alabanza; 9 él nos devuelve a la vida, no deja que vacilen nuestros pies. 10 Tú nos probaste, oh Dios, nos purgaste igual que a la plata; 11 tú nos condujiste a la trampa, pusiste una correa a nuestros lomos, 12 cabalgadura de hombres nos hiciste; pasamos por el fuego y el agua, pero luego nos sacaste a la abundancia. 13 Entraré con víctimas en tu Casa, cumpliré mis promesas, 14 las que hicieron mis labios y en la angustia pronunció mi boca. 15 Te ofreceré pingües holocaustos, junto con el sahumerio de carneros, sacrificaré bueyes y cabritos. [Pausa.] 16 Venid, escuchad y os contaré, vosotros, los que estáis por Dios, todo lo que ha hecho por mí. 17 Mi boca lo invocó, mi lengua lo ensalzó. 18 Si hubiese maquinado algo malo, el Señor no me habría escuchado. 19 Pero Dios me ha escuchado, atento a la voz de mi oración. 20 ¡Bendito sea Dios, que no ha rechazado mi oración ni me ha retirado su amor!
La redención, En (6) “el mar en tierra firme”, la muerte en vida; el mar representa a la muerte casi siempre. (9) “él nos devuelve la vida”, no da el Espíritu Santo.
(9) “él nos devuelve a la vida”, referencia clara al Espíritu Santo dador de Vida.
Sal 67:1-8 [Del maestro de coro. Para instrumentos de cuerda. Salmo. Cántico.] 2 ¡Que Dios tenga piedad y nos bendiga, que nos muestre su rostro radiante!; [Pausa.] 3 conozca así la tierra su proceder, y todas las naciones su salvación. 4 ¡Que los pueblos te den gracias, oh Dios, que todos los pueblos te den gracias! 5 Que se alegren y exulten las naciones, pues juzgas al mundo con justicia, con equidad juzgas a los pueblos, gobiernas las naciones de la tierra. [Pausa.] 6 ¡Que los pueblos te den gracias, oh Dios, que todos los pueblos te den gracias! 7 La tierra ha dado su cosecha, Dios, nuestro Dios, nos bendice. 8 ¡Dios nos bendiga y lo teman todos los confines de la tierra!
Esto puede referirse al final del ½ tiempo, es decir ahora. Dice en (3) “conozca así la tierra y todas las naciones…”, pues pronto todo esto será conocido también los que antes no podían ver (los Eva).
(5) mención a las naciones de nuevo, puede hacer referencia a esos 7 caminos puestos por Dios.
(7) “la tierra ha dado su cosecha” nos habla ya del fin del mundo.
Nótese que este Salmo por ejemplo, indica que es “del maestro de coro”, pero no tiene autor definido por lo que está incluido dentro de los Salmos huérfanos. En este caso aunque no se contara este como huérfano, igualmente se habría cerrado el ciclo de los 3 ½ Tiempos con el Salmo anterior.
Salmos 71, 91, 92. Segunda representación de los 3½ Tiempos.
- Reinicio. En el cielo, 2do Tiempo. Consecuencias de la rebelión en el cielo.
Sal 71:1-23 A ti me acojo, Yahvé, ¡nunca quede confundido! 2 ¡Por tu justicia sálvame, líbrame, préstame atención y sálvame! 3 Sé mi roca de refugio, alcázar donde me salve, pues tú eres mi peña y mi alcázar. 4 ¡Líbrame, Dios mío, de la mano del impío, de las garras del perverso y el violento! 5 Pues tú eres mi esperanza, Señor, mi confianza desde joven, Yahvé. 6 En ti busco apoyo desde el vientre, eres mi fuerza desde el seno materno. ¡A ti dirijo siempre mi alabanza! 7 Soy el asombro de muchos, pero tú eres mi refugio seguro. 8 Mi boca rebosa de tu alabanza, de tu elogio todo el día. 9 No me rechaces ahora que soy viejo, no me abandones cuando decae mi vigor, 10 pues mis enemigos hablan mal de mí, los que me espían se ponen de acuerdo: 11 "¡Dios lo ha desamparado, perseguidlo, apresadlo, que no hay quien lo libre!". 12 ¡Oh Dios, no te quedes tan lejos, Dios mío, ven pronto a socorrerme! 13 Queden confundidos y avergonzados los que atentan contra mi vida; acaben en la vergüenza y la ignominia los que buscan mi mal. 14 Pero yo esperaré sin cesar, reiteraré tus alabanzas; 15 mi boca publicará tu justicia, todo el día tu salvación. 16 Publicaré las proezas de Yahvé, recordaré tu justicia, tuya sólo. 17 ¡Oh Dios, me has instruido desde joven, y he anunciado hasta hoy tus maravillas! 18 Ahora, viejo y con canas, ¡no me abandones, Dios mío!, hasta que pueda anunciar tu brazo a las futuras generaciones, tu poderío 19 y tu justicia, oh Dios, hasta los cielos. Tú que has hecho grandes cosas, ¡Oh Dios!, ¿quién como tú? 20 Tú que me has hecho pasar por tantos aprietos y desgracias, me devolverás de nuevo la vida, y de las simas de la tierra me sacarás otra vez; 21 sustentarás mi dignidad, te volverás a consolarme. 22 Y te daré gracias con el arpa, Dios mío, por tu fidelidad; tañeré para ti la cítara, ¡oh Santo de Israel! 23 Te aclamarán mis labios, mi vida que has rescatado; y mi lengua todo el día musitará tu justicia: pues se avergüenzan afrentados los que buscaban mi desgracia.
De nuevo se inicia con las consecuencias después de la traición en el cielo. Los demonios y Eva tratan de igualarse a los Adán por lo que lo tildan de traidor como ellos (10) “hablan mal de mí… se ponen de acuerdo”, de nuevo hace alusión a mentiras (ya que hablan mal de él, no dicen lo correcto o lo que es). Ya sabemos que fuimos traidores pero no de corazón pues fue el amor el que nos guio. Esto lo dice en (6) “en ti busco apoyo desde el vientre, eres mi fuerza desde el seno materno”, que quiere decir que en su estado inicial, con el Espíritu Santo en el interior, antes de la traición, el Adán se apoyaba en el Amor, en Dios. Algo que ahora, sin el Espíritu Santo, cuando ya somos otra cosa, débil (9) viejo, lo mantenemos aunque vacíos de Él. La comparación joven, viejo, viene al caso también porque vamos a dejar el cielo para caer a la tierra. Moriremos como criaturas celestiales, para ser hombres. Esto lo confirma cuando dice en (20) “y de las simas de la tierra me sacarás otra vez” después de bajarnos a la tierra nos sacará de allí. De hecho, este versículo comienza diciendo: “tú que me has hecho pasar por tantos aprietos y desgracias”, porque Dios nos vacía del Espíritu, “me devolverás de nuevo la vida”, me devolverás el Espíritu, y “me sacarás otra vez de las simas de la tierra”. Es muy claro, es lo que todos esperamos, volver al cielo, desde aquí abajo, las simas de la tierra. En (18) es casi más claro: “¡no me abandones, Dios mío!, hasta que pueda anunciar tu brazo a las futuras generaciones, tu poderío 19 y tu justicia”, como sabemos el brazo del Señor representa al primogénito, al complaciente que validó al resto de la naturaleza celestial y al único que podía validar (en justicia) la nueva naturaleza hombre (ver la introducción). Esas futuras generaciones, se refiere a tiempos o edades, en concreto a la tierra (3er tiempo) y después de la pasión (1/2 tiempo).Y eso es lo que podemos hacer los Adán (lo Evas no), anunciar a Jesucristo (en la Torá también con las claras prefiguraciones). Realmente desde el mundo, a no ser que esto se escribiera antes de Noé cuando vivían tropecientos años (lo cual también está escrito así para hablar de nuestras dos naturalezas por las que hemos pasado), no tiene mucho sentido pues ¿siendo viejo y canoso pides fuerzas para proclamar a las próximas generaciones (plural)?
El final, a partir del (21) lo termina hablando en futuro. En (23) “mi vida que has rescatado”, porque Dios ya ha decido no eliminar a los Adán, de hecho, por ellos (o por nosotros si tú eres un Adán) creará el Universo y mundo, para intentar salvarnos. Esto lo expresa en varios Salmos diciendo que “iba hacia la fosa y me has rescatado” [no exactamente, debería mirar] y cosas similares.
- 3er Tiempo. Paso a la Tierra.
Sal 91:1-16 El que habita al amparo de Elyón y mora a la sombra de Shaddai, 2 diga a Yahvé: "Refugio, baluarte mío, mi Dios, en quien confío". 3 Pues él te libra de la red del cazador, de la peste funesta; 4 con sus plumas te protege, bajo sus alas hallas refugio: escudo y armadura es su fidelidad. 5 No temerás el terror de la noche, ni la saeta que vuela de día, 6 ni la peste que avanza en tinieblas, ni el azote que devasta a mediodía. 7 Aunque caigan mil a tu lado y diez mil a tu derecha, a ti no te alcanzará. 8 Basta con que fijes tu mirada, verás la paga de los malvados, 9 tú que dices: "Yahvé es mi refugio", y tomas a Elyón por defensa. 10 El mal no te alcanzará, ni la plaga se acercará a tu tienda; 11 que él ordenará a sus ángeles que te guarden en todos tus caminos. 12 Te llevarán ellos en sus manos, para que en piedra no tropiece tu pie; 13 pisarás sobre el león y la víbora, hollarás al leoncillo y al dragón. 14 Puesto que me ama, lo salvaré, lo protegeré, pues me reconoce. 15 Me llamará y le responderé, estaré a su lado en la desgracia, lo salvaré y lo honraré. 16 Lo saciaré de larga vida, haré que vea mi salvación.
Aquí está la solución a aquel chantaje, por el que se pedía nuestra muerte para igualar el destino de los Adán y Eva. Esta es la creación del mundo y nuestra naturaleza, pues así nos “librará de la red del cazador, de la muerte funesta”. En (4) nos protege con su Espíritu “bajo sus alas”, y esto es así aunque ya estemos vacíos de Él. En (7) mil a tu lado serán los demonios seguramente, 10000 a tu derecha los Eva. Porque los unos ni siquiera tendrán cuerpo y lo otros quedarán como tontos o necios en el mundo, sin poder ver a Dios aunque esté delante de sus narices. En (10), la tienda es el alma, la cual, aunque vacía, no quedará rota como la de los demonios, ni inútil como la de los Eva. En (11) “todos tus caminos” se refiere a esas 7 religiones en el mundo en las que están distribuidos los Adán. Recordemos hay 7 tamaños de alma, igualmente hay 7 tamaños de demonios que quedan emparejados con el tamaño de nuestra alma; Dios no permite que algún demonio más fuerte que nosotros por su tamaño, se nos enfrente. Todo siempre se hace con justicia. En (12) “para que en piedra no tropiece” seguramente se refiera a “para que en la tierra…”. En (13) de nuevo alusión al hombre “pisarás”, “leoncillo y dragón”, Eva y demonio seguramente, “león y la víbora”, Eva y demonio quizá; es muy raro que se designen los Eva como leones, aquí, de hacerlo, solo lo hace por ser una bestia capaz de destruir al hombre. En (14) lo que nos diferencia de los Eva (sordos y necios), y por supuesto de los demonios. No obstante, el siguiente se siguen Salmo haciendo alusiones a esa llegada nuestra la tierra (92:8 aunque broten como hierba los malvados…).
- 1/2 Tiempo. En la Tierra y la Redención.
Sal 92:1-16 [Salmo. Cántico. Para el día de sábado.] 2 Es bueno dar gracias a Yahvé, cantar en tu honor, Altísimo, 3 publicar tu amor por la mañana y tu fidelidad por las noches, 4 con el arpa de diez cuerdas y la lira, acompañadas del rasgueo de la cítara. 5 Pues con tus hechos, Yahvé, me alegras, ante las obras de tus manos grito: 6 "¡Qué grandes son tus obras, Yahvé, y qué hondos tus pensamientos!" 7 El hombre estúpido no entiende, el insensato no lo comprende. 8 Aunque broten como hierba los malvados o florezcan todos los malhechores, acabarán destruidos para siempre; 9 ¡pero tú eres eternamente excelso! 10 Mira cómo perecen tus enemigos, se dispersan todos los malhechores. 11 Pero me dotas de la fuerza del búfalo, aceite nuevo derramas sobre mí; 12 veré la derrota del que me acecha, escucharé la caída de los malvados. 13 El justo florece como la palma, crece como un cedro del Líbano. 14 Plantados en la Casa de Yahvé, florecen en los atrios de nuestro Dios. 15 Todavía en la vejez producen fruto, siguen llenos de frescura y lozanía, 16 para anunciar lo recto que es Yahvé: "Roca mía, en quien no hay falsedad".
Esta es la redención, el ½ Tiempo. Todo el salmo se envuelve en torno al (11) “aceite nuevo derramas sobre mí”, que es el momento en el que Jesucristo gana potencialmente para nosotros el Espíritu Santo, valida a la naturaleza hombre. Aunque los Eva también podrían ahora recibirlo, siguen necios y sordos. Digo que todo está en torno a este versículo porque todo habla de este momento. En (3) “publicar tu amor por la mañana” es también después de la pasión, dar a conocer ese Espíritu que ahora podemos recibir, “tu fidelidad por la noches”, se refiere a ser justo y fiel en la tentación y aquí, habla de la fidelidad en el tercer tiempo antes de la pasión en la tierra. Las obras de “tus manos”, seguramente englobe a Jesucristo (mano, brazo derecho). En (6) hace referencia a la jugada magistral de Dios al crear una nueva naturaleza que escape a la antigua justicia haciendo la mayor de las justicias (creo que ni el demonio podía suponer que al morir Jesús amando en la cruz como hombre iba a validarnos a todos para recibir el Espíritu). En (8-10) nos hace un resumen de lo ocurrido, “aunque broten como hierba los malvados… florezcan los malhechores”, aunque los Eva y demonios también hayan venido al mundo (los Eva también se han hecho hombres), la pasión de cristo destruirá la cadena que nos ataba a los demonios y nos distinguirá de los Eva; esos ídolos del mundo que ellos persiguen ahora para nosotros se convierten en nada al compararlos con lo que ya podemos palpar en nuestro interior. Ahora (14) “florecemos como la palma, plantados en la Casa de Yahvé”, pues el Espíritu Santo es el Reino de Dios en nosotros.
Salmos 93-100. Tercera representación de los 3½ Tiempos.
- Reinicio. En el cielo, 2do Tiempo. Dios acaba con la Rebelión en el cielo.
Sal 93:1-5 Reina Yahvé, vestido de majestad, Yahvé, vestido y ceñido de poder, y así el orbe está seguro, no vacila. 2 Tu trono está firme desde antaño, desde la eternidad existes tú. 3 Levantan los ríos, Yahvé, levantan los ríos su voz, los ríos levantan su bramido; 4 más que el ruido de aguas caudalosas, más imponente que las olas del mar, es imponente Yahvé en las alturas. 5 Son firmes del todo tus dictámenes, la santidad es el ornato de tu casa, oh Yahvé, por días sin término.
Este es el momento en el que Dios termina con la rebelión en el cielo. Veremos muchas veces en los Salmos y en otras partes de la Biblia que este momento se describe como el “desbordamiento” de Aguas, las cuales hacen referencia al Espíritu Santo. Quizá porque sea todo ese Espíritu perdido por los traidores, o se refiera al enviado por el Padre, pero después de aquello quedamos vacíos, tirados como fundas desinfladas junto a Dios pero ya no en Dios.
Sal 94:1-23 ¡Dios de la venganza, Yahvé, Dios de la venganza, aparece! 2 ¡Levántate, juez de la tierra, da su merecido a los soberbios! 3 ¿Hasta cuándo los malvados, Yahvé, hasta cuándo triunfarán los malvados? 4 Cacarean diciendo insolencias, se pavonean todos los malhechores. 5 Aplastan a tu pueblo, Yahvé, humillan a tu heredad. 6 Matan al forastero y a la viuda, asesinan al huérfano. 7 Dicen: "Yahvé no lo ve, no lo advierte el Dios de Jacob". 8 ¡Comprended, estúpidos del pueblo!, insensatos, ¿cuándo asesaréis? 9 El que implantó la oreja, ¿no va a oír? El que formó los ojos, ¿no ha de ver? 10 El que corrige a los pueblos, ¿no ha de castigar? El que enseña a los hombres, ¿no conocerá? 11 Yahvé conoce los pensamientos del hombre, sabe que sólo son un soplo. 12 Feliz el hombre a quien educas, Yahvé, aquel a quien instruyes en tu ley, 13 para aliviarlo tras los días amargos, mientras se cava la fosa para el malvado. 14 Pues Yahvé no dejará a su pueblo, no abandonará a su heredad; 15 al justo se le devolverá su derecho, tendrán buen fin los rectos de corazón. 16 ¿Quién se alzará a mi favor contra el malvado?, ¿quién estará a mi favor contra el malhechor? 17 Si Yahvé no viniese en mi ayuda, pronto habitaría en el silencio. 18 Cuando digo: "Vacila mi pie", tu amor, Yahvé, me sostiene; 19 en el colmo de mis cuitas interiores, tus consuelos me confortan por dentro. 20 ¿Estás aliado a un tribunal de perdición, que eleva la tiranía a rango de ley?21 Atropellan la vida del justo, condenan vidas inocentes. 22 Pero Yahvé es mi baluarte, mi Dios, mi roca de refugio; 23 les pagará con su propia maldad, los aniquilará por su malicia, los aniquilará Yahvé, nuestro Dios.
Estamos después de esa traición, atacados por los demonios y los Eva que quieren llevarnos junto a ellos a la destrucción, o bien, salvarse con nosotros, nos intentan utilizar como escudo. Este tiempo corresponde en el Génesis al tiempo de Caín y Abel cuando Dios busca la manera de salvarnos. Los demonios y Evas parece que se relaja viendo que Dios retrasa su justicia hacia ellos (7) “dios no lo ve, no lo advierte…”. En realidad la única razón por la que aún siguen vivos es que Dios intenta salvar a los Adán, o intenta separar el destino de unos y de otros. En (15) “al justo devolverá su derecho”, porque aunque sigamos en el cielo ahora estamos vacíos del Espíritu. De nuevo en (20) hace referencia a la falsedad: “¿Estás aliado a un tribunal de perdición, que eleva la tiranía a rango de ley?”, esa es la falsa justicia que piden los demonios y Evas para su chantaje igualador.
- 3er Tiempo. La Tierra.
Sal 95:1-11 Venid, cantemos gozosos a Yahvé, aclamemos a la Roca que nos salva; 2 entremos en su presencia dándole gracias, aclamándolo con salmos. 3 Porque un gran Dios es Yahvé, Rey grande sobre todos los dioses; 4 él sostiene las honduras de la tierra, suyas son las cumbres de los montes; 5 suyo el mar, que él mismo hizo, la tierra firme que formaron sus manos. 6 Entrad, rindamos homenaje inclinados, ¡arrodillados ante Yahvé que nos creó! 7 Porque él es nuestro Dios, nosotros somos su pueblo, el rebaño de sus pastos. ¡Ojalá escuchéis hoy su voz!: 8 "No seáis tercos como en Meribá, como el día de Masá en el desierto, 9 allí vuestros padres me probaron, me tentaron aunque vieron mis obras. 10 Cuarenta años me asqueó esa generación, y dije: Son gente de mente desviada, que no reconocen mis caminos. 11 Por eso juré en mi cólera: ¡No entrarán en mi reposo!"
La solución que ha encontrado Dios es hacerse invisible para nuestra justificación y crear una nueva naturaleza para luego hacerla capaz de recibir el Espíritu, todo en justicia. Así, crea el mundo, referenciado en (4-5), en (6) menciona esa creación del hombre, que en realidad es una recreación o transformación en algo diferente. En (8) se vale de la historia de Israel para explicar lo que ocurrió en el cielo (o más bien, cambió la historia de Israel para dibujar lo que pasó en el cielo), pues esos que murmuraron en Meribá porque no tenían agua, somos nosotros después de la traición, en el 2º tiempo, en el cielo, cuando estábamos sin Espíritu Santo (Agua). Esos 40 años que esa generación asqueó a Dios (10) son ese cambio de Edad o de Tiempo, y esa roca que golpeó Moisés en Meribá es el mundo en el que Jesús hará brotar el Espíritu para nosotros.
- ½ Tiempo. Redención.
Sal 96:1-13 ¡Cantad a Yahvé un nuevo canto, canta a Yahvé, tierra entera, 2 cantad a Yahvé, bendecid su nombre! Anunciad su salvación día a día, 3 contad su gloria a las naciones, sus maravillas a todos los pueblos. 4 Pues grande es Yahvé y digno de alabanza, más temible que todos los dioses. 5 Pues nada son los dioses paganos. Pero Yahvé hizo los cielos; 6 gloria y majestad están ante él, poder y esplendor en su santuario. 7 Tributad a Yahvé, familias de los pueblos, tributad a Yahvé gloria y poder, 8 tributad a Yahvé la gloria de su nombre. Traed ofrendas, entrad en sus atrios, 9 postraos ante Yahvé en el atrio sagrado, ¡tiemble ante su rostro toda la tierra! 10 Decid a los gentiles: "¡Yahvé es rey!" El orbe está seguro, no vacila; él gobierna a los pueblos rectamente. 11 ¡Alégrense los cielos, goce la tierra, retumbe el mar y cuanto encierra; 12 exulte el campo y cuanto hay en él, griten de gozo los árboles del bosque, 13 delante de Yahvé, que ya viene, viene, sí, a juzgar la tierra! Juzgará al mundo con justicia, a los pueblos con su lealtad.
Este Salmo, nos habla de la redención. Los lores y alabanzas (1-8) del principio son como la exultación o celebración de un exitoso plan. El nuevo canto (1) hace referencia a nuestra naturaleza validada seguramente. En (9) ya nos adelanta que podremos estar en la presencia de Dios (postraos ante Él). “tiemble ante su rostros toda la tierra” nos dice que se hace presente de nuevo. (11) “retumbe el mar y cuanto encierra” se refiere a la muerte (=mar) y seguramente a los Eva. Los (12) “árboles” somos nosotros. (13) “a juzgar la tierra” porque hasta ahora, al estar secuestrados por los demonios (su chantaje igualador), Dios ha retenido la justicia de lo acaecido en el cielo. Los demonios campan casi a sus anchas entre nosotros y los Eva también, precisamente para esa justificación. Y de no haberse dado la pasión y validación del hombre, se seguiría repitiendo esta dependencia de Edad en Edad. Puede también hacer referencia a esa palabra que dice algo sobre “el que no cree en mí ya está juzgado, y el que cree no necesita juicio” o algo así, lo que a su vez tiene que ver con esa distinción entre Adán / Eva que hace que unos escuchen y estén abiertos a Dios y otros no. Hasta la pasión ese Espíritu no se hizo presente entre los Adán por lo que, aunque había diferencia de vida entre unos (justos) y otros (necios idólatras del mundo), no había realmente una “guerra declarada”. Cuando el Espíritu llega a los Adán, los Eva se vuelven envidiosos ante Aquello que nos da la Vida y la felicidad, provocando a la vez que menospreciemos sus anhelos.
Sal 97:1-12 ¡Reina Yahvé! ¡Exulte la tierra, se alegren las islas numerosas! 2 Nubes y densa bruma lo rodean, justicia y derecho afianzan su trono. 3 Delante de él avanza fuego, que abrasa en torno a sus adversarios; 4 iluminan el orbe sus relámpagos, lo ve la tierra y se estremece. 5 Los montes se derriten como cera, ante el Dueño de toda la tierra; 6 los cielos proclaman su justicia, los pueblos todos ven su gloria. 7 ¡Se avergüenzan los que adoran ídolos, los que se glorían en puras vanidades; todos los dioses le rinden homenaje! 8 Sion lo oye y se alboroza, exultan las hijas de Judá a causa de tus juicios, Yahvé. 9 Porque tú eres Yahvé, Altísimo sobre toda la tierra, por encima de todos los dioses. 10 Yahvé ama al que odia el mal, preserva la vida de sus fieles, los libra de la mano del malvado. 11 La luz despunta para el justo, el gozo para los rectos de corazón. 12 Justos, alegraos en Yahvé, celebrad su memoria sagrada.
Esto parece ahora, al final del ½ Tiempo, cuando los necios por fin puedan escuchar. Podríamos englobarlo con el fin del mundo por los primeros versículos, de cualquier manera, ambos, el fin del ½ Tiempo y el fin del mundo coinciden. Las islas como sabemos es uno de los accidentes geográficos nombrados en la lista para designar los 7 tamaños del alma, que a su vez tienen 7 caminos o religiones. Dado que las islas están rodeadas de mar = muerte, pueden designar a los más pequeños o más bien a los necios del todo, los completamente ateos que solo podrán ver a Dios por la razón del hombre. De ahí que se mencione siempre con tanta frecuencia la justicia de Dios (2) “justicia y derecho afianzan tu trono”, porque al final, todo se hace por justicia, todo es razonablemente justo. Así, ese fuego más allá del fin del mundo, creo que antes nos habla de esa razón que descubrirá a Dios y será inapelable o inmune a los ataques de los demonios y sus tentaciones. Por supuesto, sabemos que Él es todo poderoso, y ese fuego podría ser fruto de un pestañear suyo, pero sabemos que no se ha servido de Su poder, realmente para, en justicia, salvarnos. Así, creo que ese fuego representa esa revelación de secretos (que a su vez se hace en justicia, pues solo se puede hacer al final del mundo, ya que entonces Dios dejará de actuar de golpe en la historia de vida de los que vivamos ahora, lo cual sería un perjuicio para nosotros que Él ajusta o nivela con esta revelación). Así, en (6) “los pueblos todos ven su gloria” nos habla de eso mismo, de esa revelación. Está escrito que al final de los tiempos el lobo pacerá con el cordero o algo así, y esto no será porque Dios se haga presente milagrosamente delante de nuestras narices, rompiendo la física, sino porque se hará presente por algo igualmente imposible pero desde el mundo, dentro de las normas que Él estableció para él. Con las secretos ocultos en las Escrituras hace miles años que se muestran ahora como algo nuevo que antes no habíamos visto. En (11) está claro y hace referencia a esos escritos pasados que solo pudieron ser inducidos por Él “memoria sagrada”.
Sal 98:1-9 [Salmo.] Cantad a Yahvé un nuevo canto, porque ha obrado maravillas; le sirvió de ayuda su diestra, su santo brazo. 2 Yahvé ha dado a conocer su salvación, ha revelado su justicia a las naciones; 3 se ha acordado de su amor y su lealtad para con la casa de Israel. Los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios. 4 ¡Aclama a Yahvé, tierra entera, gritad alegres, gozosos, cantad! 5 Tañed a Yahvé con la cítara, con la cítara al son de instrumentos; 6 al son de trompetas y del cuerno aclamad ante el rey Yahvé. 7 Brame el mar y cuanto encierra, el mundo y cuantos lo habitan, 8 aplaudan los ríos, aclamen los montes, 9 ante Yahvé, que llega, que llega a juzgar la tierra. Juzgará el mundo con justicia, a los pueblos con equidad.
Seguimos hablando de lo mismo, al final del ½ tiempo “Yahvé ha dado a conocer su salvación”, revela lo escondido. El cántico nuevo es el que representa nuestra naturaleza validada en la Pasión, la cual se produjo, en pasado aquí, “con la ayuda de su diestra, su santo brazo”=Jesús. En (4) Tierra entera, pues por todos será conocido.
Sal 99:1-9 Reina Yahvé, tiemblan los pueblos; entronizado sobre querubines, vacila la tierra. 2 Grande es Yahvé en Sion, excelso sobre todos los pueblos. 3 Alaben tu nombre grande y terrible: Él es santo. 4 Poderoso rey que ama la justicia, tú has establecido la base del derecho, juicio y justicia ejerces en Jacob. 5 Exaltad a Yahvé, nuestro Dios, postraos ante el estrado de sus pies: Él es santo. 6 Moisés y Aarón entre sus sacerdotes, Samuel entre los que invocaban su nombre, invocaban a Yahvé y él les respondía. 7 Les habló desde la columna de nube y ellos guardaban sus dictámenes, la ley que él les entregó. 8 Yahvé, Dios nuestro, tú les respondías, eras para ellos un Dios de perdón, aunque vengabas sus delitos. 9 Exaltad a Yahvé, nuestro Dios, postraos en su monte santo: santo es Yahvé, nuestro Dios.
Nada nuevo, seguimos al final del ½ tiempo. Hace referencia a algunos profetas con los que el Señor hablaba en el pasado.
Sal 100:1-5 [Salmo.] Para la acción de gracias. ¡Aclama a Yahvé, tierra entera, 2 servid a Yahvé con alegría, llegaos a él con júbilo! 3 Sabed que Yahvé es Dios, él nos ha hecho y suyos somos, su pueblo y el rebaño de sus pastos. 4 Entrad por sus puertas dando gracias, por sus atrios cantando alabanzas, dadle gracias, bendecid su nombre. 5 Pues bueno es Yahvé y eterno su amor, su lealtad perdura de edad en edad.
Este ya nos habla del fin del mundo o del Juicio final, o más bien cuando ya esté terminado ese juicio porque nos anima a (2) “llegarnos a Él”, (4) “Entrad por sus puertas dando gracias…por sus atrios”. Hace referencia en (5) a la lealtad que perdura de Edad en Edad. Esa lealtad es una lealtad a nosotros que vivimos con Él en cielo y ahora, en edades diferentes. Es una lealtad personal entre nosotros, no es una lealtad a una idea o a unos principios, lo cual sería loable claro, pero no tan raro ni extraordinario como mantener esa alianza con nosotros que ha sobrevivido Eones o Edades diferentes, naturalezas diferentes y en la que ha intervenido dolorosamente Su amadísimo primogénito, nuestro hermano en lo creado, para salvarnos.
Salmos 102, 104, 107, 111-115. Cuarta representación de los 3½ Tiempos.
- Reinicio. En el cielo, 2do Tiempo. Consecuencias de la rebelión en el cielo.
Sal 102:1-29 [Oración del afligido que, en su angustia, derrama su llanto ante Yahvé.] 2 Escucha, Yahvé, mi oración, llegue mi grito hasta ti; 3 no ocultes de mí tu rostro el día de la angustia; tiende hacia mí tu oído, ¡responde presto el día en que te invoco! 4 Pues mis días como humo se disipan, mis huesos calientan como brasas; 5 mi corazón se seca como heno segado, pues me olvido de comer mi pan; 6 agotado de tanto sollozar, mis huesos se pegan a mi piel. 7 Me parezco al búho del páramo, estoy como lechuza entre ruinas; 8 de continuo me desvelo y gimo cual solitario pájaro en tejado; 9 todo el día me insultan mis enemigos, los que me alaban maldicen por mi nombre. 10 Ceniza como en vez de pan, mezclo mi bebida con lágrimas, 11 debido a tu cólera y tu enojo, pues me alzaste y luego me tiraste. 12 Mis días declinan como sombra, me voy secando como el heno. 13 Pero tú, Yahvé, reinas por siempre, tu memoria alcanza de edad en edad. 14 Te alzarás, compadecido de Sion, que es tiempo de apiadarte de ella (porque se ha cumplido el plazo). 15 Tus siervos aman sus piedras, sienten compasión de sus ruinas. 16 Temerán las naciones el nombre de Yahvé, todos los reyes de la tierra tu gloria; 17 cuando Yahvé reconstruya Sion y aparezca lleno de esplendor, 18 se volverá a la oración del despojado, su oración no despreciará. 19 Quedará esto escrito para la edad futura, y un pueblo renovado alabará a Yahvé: 20 se ha inclinado desde su santa altura, desde el cielo ha mirado a la tierra, 21 para escuchar el suspiro del cautivo, para librar a los que aguardan la muerte. 22 Para proclamar en Sion el nombre de Yahvé, y su alabanza en Jerusalén; 23 cuando a una se congreguen los pueblos y los reinos para servir a Yahvé. 24 Él ha agotado mi fuerza por el camino, ha reducido el número de mis días. 25 Me dije: ¡Dios mío, en la mitad de mis días no me lleves, tú, que vives por generaciones! 26 Desde antiguo fundaste la tierra, los cielos son obra de tus manos; 27 ellos pasan, mas tú permaneces, todos como ropa se desgastan, serán como vestido que se muda. 28 Mas tú eres el mismo, no tienen fin tus años. 29 Los hijos de tus siervos tendrán una morada, su descendencia subsistirá en tu presencia.
Aquí estamos de nuevo tras la rebelión del cielo. En (4-6) hace varias referencias a que vacíos del Espíritu. En (9) de nuevo hace referencia a esa mentiras o maledicencias de los demonios y Evas sobre Adán, ya que quieren dar peso a su chantaje igualador. Insultar es menospreciar, descalificar, rebajar; no utiliza la palabra mentira pero viene a ser parecido, pues como última instancia, si llamas cerdo a un cerdo no lo estás insultando, sino llamándolo por su nombre.
En (24) de nuevo nos habla de esa pérdida del Espíritu que nos hace dejar de ser lo que fuimos, celestiales y eternos como nuestro padre.
En (26) y en (13) hace referencia a esos tiempos o Edades, que Dios utilizará para salvarnos. En (26) nos dice que desde el cielo ya existente, crea la tierra, para eso mismo, para salvarnos.
- 3er Tiempo. La Tierra.
Sal 104:1-35 ¡Bendice, alma mía, a Yahvé! ¡Yahvé, Dios mío, qué grande eres! Vestido de esplendor y majestad, 2 te arropa la luz como un manto, como una tienda extiendes el cielo, 3 levantas sobre las aguas tus moradas; te sirven las nubes de carroza, te deslizas sobre las alas del viento; 4 tomas por mensajeros a los vientos, al fuego llameante por ministro. 5 Sobre sus bases posaste la tierra, inconmovible para siempre jamás. 6 Como un ropaje la cubría el océano, sobre los montes persistían las aguas; 7 a tu bramido emprendieron la huida, se precipitaron al escuchar tu trueno, 8 subiendo a los montes, bajando a los valles, hasta el lugar que tú les asignaste; 9 les pusiste un límite infranqueable, por que no vuelvan a anegar la tierra. 10 A los valles envías manantiales, que van discurriendo por vaguadas; 11 abrevan a las bestias del campo, apagan la sed de los onagros; 12 junto a ellos habitan las aves, que entonan su canto entre la fronda. 13 Riegas los montes desde tu alta morada, con la humedad de tus cámaras saturas la tierra; 14 haces brotar hierba para el ganado, y las plantas para el uso del hombre, a fin de que saque pan de la tierra, 15 y el vino que recrea el corazón del hombre, para que lustre su rostro con aceite y el pan conforte el corazón del hombre. 16 Los árboles de Yahvé se empapan a placer, y los cedros del Líbano plantados por él; 17 allí ponen los pájaros su nido, su casa en su copa la cigüeña. 18 Los riscos acogen a los rebecos, las rocas cobijan a los damanes. 19 Creó la luna para marcar los tiempos, y el sol, que conoce su ocaso; 20 mandas la tiniebla y cae la noche, donde rondan las fieras del bosque; 21 los leoncillos rugen por la presa y reclaman a Dios su alimento. 22 Cuando sale el sol, se recogen, y van a echarse en sus guaridas; 23 el hombre sale a su trabajo, para hacer su faena hasta la tarde. 24 ¡Cuán numerosas tus obras, Yahvé! Todas las hiciste con sabiduría, de tus creaturas se llena la tierra. 25 Está el mar: grande y dilatado, con un incontable hervidero de animales, grandes y pequeños; 26 lo surcan los navíos y Leviatán, a quien creaste para jugar con él. 27 Todos ellos esperan de ti que les des su comida a su tiempo; 28 se la das y ellos la toman, abres tu mano y se sacian de bienes. 29 Si escondes tu rostro, desaparecen, les retiras tu soplo y expiran, y retornan al polvo que son. 30 Si envías tu aliento, son creados, y renuevas la faz de la tierra. 31 ¡Gloria a Yahvé por siempre, en sus obras Yahvé se regocije! 32 El que mira a la tierra y tiembla, toca los montes y humean. 33 Cantaré a Yahvé mientras viva, tañeré para mi Dios mientras exista. 34 ¡Que le sea agradable mi poema! Yo tengo mi gozo en Yahvé. 35 ¡Desaparezcan los pecadores de la tierra, nunca más existan los malvados! ¡Bendice, alma mía, a Yahvé! ¡Aleluya!
Esto parece claro, es la creación del mundo, no tiene doble sentido parece.
Sal 105:1-45 ¡Dad gracias a Yahvé, invocad su nombre, divulgad entre los pueblos sus hazañas! 2 ¡Cantadle, tañed para él, recitad todas sus maravillas; 3 gloriaos en su santo nombre, se alegren los que buscan a Yahvé! 4 ¡Buscad a Yahvé y su poder, id tras su rostro sin tregua, 5 recordad todas sus maravillas, sus prodigios y los juicios de su boca! 6 Raza de Abrahán, su siervo, hijos de Jacob, su elegido: 7 él, Yahvé, es nuestro Dios, sus juicios afectan a toda la tierra. 8 Él se acuerda siempre de su alianza, palabra que impuso a mil generaciones, 9 aquello que pactó con Abrahán, el juramento que hizo a Isaac, 10 que puso a Jacob como precepto, a Israel como alianza eterna: 11 "Te daré la tierra de Canaán como lote de vuestra herencia". 12 Cuando eran poco numerosos, gente de paso y forasteros, 13 vagando de nación en nación, yendo de un reino a otro pueblo, 14 a nadie permitió oprimirlos, por ellos castigó a los reyes: 15 "Guardaos de tocar a mis ungidos, no hagáis daño a mis profetas". 16 Trajo el hambre a aquel país, todo bastón de pan rompió; 17 a un hombre envió por delante, José, vendido como esclavo. 18 Trabaron sus pies con grilletes, por su cuello pasaron cadenas, 19 hasta que se cumplió su predicción y la palabra de Yahvé lo acreditó. 20 El rey ordenó ponerlo en libertad, el soberano de pueblos mandó soltarlo; 21 lo nombró administrador de su casa, soberano de toda su hacienda, 22 para instruir a su gusto a sus magnates, y hacer sabios a sus ancianos. 23 Entonces Israel entró en Egipto, Jacob residió en el país de Cam. 24 Multiplicó sobremanera a su pueblo, lo hizo más fuerte que sus opresores; 25 cambió su corazón para que odiaran a su pueblo y usaran malas artes con sus siervos. 26 Envió a Moisés, su siervo, y a Aarón, que había elegido, 27 que ejecutaron signos en Egipto, prodigios en el país de Cam. 28 Mandó tinieblas, y hubo tinieblas, pero ellos desafiaron sus palabras. 29 Trocó sus aguas en sangre, haciendo que sus peces murieran. 30 Pululaban ranas en su país, que entraban en las estancias reales; 31 lo mandó y vinieron mosquitos, cínifes por toda su comarca. 32 Les dio por lluvia granizo, rayos por toda su tierra; 33 dañó viñedos e higueras, quebró los árboles del país. 34 Ordenó que llegara la langosta y el pulgón en número incontable; 35 devoraron la hierba del país, devoraron el fruto del suelo. 36 Hirió a los primogénitos del país, las primicias de su virilidad. 37 Los sacó cargados de oro y plata, ni uno solo flaqueó de entre las tribus. 38 Egipto se alegró de su salida, llenos como estaban de terror. 39 Desplegó una nube para cubrirlos, un fuego que alumbrara en la noche. 40 Pidieron y mandó codornices, de pan del cielo los hartó; 41 hendió la roca y brotaron las aguas, como río corrieron por los sequedales. 42 Recordando su palabra sagrada, dada a Abrahán, su servidor, 43 sacó a su pueblo con alborozo, a sus elegidos en medio del júbilo. 44 Les dio las tierras de los paganos, el sudor de las naciones heredaron, 45 para que así guarden sus preceptos y observen todas sus leyes.
Casi todo esto que no subrayo también parece que es conforme a la historia, porque, además de lo que “la historia de Israel” dibuja en el cielo sobre la historia de todos nosotros, lo cierto es que ocurrió aquí abajo en la tierra y ahora coincide ponerlo aquí porque estamos en el periodo de la tierra. Nótese entonces que pone hechos concretos y personajes concretos de la Historia de Israel.
Sal 106:1-48 ¡Aleluya! ¡Dad gracias a Yahvé porque es bueno, porque es eterna su misericordia! 2 ¿Quién contará las proezas de Yahvé o proclamará toda su alabanza? 3 ¡Dichosos los que guardan el derecho, los que practican siempre la justicia! 4 ¡Acuérdate de mí, Yahvé, hazlo por amor a tu pueblo, ven a ofrecerme tu ayuda. 5 Para que vea la dicha de tus elegidos, me alegre con la alegría de tu pueblo y me felicite con tu heredad! 6 Hemos fallado igual que nuestros padres, hemos cometido injusticias e iniquidades; 7 nuestros padres, estando en Egipto, no comprendieron tus prodigios. No se acordaron de tu gran misericordia, se rebelaron contra el Altísimo junto al mar de Suf. 8 Pero él los salvó por amor de su nombre, para dar a conocer así su poderío. 9 Increpó al mar de Suf y se secó, las olas eran un páramo a su paso; 10 los salvó de la mano del adversario, de la mano del enemigo los libró. 11 El agua anegó a sus adversarios, ni uno solo de entre ellos quedó. 12 Entonces creyeron en sus palabras y entonaron todos su alabanza. 13 Mas pronto se olvidaron de sus obras, no tuvieron en cuenta sus propósitos; 14 en el desierto ardían de avidez, a Dios tentaban en la estepa. 15 Él les concedió lo que pedían, y envió fiebre a sus gargantas. 16 En el campamento envidiaron a Moisés, y a Aarón, el santo de Yahvé. 17 La tierra se abrió y tragó a Datán, y cubrió a la cuadrilla de Abirón; 18 ardió fuego contra su cuadrilla, una llama consumió a los malvados. 19 Se hicieron un becerro en Horeb, ante una imagen fundida se postraron, 20 y fueron a cambiar su gloria por la imagen de un buey que come hierba. 21 Olvidaron a Dios, su salvador, al autor de hazañas en Egipto, 22 de prodigios en tierra de Cam, de portentos en el mar de Suf. 23 Dispuesto estaba a exterminarlos, si no es porque Moisés, su elegido, se mantuvo en la brecha frente a él, para apartar su furor destructor. 24 Desdeñaron una tierra deleitosa, no tuvieron fe en su palabra; 25 murmuraron dentro de sus tiendas, no escucharon la voz de Yahvé. 26 Y él, mano en alto, juró hacerles caer en el desierto, 27 desperdigar su estirpe entre los pueblos, dispersarlos por todas las naciones. 28 Se aparejaron con Baal Peor y comieron sacrificios de muertos. 29 Así lo irritaron con sus obras, y una plaga descargó sobre ellos. 30 Pero Pinjás intervino en un juicio y así la plaga se detuvo; 31 esto se le contó como justicia de edad en edad, para siempre. 32 Lo enojaron en las aguas de Meribá, y mal le fue a Moisés por su culpa, 33 pues llegaron a amargarle el espíritu y habló a la ligera con sus labios. 34 No exterminaron a los pueblos que Yahvé les había indicado; 35 se mezclaron con los paganos y aprendieron sus prácticas. 36 Adoraron a sus ídolos, que les sirvieron de trampa; 37 sacrificaron a sus hijos y a sus hijas a demonios. 38 Sangre inocente derramaban, la sangre de sus hijos y sus hijas, inmolados a los ídolos de Canaán, y profanaron el país con crímenes. 39 Se mancillaron con sus obras, se prostituyeron con sus prácticas. 40 Entonces se inflamó la cólera de Yahvé contra su pueblo y aborreció su heredad. 41 Los entregó en manos de los paganos, fueron dominados por los adversarios; 42 sus enemigos los tiranizaron, quedaron humillados bajo su mano. 43 Numerosas veces los libró, pero ellos, rebeldes a sus planes, seguían hundiéndose en la culpa; 44 pero él se fijó en su angustia, dando oído a sus clamores. 45 Por ellos se acordó de su alianza, se enterneció con su inmenso amor; 46 hizo que de ellos se apiadaran aquellos que cautivos los tenían. 47 ¡Sálvanos, Yahvé, Dios nuestro, reúnenos de entre las naciones, para dar gracias a tu santo nombre y honrarnos cantando tu alabanza! 48 ¡Bendito Yahvé, Dios de Israel, desde siempre y para siempre! Y todo el pueblo diga: ¡Amén! ¡Aleluya!
Bien, esto parece continuar con esa historia conforme al orden que debe llevar. Y menciona hechos concretos de la Biblia.
- ½ Tiempo. La redención.
Sal 107:1-43 ¡Dad gracias a Yahvé porque es bueno, porque es eterna su misericordia! 2 Que lo digan los rescatados por Yahvé, los rescatados del poder del adversario, 3 los que ha reunido de todos los países, de oriente y poniente, del norte y mediodía. 4 Por el desierto erraban, por la estepa, no acertaban con lugares habitados; 5 hambrientos y sedientos, se sentían desfallecer. 6 Pero clamaron a Yahvé en su apuro, y él los libró de sus angustias, 7 los condujo por el recto camino, hasta alcanzar un lugar habitado. 8 ¡Den gracias a Yahvé por su amor, por sus prodigios en favor de los hombres! 9 Pues calmó la garganta sedienta, y a los hambrientos colmó de bienes. 10 Habitaban la tiniebla y la sombra, cautivos de hierros y miserias, 11 por desafiar las órdenes de Dios, por despreciar el proyecto del Altísimo. 12 Doblegó su terquedad con fatigas, sucumbían, privados de socorro. 13 Pero clamaron a Yahvé en su apuro, y él los libró de sus angustias. 14 Los sacó de la tiniebla y la sombra, rompió todas sus cadenas. 15 ¡Den gracias a Yahvé por su amor, por sus prodigios en favor de los hombres! 16 Pues las puertas de bronce rompió, deshizo los barrotes de hierro. 17 Embotados por todos sus yerros, miserables a causa de sus culpas, 18 les daban repugnancia los manjares, ya estaban a las puertas de la muerte. 19 Pero clamaron a Yahvé en su apuro, y él los libró de sus angustias. 20 Su palabra envió para sanarlos y arrancar sus vidas de la fosa. 21 ¡Den gracias a Yahvé por su amor, por sus prodigios en favor de los hombres! 22 Ofrezcan sacrificios de acción de gracias, pregonen sus obras con gritos de alegría. 23 Se hicieron a la mar con sus naves, comerciando por todo el océano, 24 y vieron las obras de Yahvé, todas sus maravillas en el piélago. 25 A su voz, un viento de borrasca hizo encresparse a las olas; 26 al cielo subían, bajaban al abismo, su espíritu se hundía bajo el peso del mal; 27 daban vuelcos, vacilaban como ebrios, no les valía de nada su pericia. 28 Pero clamaron a Yahvé en su apuro, y él los libró de sus angustias. 29 A silencio redujo la borrasca, las olas callaron a una. 30 Ellos se alegraron al verlas calmarse, y él los llevó al puerto deseado. 31 ¡Den gracias a Yahvé por su amor, por sus prodigios en favor de los hombres! 32 ¡Alábenlo en la asamblea del pueblo, en el concejo de ancianos lo celebren! 33 Él cambia los ríos en desierto, en puro sequedal los manantiales, 34 la tierra fértil en salinas, cuando obran el mal sus habitantes. 35 Pero cambia el desierto en estanque, la árida tierra en manantial; 36 asienta allí a los hambrientos, para que funden ciudades habitadas. 37 Siembran campos y plantan viñas, producen frutos en tiempo de cosecha. 38 Él los bendice y se multiplican, no deja que mengüen sus ganados. 39 Menguados estaban y abatidos, presa del mal y la aflicción. 40 El que vierte desprecio sobre príncipes, los extraviaba por yermos sin camino. 41 Pero recobra al pobre de la miseria, aumenta sus clanes como un rebaño; 42 los rectos lo ven y se alegran, los malvados se tapan la boca. 43 ¿Quién es sabio? ¡Que guarde estas cosas, y medite en el amor de Yahvé!
En este Salmo recuperamos el orden de los tiempos. A diferencia de los dos anteriores que nos hablaban de lo sucedido en la tierra con hechos puntuales acaecidos en la Historia de Israel (Sal 103: habla de José, Moisés, las plagas…, Sal 104: Mar de Suf, Aaron y Moisés, becerro de oro…), en este no nombra ninguno porque habla de manera velada.
Este es el momento posterior a la pasión, cuando ya podemos recibir el Espíritu Santo. Los rescatados por Yahvé (2-5) somos nosotros que durante el 3er tiempo hemos errado por un desierto, hambrientos y sedientos, sin el protector y consolador Espíritu Santo, a merced de nuestros enemigos. En (3) “los que ha reunido de todos los países” nos habla de la universalidad de la Salvación de Cristo, pues Él valida completamente a la naturaleza hombre para recibir el Espíritu Santo de manera que los varios caminos (religiones) que Dios ha puesto dirigidos por la misericordia, adaptados a nuestros tamaños (o edades si queréis) son aptos para recibirlo (cada religión proporciona el Caudal adecuado para cada tamaño o nación; Dios nunca nos exigirá algo con lo que no podemos cargar, ni llenará una lámpara de aceite con la manguera que llena a un Petrolero con su combustible), y esto es así porque el mundo se ha hecho para salvarnos en justicia por lo que también o principalmente, debemos demostrar ser fieles a Dios frente al diablo. Son necesarias esas normas que forman las religiones, para afirmar nuestra adhesión al ejército del bien. Cuando todo esto se haga público y no haga falta fe para creer en Dios, entonces no solo será necesario seguir esas normas que de alguna manera dibujan el patrón del justo, también harán falta más que nunca, esas obras de activo amor para llenarnos de Él. Dentro de nada se cumplirá la Palabra: “muchos son los llamados, pocos los elegidos”.
En (14) de nuevo hace referencia a la Pasión. En (23) comienza a narrar en pasado lo que ocurrido “se hicieron a la mar con sus naves”, fuimos hacia la muerte cuando nos revelamos. Luego dice algo que me recuerda a la Escalera de Jacob p.59, descrita en “Dios para tontos”, o la “La Lógica de Dios”, porque: (26) “al cielo subían, bajaban al abismo, su espíritu se hundía bajo el peso del mal”, más allá del vaivén de las olas que puede relatar esto simboliza nuestra caída del cielo y nuestro regreso, pero en orden invertido. Recordemos:
Juan 1:51 En verdad, en verdad os digo: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.
Para mí no tenía sentido que los ángeles subieran y luego bajaran porque el origen de los ángeles es el cielo, por lo que deberían bajar y subir. Hasta que caí en la cuenta de que los hebreos leen al revés, de izquierda a derecha y el dibujo escrito en esos ensayos de la Escalera de Jacob p.83 nos dibuja a nosotros que fuimos ángeles subiendo y bajando (izquierda a derecha) sobre cristo el primogénito situado en la última plaga (muerte de los primogénitos…) y primer escalón (…que nos permitió escapar del farón=demonio). Sí; ese cielo abierto se dará cuando estos ensayos se conozcan y no haga falta fe para creer en Dios. Cualquier hombre cabal que no haya leído “Dios para tontos”, pensará que todo esto es una locura de otro colgado más, pero no es la primera vez que el Señor habla desde el pasado de lo que hoy se está revelando y de la manera en la que se está haciendo.
El resto es fácilmente comprensible y continua en el ½ tiempo.
Sal 111:1-10 ¡Aleluya! Alef. Doy gracias a Yahvé de todo corazón, Bet. en la reunión de los justos y en la comunidad. 2 Guímel. Grandes son las obras de Yahvé, Dálet. meditadas por todos que las aman. 3 He. Actúa con esplendor y majestad, Vau. su justicia permanece para siempre. 4 Zain. De sus proezas dejó un memorial. Jet. ¡Clemente y compasivo Yahvé! 5 Tet. Dio de comer a quienes lo honran, Yod. se acuerda por siempre de su alianza. 6 Kaf. Reveló a su pueblo la fuerza de su acción, Lámed. les dio como herencia las naciones. 7 Mem. Su mano actúa con verdad y justicia, Nun. son leales todos sus mandatos, 8 Sámek. válidos para siempre jamás, Ain. Para cumplirlos con verdad y rectitud. 9 Pe. Envió la redención a su pueblo, Sade. determinó para siempre su alianza; Qof. santo y temible es su nombre. 10 Res. Principio del saber es temer al Señor; Sin. son cuerdos los que lo practican. Tau. Su alabanza permanece para siempre.
Continuamos en el ½ tiempo. Tampoco hay dudas.
Sal 112:1-10 ¡Aleluya! Alef. ¡Dichoso el hombre que teme a Yahvé, Bet. que encuentra placer en todos sus mandatos! 2 Guímel. Su estirpe arraigará con fuerza en el país, Dálet. la raza de los rectos será bendita. 3 He. Su casa abundará en riqueza y bienestar, Vau. se afianzará su justicia para siempre. 4 Zain. En las tinieblas ilumina a los rectos, Jet. tierno, clemente y justo. 5 Tet. Feliz el hombre que se apiada y presta, Yod. y arregla rectamente sus asuntos. 6 Kaf. Nunca verá su existencia amenazada, Lámed. el justo dejará un recuerdo estable. 7 Mem. No habrá de temer las malas noticias, Nun. con firme corazón confiará en Yahvé. 8 Sámek. Seguro y animoso, nada temerá, Ain. hasta ver humillado al adversario. 9 Pe. Da con largueza a los pobres, Sade. su justicia permanece para siempre, Qof. alzará su frente con honor. 10 Res. Lo ve el malvado y se enfurece, Sin. rechinando sus dientes, se consume. Tau. Los afanes del malvado fracasan.
No dice nada nuevo, todo son buenaventuras para los justos, quizá haga mención a este última pate del medio tiempo donde la justicia del Señor se hará presente y conocida entre todos. El malvado desde que tenemos el Espíritu Santo rechina sus dientes (10) pero más los rechinará cuando esto se dé a conocer.
Sal 113:1-9 ¡Aleluya! ¡Alabad, siervos de Yahvé, alabad el nombre de Yahvé! 2 ¡Bendito el nombre de Yahvé, desde ahora y por siempre! 3 ¡De la salida del sol hasta su ocaso, sea alabado el nombre de Yahvé! 4 ¡Excelso sobre los pueblos Yahvé, más alta que los cielos su gloria! 5 ¿Quién como Yahvé, nuestro Dios, con su trono arriba, en las alturas, 6 que se abaja para ver el cielo y la tierra? 7 Levanta del polvo al desvalido, alza al pobre del estiércol, 8 para sentarlo en medio de los nobles, en medio de los nobles de su pueblo. 9 Asienta a la estéril en su casa, como madre feliz con hijos. ¡Aleluya!
Nada nuevo, sigue en la misma línea; ½ tiempo.
Sal 114:1-8 Al salir Israel de Egipto, Jacob de un pueblo extranjero, 2 Judá fue su santuario, Israel fue su dominio. 3 El mar lo vio y huyó, el Jordán retrocedió, 4 los montes brincaron como carneros, las colinas igual que corderos. 5 Mar, ¿qué te pasa que huyes, y tú, Jordán, que retrocedes, 6 montes, que brincáis como carneros, colinas igual que corderos? 7 La tierra tiembla en presencia del Dueño, en presencia del Dios de Jacob, 8 el que cambia la peña en estanque y hace del pedernal una fuente.
Esta es la descripción de la redención. En (1) “al salir de Egipto” designa a la liberación del faraón = demonio, a la pasión. Ya he explicado esto en la Escalera de Jacob p.59. (2) “Judá” representa a los Adán, y viene a decir que a partir de entonces somos su santuario, Dios, el Espíritu Santo hace morada en el hombre. Israel es más general y representa a los Eva también. En (3) el mar es la muerte que huye ante el Espíritu (¡oh muerte! ¿dónde está tu victoria?) En (6) hay una especie de cuantificación que quizá se refiera a demonios, Evas. En (8) está claro, peña, pedernal en Agua que simboliza el Espíritu Santo. La tierra tembló es algo representativo para indicarnos la magnitud de lo que aquel día ocurrió, porque se rompieron las cadenas que nos ataban, y todo el Universo dio por fin el fruto para el que fue creado: nuestra redención por medio del santo brazo de Dios, por medio de Jesucristo.
Sal 115:1-18 ¡No a nosotros, Yahvé, no a nosotros, sino a tu nombre da gloria, por tu amor y tu lealtad! 2 Que no digan los paganos: "¿Dónde está tu Dios"? 3 Nuestro Dios está en el cielo, y hace todo cuanto quiere. 4 Plata y oro son sus ídolos, obra de la mano del hombre. 5 Tienen boca y no hablan, tienen ojos y no ven, 6 tienen orejas y no oyen, tienen nariz y no huelen. 7 Tienen manos y no palpan, tienen pies y no caminan, tienen garganta sin voz. 8 ¡Sean como ellos los que los hacen, los que en ellos ponen su confianza! 9 Casa de Israel, confía en Yahvé, él es su auxilio y su escudo; 10 casa de Aarón, confía en Yahvé, él es su auxilio y su escudo; 11 leales a Yahvé, confiad en Yahvé, él es su auxilio y su escudo. 12 Yahvé se acuerda y nos bendice: Bendice a la casa de Israel, bendice a la casa de Aarón, 13 bendice a los leales a Yahvé, a todos, pequeños y grandes. 14 ¡Que Yahvé os multiplique, a vosotros y a vuestros hijos! 15 ¡Benditos seáis de Yahvé, que hizo el cielo y la tierra! 16 El cielo es el cielo de Yahvé, la tierra se la ha dado al hombre. 17 Los muertos no alaban a Yahvé, ninguno de los que bajan al Silencio; 18 Nosotros, los vivos, bendecimos a Yahvé, desde ahora y por siempre. ¡Aleluya!
Este podríamos confundirlo con nuevo ciclo de tres tiempos y medio, pero vemos que en los primeros tiempos o inicios de ciclo, siempre pide ayuda a Dios contra los que tienden redes y mentiras hacia los Adán y desean su muerte. Este más bien nos habla del juicio final, después del ½ tiempo. Diferencia entre los paganos y sus ídolos (1-8) y los justos que piden la glorificación de Dios y confían en Él. Desde (16) especialmente parece hablar de ese Juicio que nos diferencia a todos. Los ángeles fieles, en el cielo donde estaban (16); la tierra, que en Ezequiel designa a la zona exterior del nuevo templo (que en realidad es el cielo), será para los hombres salvados (este cielo en el apocalipsis se describe como un lugar con un segundo árbol de la Vida). Y los condenados incluidos los demonios son los que bajan al Silencio (17).
INDEPENDIENTES
Salmo Independiente 116. Quinta representación de los 3 ½ tiempos.
Sal 116:1-19 Amo a Yahvé porque escucha mi voz suplicante; 2 porque inclina su oído hacia mí el día que lo llamo. 3 Me aferraban los lazos de la muerte, me sorprendieron las redes del Seol; me encontraba triste y angustiado, 4 e invoqué el nombre de Yahvé: ¡Socorro, Yahvé, sálvame! 5 Tierno y justo es Yahvé, nuestro Dios es compasivo; 6 Yahvé guarda a los pequeños, estaba yo postrado y me salvó. 7 ¡Vuelve a tu calma, alma mía, que el Señor te ha favorecido! 8 Ha guardado mi vida de la muerte, mis ojos de las lágrimas, mis pies de la caída. 9 Caminaré en presencia de Yahvé en el mundo de los vivos. 10 ¡Tengo fe, aún cuando digo: "Mira que soy desdichado"!, 11 yo que dije consternado: "los hombres son mentirosos". 12 ¿Cómo pagar a Yahvé todo el bien que me ha hecho? 13 Alzaré la copa de salvación e invocaré el nombre de Yahvé. 14 Cumpliré mis votos a Yahvé en presencia de todo el pueblo. 15 Mucho le cuesta a Yahvé la muerte de los que lo aman. 16 ¡Ah, Yahvé, yo soy tu siervo, tu siervo, hijo de tu esclava, tú has soltado mis cadenas! 17 Te ofreceré sacrificio de acción de gracias e invocaré el nombre de Yahvé. 18 Cumpliré mis votos a Yahvé en presencia de todo el pueblo, 19 en los atrios de la Casa de Yahvé, en medio de ti, Jerusalén. ¡Aleluya!
Este Salmo podríamos considerarlo inicio de un nuevo ciclo, pero lo pongo independiente porque todos los versículos que lo podrían determinar como un nuevo inicio están escritos en pasado: me sorprendieron las redes de Seol (trampa de los demonios, Eva), me encontraba triste y angustiado (sin Espíritu después de la rebelión del cielo), “los hombres son mentirosos” (incluso esto ahí está en pasado). Sin embargo, como parte principal del Salmo está la conclusión que ya comienza en (7) hablándonos de lo que podría ser nuestro paso por la tierra: “Vuelve a tu calma, alma mía, que el Señor te ha favorecido! 8 Ha guardado mi vida de la muerte” y terminando con la Salvación escrita en pasado ahora: (16) “…tú has soltado mis cadenas!”.
Veremos que a partir de ahora los Salmos nos hablan de la Salvación.
Salmo Independiente 118. Sexta representación de los 3 ½ tiempos.
Sal 118:1-29 ¡Dad gracias a Yahvé, porque es bueno, porque es eterno su amor! 2 ¡Diga la casa de Israel: es eterno su amor! 3 ¡Diga la casa de Aarón: es eterno su amor! 4 ¡Digan los que están por Yahvé: es eterno su amor! 5 En mi angustia grité a Yahvé, me respondió y me dio respiro; 6 Yahvé está por mí, no temo, ¿qué puede hacerme el hombre? 7 Yahvé está por mí y me ayuda, y yo desafío a los que me odian. 8 Mejor refugiarse en Yahvé que poner la confianza en el hombre; 9 mejor refugiarse en Yahvé que poner la confianza en los nobles. 10 Me rodeaban todos los gentiles, en el nombre de Yahvé los rechacé; 11 me rodeaban una y otra vez, en el nombre de Yahvé los rechacé. 12 Me rodeaban lo mismo que avispas, llameaban cual fuego de zarzas, en el nombre de Yahvé los rechacé. 13 ¡Cómo me empujaban para tirarme!, pero Yahvé vino en mi ayuda. 14 Mi fuerza y mi canto es Yahvé, él fue mi salvación. 15 Clamor de júbilo y victoria se oye en las tiendas de los justos: "La diestra de Yahvé hace proezas, 16 magnífica es la diestra de Yahvé, la diestra de Yahvé hace proezas". 17 No he de morir, viviré y contaré las obras de Yahvé. 18 Me castigó, me castigó Yahvé, mas a la muerte no me entregó. 19 ¡Abridme las puertas de justicia, y entraré dando gracias a Yahvé! 20 Aquí está la puerta de Yahvé, los justos entrarán por ella. 21 Te doy gracias por escucharme, por haber sido mi salvación. 22 La piedra que desecharon los albañiles se ha convertido en la piedra angular; 23 esto ha sido obra de Yahvé, nos ha parecido un milagro. 24 ¡Éste es el día que hizo Yahvé, exultemos y gocémonos en él! 25 ¡Yahvé, danos la salvación! ¡Danos el éxito, Yahvé! 26 ¡Bendito el que entra en nombre de Yahvé! Os bendecimos desde la Casa de Yahvé. 27 Yahvé es Dios, él nos ilumina. ¡Cerrad la procesión, ramos en mano, hasta los ángulos del altar! 28 Tú eres mi Dios, te doy gracias, Dios mío, quiero ensalzarte. 29 ¡Dad gracias a Yahvé, porque es bueno, porque es eterno su amor!
Aquí, ocurre algo parecido. Empieza en pasado con lo que nos ocurrió en el cielo. En este sentido es muy gráfico el (13) ¡Cómo me empujaban para tirarme! (del cielo). A partir del (15) vemos el ofrecimiento de Jesús en el cielo: “La diestra de Yahvé hace proezas”. En (18) nuestro paso a la tierra: “me castigó Yahvé, mas a la muerte no me entregó”. Del (19 al 24) la redención: “Abridme las puertas de justicia… gracias por escucharme, por haber sido mi salvación… Este el día…” y entre medias la clarísima prefiguración de Jesucristo que es quien rompe esas cadenas: “La piedra que desecharon los arquitectos se ha convertido en piedra angular”.
El Salmo 119 es del rey David. Algunos lo dudaban, pero según he visto en internet se atribuye le atribuye a él. Además, no coincide con el orden que estoy explicando, por lo que para mí queda confirmado.
Igual Ocurrirá con el Salmo 137 (a orillas de los ríos de Babilonia), tampoco coincidiría con el orden de los huérfanos y es porque es del rey David, según he visto también en internet.
Subiendo al Cielo “Canción de las Subidas” 120-134
Del 120 al 134 están estos 15 Salmos que son casi todos más cortos y en los que podremos ver, eso sí, de manera fugaz, nuestra historia de Salvación desde el cielo. Los iba a dejar aparte porque como se ve, son diferentes a los demás y de hecho se agrupan con este distintivo inicial: “Canción de la Subidas”. Pero dado que son huérfanos también porque, aunque se les ha achacado a varios autores, nada quedó como definitivo, los voy a mirar por encima. Y lo primero que me llama la atención es que el primero de estos Salmos, el 120, pide la liberación “del labio mentiroso, de la lengua tramposa”, lo que nos situaría como en los demás ciclos de Salmos estudiados, en el cielo, después de la traición, difamados por los demonios y Evas, para igualarnos a ellos y para que su chantaje igualador tome más peso ante Dios, quien quería salvarnos porque nuestro corazón no se corrompió como el de ellos por odio o por codicia, sino que traicionó por amor. Vuelvo aquí desde el final para adelantaros que estos 15 salmos forman el tercer tiempo en la Tierra, de los 3 ½ tiempos que toda la lista de Salmos huérfanos configura en su estructura (aparte de todas las veces que se muestran además), pero eso lo veremos después.
Salmos 120, 121, 122. Séptima representación 3 ½ Tiempos.
- Reinicio. En el cielo, 2do Tiempo. Después de la traición en el cielo.
Sal 120:1-7 [Canción de las subidas.] A Yahvé, en mi angustia, grité y me respondió. 2 ¡Líbrame, Yahvé, del labio mentiroso, de la lengua tramposa! 3 ¿Qué te dará y te añadirá, lengua tramposa? 4 ¡Flechas afiladas de guerrero y ascuas de retama! 5 ¡Ay de mí, que vivo en Mésec, que habito en la tiendas de Quedar! 6 Harto estoy de vivir con los que odian la paz. 7 Si yo hablo de paz, ellos prefieren guerra.
Esa angustia (1) nos designa a nosotros vacíos del Espíritu Santo. El labio y la lengua mentirosa (2), son esos demonios y Evas que mienten para montar su chantaje igualador pidiendo justicia a Dios. (5) “las tiendas de Quedar”, porque las tiendas, de telas o cueros, simbolizan nuestra alma, así como las vestiduras representan al Espíritu Santo por lo general, o se utilizan para hablar del estado de nuestra alma por carecer o no del Espíritu. Una tienda vacía es un alma vacía; de “Quedar” porque era un pueblo nómada, con lo cual hace referencia a que saldremos del cielo para ir a la tierra. Lo demás está claro. Esto designa al 2º tiempo, el equivalente a Caín y Abel en el Génesis.
- 3cer Tiempo. La Tierra.
Sal 121:1-8 [Canción para las subidas.] Alzo mis ojos a los montes, ¿de dónde vendrá mi auxilio? 2 Mi auxilio viene de Yahvé, que hizo el cielo y la tierra. 3 ¡No deja a tu pie resbalar! ¡No duerme tu guardián! 4 No duerme ni dormita el guardián de Israel. 5 Es tu guardián Yahvé, Yahvé tu sombra a tu diestra. 6 De día el sol no te herirá, tampoco la luna de noche. 7 Yahvé te guarda del mal, él guarda tu vida. 8 Yahvé guarda tus entradas y salidas, desde ahora para siempre.
Este podemos identificarlo con la creación del mundo, el tercer tiempo, ya que habla de la creación del cielo y tierra (2), del sol y de la luna (6). Como digo, casi todos estos “Cantos de las subidas” son muy cortos, y quedan determinados por tan solo un versículo o unas palabras. En (8) “entradas y salidas” no solo se refiere a entrar en Su Gracia o salir de ella cuando pecamos, sino literalmente a eso: entradas y salidas de los tiempos, aquí en concreto estaríamos hablando de un nuevo lugar, la tierra, en el que entrar con nuestra nueva naturaleza hombre (aunque estos cambios de tiempo, también hablan de cambios en nuestro estado interior con respecto al Espíritu Santo, que también enlazan con Su Gracia).
- ½ Tiempo. Redención.
Sal 122:1-9 [Canción de las subidas. De David.] ¡Qué alegría cuando me dijeron: Vamos a la Casa de Yahvé! 2 ¡Finalmente pisan nuestros pies tus umbrales, Jerusalén! 3 Jerusalén, ciudad edificada toda en perfecta armonía, 4 adonde suben las tribus, las tribus de Yahvé, según costumbre en Israel, a dar gracias al nombre de Yahvé. 5 Allí están los tronos para el juicio, los tronos de la casa de David. 6 Invocad la paz sobre Jerusalén, vivan tranquilos los que te aman, 7 haya calma dentro de tus muros, que tus palacios estén en paz. 8 Por amor de mis hermanos y amigos quiero decir: ¡La paz contigo! 9 Por la Casa de Yahvé, nuestro Dios, pediré todo bien para ti.
Esto nos habla de la redención, ya que dice (2) “Finalmente pisan tus umbrales”= inicios, lo que nos coloca con el Espíritu después de la pasión, pero no en el cielo todavía. Jerusalén simboliza también el cielo (la caída de sus murallas en el 1er - 2do tiempo, nuestro vaciado).
Salmos 123 - 128. Octava representación 3 ½ Tiempos.
- Reinicio. En el cielo, 2do Tiempo. Después de la rebelión en el cielo.
Sal 123:1-4 [Canción de las subidas.] A ti levanto mis ojos, tú que habitas en el cielo. 2 Lo mismo que los ojos de los siervos miran a la mano de sus amos, lo mismo que los ojos de la sierva miran a la mano de su señora, nuestros ojos miran a Yahvé, nuestro Dios, esperando que se apiade de nosotros. 3 ¡Piedad, Yahvé, ten piedad, que estamos hartos de desprecio! 4 Estamos por demás saturados del sarcasmo de los satisfechos. (¡Los soberbios merecen el desprecio!)
Este Salmo y el siguiente inician un nuevo ciclo. Los despreciados son los Adán, y los que desprecian los demonios y los Eva, que son los engordados por la Esencia de Dios robada. Si bien es cierto que después de la traición todos los traidores estamos vacíos, creo que quedan descritos por esas palabras. Como casi todos estos corto, poco que decir.
Sal 124:1-8 [Canción de las subidas. De David.] Si Yahvé no hubiera estado por nosotros, -que lo diga Israel- 2 si Yahvé no hubiera estado por nosotros, cuando unos hombres nos asaltaron, 3 vivos nos habrían tragado en el ardor de su cólera. 4 Las aguas nos habrían arrollado, un torrente nos habría anegado, 5 nos habría llegado al cuello el agua en su vorágine. 6 ¡Bendito Yahvé, que no nos hizo presa de sus dientes! 7 Nuestra vida escapó como un pájaro del lazo del cazador. El lazo de rompió, nosotros escapamos. 8 Nuestra ayuda es el nombre de Yahvé, que hizo el cielo y la tierra.
Seguimos después de la traición en el cielo. Esos hombres que nos asaltaron (2) son los demonios y los Eva, en (3) “vivos nos habrían tragado” es literal, no retórica, habríamos sido asimilados o igualados en ese chantaje igualador. Entonces, (4) “las aguas nos habrían arrollado”, esto hace referencia a esa subida del Espíritu Santo que tanto se repite, al poner orden Dios en el cielo. Aunque esta subida deja a todos los traidores vacíos, incluidos los Adán, aquí parece hacer referencia al hecho en sí mismo de poner orden en el cielo, que podría haber terminado con todos condenados o muertos. Puede confundirse con la subida y posterior caída del mar rojo, pero ocurre lo contrario, Dios dibujó con Israel nuestra historia desde el cielo. Por otra parte, de no hablar del cielo sino del mundo, y esto se refiriese a los egipcios y al mar rojo, no tendría sentido la afirmación hecha en (2,4): “2 si Yahvé no hubiera estado por nosotros… Las aguas nos habrían arrollado, un torrente nos habría anegado”, pues de no haber intervenido Dios, no se habría abierto el mar, y habrían muerto a espada en primera instancia, aunque antes ni siquiera se habrían dado las plagas, por lo que no habrían salido de Egipto.
Finalmente en (7) nos habla de cómo los Adán, designados muchas veces como aves (escuchan a Dios, se pueden separar del mundo), escapan del lazo del cazador.
- 3er Tiempo. En la Tierra.
Sal 125:1-5 [Canción de las subidas.] Los que confían en Yahvé son como el monte Sión, inconmovible, estable para siempre. 2 ¡Jerusalén, de montes rodeada! Así rodea a su pueblo Yahvé desde ahora y para siempre. 3 Nunca caerá el cetro impío sobre la heredad de los justos, para que los justos no alarguen su mano a la maldad. 4 Favorece a los buenos, Yahvé, a los rectos de corazón. 5 ¡A los que se desvían por sendas tortuosas los suprima Yahvé con los malhechores! ¡Paz a Israel!
Seguimos en la tierra con una referencia a esas sendas tortuosas (5) hechas sobre la misma tierra. En este caso esas sendas hacen referencia a atajos fuera de los buenos caminos. Como siempre nombra dos grupos los que se desvían y los malhechores, los Eva y los demonios seguramente. En (3) no sé bien a qué se refiere. La heredad del justo será el cielo en el futuro, o el Espíritu Santo. El cetro del impío es su vara de poder. Interpretando sería como que el impío nunca accederá al Espíritu Santo, pero desde la tierra, que también cuadraría aquí, ya que estamos en el tercer periodo, nos diría algo parecido a: Dios provee para el justo lo que el impío no le puede quitar.
- ½ tiempo. Redención, recuperación.
Sal 126:1-6 [Canción de las subidas.] Cuando Yahvé repatrió a los cautivos de Sión, nos parecía estar soñando; 2 entonces se llenó de risas nuestra boca, nuestros labios de gritos de alegría. Los paganos decían: ¡Grandes cosas ha hecho Yahvé en su favor! 3 ¡Sí, grandes cosas ha hecho por nosotros Yahvé, y estamos alegres! 4 ¡Recoge, Yahvé, a nuestros cautivos, sean como torrentes del Negueb! 5 Los que van sembrando con lágrimas cosechan entre gritos de júbilo. 6 Al ir, van llorando, llevando la semilla; y vuelven cantando, trayendo sus gavillas.
Esta repatriación desde Babilonia supongo, representa aquí la redención o la repatriación al cielo, al Espíritu Santo. Es el ½ Tiempo. De nuevo la conclusión se explica en ganancia de Espíritu Santo o (4) “en torrentes del Negueb”, como tantas veces el Agua representa al Espíritu. En (5-6) narra lo que nos ocurre en este mundo, que como prueba es dura y muchas veces dolorosa, pero trae como recompensa, y ya aquí la podemos disfrutar desde la Pasión, el Espíritu Santo.
Sal 127:1-5 [Canción de las subidas. De Salomón.] Si Yahvé no construye la casa, en vano se afanan los albañiles; si Yahvé no guarda la ciudad, en vano vigila la guardia. 2 En vano os levantáis temprano y después retrasáis el descanso los que coméis pan con fatiga, ¡si se lo da a su amado mientras duerme! 3 La herencia de Yahvé son los hijos, su recompensa el fruto del vientre; 4 como flechas en mano de un guerrero son los hijos de la juventud. 5 Feliz el varón que llena con ellas su aljaba; no se avergonzará cuando litigue con sus enemigos en la puerta.
Este no dice nada de los que nos ocupa. Es más bien un consejo o una bienaventuranza. Dado que es algo del mundo puede ir en este ½ Tiempo, ya que en el salmo anterior poníamos la pasión, aquí seguimos en el mundo. Lo mismo ocurre con el siguiente.
Sal 128:1-6 [Canción de las subidas.] ¡Dichosos los que temen a Yahvé y recorren todos sus caminos! 2 Del trabajo de tus manos comerás, ¡dichoso tú, que todo te irá bien! 3 Tu esposa, como parra fecunda, dentro de tu casa; tus hijos, como brotes de olivo, en torno a tu mesa. 4 Con tales bienes será bendecido el hombre que teme a Yahvé. 5 ¡Bendígate Yahvé desde Sión, que veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida, 6 y veas a los hijos de tus hijos! ¡Paz a Israel!
Tampoco dice nada sobre el orden. Es una bienaventuranza que podría ir en cualquier lugar. En este medio tiempo, parece ir dirigido a los justos, a los Adán.
Salmos 129-134. Novena representación 3 ½ Tiempos.
- Reinicio. En el cielo, 2do Tiempo.
Sal 129:1-8 [Canción de las subidas.] Mucho me han atacado desde mi juventud, -que lo diga Israel-, 2 mucho me han atacado desde mi juventud, pero no han podido conmigo. 3 Mi espalda araron aradores, y alargaron sus surcos. 4 Yahvé, que es justo, rompió las coyundas de los malvados. 5 ¡Queden avergonzados, retrocedan todos los que odian a Sión; 6 sean como hierba del tejado, que se seca antes de arrancarla! 7 El segador no llena con ella su mano ni su regazo el gavillador; 8 y no dicen tampoco los que pasan: "Que Yahvé os colme de bendición". Nosotros os bendecimos en el nombre de Yahvé.
De nuevo hablamos de lo ocurrido en el cielo tras la rebelión. Los que aran son los demonios y los Eva, esas mentiras ahora son descritas como profundos o largos surcos en la piel. Lo cual representa ensuciar o dañar nuestra apariencia, ya que se hacen en la piel; esto es lo mismo que mentir sobre alguien que finalmente ensucia nuestra imagen. (4) Las coyundas (que rompe Yahvé) son definidas en el diccionario “como correa fuerte con que se uncen los bueyes al yugo” y también como “Sujeción o unión que resulta muy pesada”. Estas mentiras son con lo que nos querían unir al destino de los demonios y Evas. En (6) está claro es lo que les espera a estos dos grupos.
- Tercer Tiempo. En la Tierra.
Sal 130:1-8 [Canción de las subidas.] Desde lo hondo a ti grito, Yahvé: 2 ¡Señor, escucha mi clamor! ¡Estén atentos tus oídos a la voz de mis súplicas! 3 Si retienes las culpas, Yahvé, ¿quién, Señor, resistirá? 4 Pero el perdón está contigo, para ser así temido. 5 Aguardo anhelante a Yahvé, espero en su palabra; 6 mi ser aguarda al Señor más que el centinela a la aurora; más que el centinela a la aurora, 7 aguarde Israel a Yahvé. Yahvé está lleno de amor, su redención es abundante; 8 él redimirá a Israel de todas sus culpas.
Estamos en la tierra. En el salmo anterior, después de romper las coyundas, ya hace una alusión al mundo en “sean como hierba del tejado que se seca antes de arrancarla”. Aquí comienza diciendo: (1) “Desde lo hondo a ti grito”, que parece ser un juego de palabras, siendo lo “hondo” aquí abajo en el mundo. Luego hace referencia a la aurora, que si bien tiene el significado de esperar la luz desde la oscuridad, es un fenómeno propio de nuestro planeta.
Sal 131:1-3 [Canción de las subidas. De David.] Mi corazón, Yahvé, no es engreído, ni son mis ojos altaneros. No doy vía libre a la grandeza, ni a prodigios que me superan. 2 No, me mantengo en paz y silencio, como niño en el regazo materno. ¡Mi deseo no supera al de un niño! 3 ¡Espera, Israel, en Yahvé desde ahora y por siempre!
Seguimos en la tierra antes del ½ Tiempo. Nos habla de los justos que no codician y esperan el ½ Tiempo.
Sal 132:1-18 [Canción de las subidas.] Acuérdate, Yahvé, de David, de todos sus desvelos, 2 del juramento que hizo a Yahvé, de su voto al Fuerte de Jacob: 3 "No he de entrar en la tienda, mi casa, no me meteré en la cama en que reposo, 4 no he de conceder sueño a mis ojos ni quietud a mis párpados, 5 hasta encontrar un lugar para Yahvé, una morada para el Fuerte de Jacob". 6 Sí, oímos de Ella que está en Efratá, ¡la hemos encontrado en los Campos del Bosque! 7 ¡Entremos en el lugar donde Él habita, postrémonos ante el estrado de sus pies! 8 ¡Levántate, Yahvé, hacia tu reposo, ven con el arca de tu poder! 9 Tus sacerdotes se vistan de fiesta, griten de alegría tus amigos. 10 A causa de David, tu siervo, no rechaces el rostro de tu ungido. 11 Yahvé ha jurado a David verdad que no retractará: "Un fruto de tu seno sentaré en tu trono. 12 Si tus hijos guardan mi alianza, el dictamen que yo les enseño, también sus hijos para siempre se sentarán en tu trono". 13 Pues Yahvé ha escogido a Sión, la ha querido como sede para sí: 14 "Aquí está mi reposo para siempre, en él me instalaré, que así lo quiero. 15 Bendeciré sin medida su alimento, hartaré de pan a sus pobres, 16 de fiesta vestiré a sus sacerdotes, sus amigos gritarán de júbilo. 17 Allí suscitaré un vástago a David, aprestaré una lámpara a mi ungido; 18 cubriré de ignominia a sus enemigos, mas sobre él brillará su diadema".
Esto es una clara prefiguración de Jesucristo. El juramento (3-5) es la mención en pasado (acuérdate) del ofrecimiento de Jesús en el cielo. “Dice no he de entrar en la tienda, mi casa”, porque Jesús toma naturaleza de hombre para salvarnos y no recupera su naturaleza celestial hasta que después de la cruz encuentra un lugar para Dios. Este lugar somos nosotros, los hombres, donde ya podrá residir el Espíritu Santo. A partir de la pasión el Espíritu Santo podrá morar en nosotros.
Después del juramento dicen que Sí que han visto el arca de la alianza en los campos del bosque. De nuevo el arca de la Alianza es prefiguración de Jesucristo quien es creado (como nosotros que somos hermanos suyos en lo creado) pero por su interior fluye la Esencia de Dios en la máxima intensidad. Tal y como el arca fue creada con mucho cuidado y siguiendo las instrucciones de Dios, para luego mantener a Dios. En definitiva ya aquí parece anunciarnos la llegada de Jesucristo a la tierra (6) Campos del Bosque.
Después todo lo que sigue lo dice un futuro por lo que no lo consideraremos todavía como el ½ Tiempo. Aquí, aunque parece mencionar el lazo de Jesús, hijo putativo de José, con David; (11) “un fruto de tu seno sentaré en tu trono”, en realidad, ya que David desde el principio del Salmo al hacer ese juramento (3-5), era prefiguración de Jesús, en consecuencia está diciendo: un fruto que saldrá de ti, Jesús (“de tu seno”), “sentaré en tu trono”, porque a esa Naturaleza hombre validada por Jesús se le dará el trono de rey: el Espíritu Santo, el Reino de los cielos. Como he dicho varias veces, los reyes designan a los Adán que pueden recibir el Espíritu, pero antes de la traición en el cielo nos designaba a todos (en el Salmo 2 nos hablaba de los reyes de la tierra, nosotros en el cielo, que se levantan contra Yahvé y su Ungido, ya lo he explicado). Luego esto se confirma en (12) “Si tus hijos guardan mi alianza, el dictamen que yo les enseño, también sus hijos para siempre se sentarán en tu trono.” Sus hijos somos todos los hombres validados, aptos para recibir el Espíritu por medio de alguno de los caminos puestos por Dios. Caminos dirigidos por la justicia y la misericordia, ese es el dictamen de Dios. Desde el mundo, en la práctica, no tiene sentido ya había problemas por heredar un trono, cuánto más para todos los hijos de los hijos usar el mismo trono. Además dice en (12) para siempre, lo cual es real para nosotros, eterno, no es retórica. A partir del (15) está todo claro, son representaciones del Espíritu Santo: alimento, pan, lámpara, vestido de fiesta. “Ungido” de nuevo es Jesús; “aprestaré una lámpara a mi ungido” quiere decir que preparará una Luz para Jesús (como hombre, no para Él, sino para el resto de nosotros). (17) Suscitaré un vástago a David parece hablar de nuevo de nuestra naturaleza redimida. (18) Cubriré de ignominia a sus enemigos, porque se romperá el escudo de los demonios y ya no serán nunca más necesarios cuando termine el ½ tiempo (ignominia).
- ½ Tiempo.
Sal 133:1-3 [Canción de las subidas. De David.] ¡Mira que es bueno y da gusto que los hermanos convivan juntos! 2 Como ungüento fino en la cabeza, que va bajando por la barba, que baja por la barba de Aarón, hasta la orla de sus vestidos. 3 Como el rocío que baja del Hermón sobre las cumbres de Sión; allí dispensa Yahvé bendición, la vida para siempre.
Esta es la redención. Aquí llega ya el Espíritu Santo, de nuevo representado como (3) Agua (rocío) y como Aceite o ungüento fino que llega hasta los vestidos (2). Como Espíritu que baja desde lo más alto a los altos de entre los hombres (Sión aquí).
Sal 134:1-3 [Canción de las subidas.] ¡Vamos, bendecid a Yahvé todos los siervos de Yahvé, que servís en la Casa de Yahvé, en los atrios de la Casa de nuestro Dios! ¡Por las noches 2 alzad las manos al santuario, y bendecid a Yahvé! 3 ¡Te bendiga desde Sión Yahvé, que hizo el cielo y la tierra!
No parece nada nuevo. Bendiciones desde este medio tiempo o quizá su final.
Y aquí terminan las Canciones de las subidas que como hemos visto también están organizadas en 3 ½ Tiempos.
INDEPENDIENTES
Salmo Independiente 135. Décima representación 3 ½ Tiempos.
Sal 135:1-21 ¡Aleluya! Alabad el nombre de Yahvé, alabad, siervos de Yahvé, 2 que servís en la Casa de Yahvé, en los atrios de la Casa de nuestro Dios. 3 Alabad a Yahvé, porque es bueno, tañed para su nombre, que es amable. 4 Pues Yahvé se ha elegido a Jacob, a Israel, para ser su propiedad. 5 Bien sé yo que es grande Yahvé, nuestro Señor más que todos los dioses. 6 Todo lo que quiere Yahvé, lo hace en el cielo y la tierra, en el mar y en los abismos. 7 Levanta las nubes por el horizonte, con los relámpagos hace llover, saca de sus depósitos el viento. 8 Hirió a los primogénitos de Egipto, desde personas hasta el ganado; 9 mandó señales y prodigios en medio de ti, Egipto, contra el faraón y sus siervos. 10 Hirió a incontables naciones, dio muerte a reyes poderosos, 11 a Sijón, rey de los amorreos, a Og, rey de Basán, y a todos los reinos de Canaán; 12 y dio sus tierras en herencia, en herencia a su pueblo Israel. 13 ¡Yahvé, tu fama es eterna, Yahvé, tu recuerdo por generaciones! 14 Pues Yahvé hace justicia a su pueblo, se compadece de todos sus siervos. 15 Los ídolos paganos son plata y oro, obra de la mano del hombre, 16 tienen boca y no hablan, tienen ojos y no ven; 17 tienen orejas y no oyen, tienen boca y no respiran. 18 ¡Sean como ellos los que los hacen, los que en ellos ponen su confianza! 19 Casa de Israel, bendecid a Yahvé, casa de Aarón, bendecid a Yahvé, 20 casa de Leví, bendecid a Yahvé, los adeptos a Yahvé, bendecid a Yahvé. 21 ¡Bendito desde Sión Yahvé, que habita en Jerusalén! ¡Aleluya!
Este Salmo es un tanto especial, porque puede ser independiente o continuar con el último de las Canciones de las Subidas. Parece que el Señor no ha querido dejar ninguna grieta para unir estos del final y hacer que quedan dentro del orden. ¿Por qué digo esto? Vemos en (1) “Dice a los que servís… en los atrios de la Casa de nuestro Dios”. Esta construcción “en los atrios de la Casa de nuestro Dios” (de hecho solo “atrios”), sale 5 veces en los Salmos Huérfanos (92:14, 100:4 116:19, 134:1, 135:2) y en dos Salmos más fuera de los Huérfanos. En todos estos casos de los Huérfanos, que son los que estamos estudiando, sale en el ½ tiempo o posterior a él, ya sea de manera independiente: Salmo 116 (en este están los 3 ½ tiempos enteros) o como Salmo de etapa o de tiempo: Salmo 134. De alguna manera este Salmo 135 enlaza, o bien, con el 116 (y 118) previos a la ristra de los “Cantos de las subidas” (estos dos son, hasta ahora, los únicos independientes o que narran los 3 ½ tiempos por completo), o bien, con el último de esa ristra de los Cantos de las subidas, el Salmo 134.
De ser continuación del 134 sería un resumen de lo ocurrido. Se dirigiría a los que del ½ tiempo, viven en los atrios de la casa de Dios, es decir, poseen el Espíritu Santo y es como una enumeración, o resumen, de lo que ha hecho por nosotros (4) “ha elegido a Jacob”=Adán, …y todo lo que ha hecho que termina en (12) “da sus tierras en herencia a su pueblo”.
En ambos casos esos atrios y esa tierra del (12) representan al Espíritu Santo, siendo la tierra prometida en realidad el cielo, y los países contra los que luchamos con la ayuda de Dios no solo representan esos 7 pecados capitales, sino también esos 7 tamaños de demonios / Evas contra los que luchamos / convivimos.
De ser capítulo independiente, pensaríamos en las plagas de Egipto como nuestra salida del cielo (conviene ver aquí la Escalera de Jacob p.59), y finalmente la entrega de esas tierras como nuestra recuperación del Espíritu Santo.
En ambos casos en (6) “Todo lo que quiere Yahvé, lo hace en el cielo y la tierra, en el mar y en los abismos” parece decirnos que el proyecto de Dios pasa por todos los tiempos y por todos los pueblos.
Igualmente, a partir del (15) que habla de los ídolos “plata y oro” parece hacer referencia a estos demonios, Evas que ni sienten ni padecen; esto no es relevante.
Yo lo cuento como independiente porque, ahora estoy reescribiendo, ya he visto que con este y el de la estructura general hacen 12 veces que se exponen los 3 ½ tiempos. Un número redondo utilizado por Dios a menudo.
Salmo Independiente 136. Decimoprimera representación 3 ½ Tiempos.
Sal 136:1-26 ¡Dad gracias a Yahvé, porque es bueno, porque es eterno su amor! 2 Dad gracias al Dios de los dioses, porque es eterno su amor; 3 dad gracias al Señor de los señores, porque es eterno su amor. 4 Al único que ha hecho maravillas, porque es eterno su amor. 5 Al que hizo el cielo con sabiduría, porque es eterno su amor. 6 Al que asentó la tierra sobre las aguas, porque es eterno su amor. 7 Al que hizo las grandes lumbreras, porque es eterno su amor; 8 el sol para regir el día, porque es eterno su amor; 9 luna y estrellas, que rigen la noche, porque es eterno su amor. 10 Al que hirió en sus primogénitos a Egipto, porque es eterno su amor; 11 y sacó a Israel de entre ellos, porque es eterno su amor; 12 con mano fuerte y tenso brazo, porque es eterno su amor. 13 Al que partió en dos el mar de los Juncos, porque es eterno su amor; 14 e hizo pasar por medio a Israel, porque es eterno su amor; 15 y hundió en él al faraón con sus huestes, porque es eterno su amor. 16 Al que guio a su pueblo en el desierto, porque es eterno su amor. 17 Al que hirió a grandes reyes, porque es eterno su amor; 18 y dio muerte a reyes poderosos, porque es eterno su amor; 19 a Sijón, rey de los amorreos, porque es eterno su amor; 20 y a Og, rey de Basán, porque es eterno su amor. 21 Y dio sus tierras en herencia, porque es eterno su amor; 22 en herencia a su siervo Israel, porque es eterno su amor. 23 Al que se acordó de nosotros humillados, porque es eterno su amor; 24 y nos libró de nuestros adversarios, porque es eterno su amor. 25 Al que da pan a todo viviente, porque es eterno su amor. 26 ¡Dad gracias al Dios de los cielos, porque es eterno su amor!
Este es otro Salmo independiente que narra los 3 ½ Tiempos desde el cielo. Si vemos los 2 independientes que precedían a los “Cantos de las subidas”, y los comparamos con este y el anterior (si es que el anterior lo consideramos independiente también) podemos ver cierta simetría (2 independientes + “Cantos de las Subidas”+ 2 independientes). Haciendo estos salmos de separadores de tiempos en la Estructura General de los Salmos, se verá después.
En cuanto al Salmo, cierto es que no es una representación como todas las demás, porque no parece mencionar las consecuencias de la rebelión del cielo, sin embargo, comienza en ese mismo cielo (5), pasando por la creación del mundo (6-10), por la historia del mundo o por la salvación escrita en la Historia de Israel, según se quiera ver (10-20), y por fin la entrega del Espíritu Santo en (21) “tierras” o en (25) “da pan a todo viviente”, según se quiera ver. Nótese aquí que aunque no se ha abierto el Salmo con la rebelión del cielo, al final sí nos libra de nuestros adversarios (24).
REDENCIÓN, PODEMOS RECIBIR
EL ESPÍRITU SANTO ORA VEZ
Salmos 146-150
Últimos 146,147,148,149,150.
Salmos de Salvación
Estos Salmos que vienen al final constituyen por sus características un grupo separado que designan un orden estructurado seguramente a todos los Salmos huérfanos. Esto lo iremos viendo ahora.
En los dos primeros, Salmos 146 y 147 veremos que se nos habla de abrir los ojos a los ciegos (Salmo 146:8) y de revelar a Jacob, los que escuchan, sus palabras (Salmo 147:19), lo cual nos colocaría en este último 1/2 Tiempo, ahora cuando se revela lo que Dios quiso revelar hoy. Ya que coincide con el final también de los Salmos huérfanos, es de suponer que este orden quede reflejado también en todos los ciclos de 3 ½ Tiempos expuestos; después lo veremos. Ahora estudiaremos por encima estos últimos Salmos. Cabe destacar que en los últimos 3 se nos habla de alabar y exultar en el Señor, además de ejercer la venganza a las naciones como correspondería en el juicio final.
Sal 146:1-10 ¡Aleluya! ¡Alaba, alma mía, a Yahvé! 2 A Yahvé, mientras viva, alabaré, mientras exista tañeré para mi Dios. 3 No pongáis la confianza en los nobles, en un ser humano, incapaz de salvar; 4 exhala su aliento, retorna a su barro, ese mismo día se acaban sus planes. 5 Feliz quien se apoya en el Dios de Jacob, quien tiene su esperanza en Yahvé, su Dios, 6 que hizo el cielo y la tierra, el mar y cuanto hay en ellos; que guarda por siempre su lealtad, 7 que hace justicia a los oprimidos, que da pan a los hambrientos. Yahvé libera a los condenados. 8 Yahvé abre los ojos a los ciegos, Yahvé endereza a los encorvados, 9 Yahvé protege al forastero, sostiene al huérfano y a la viuda. [8c] Yahvé ama a los honrados, [9c] y tuerce el camino del malvado. 10 Yahvé reina para siempre, tu Dios, Sión, de edad en edad. ¡Aleluya!
Bien, hasta el (7) no hay nada nuevo, enumera los logros y habla de la misericordia de Dios. A partir del (8) se nos dice que “abre los ojos a los ciegos”, los cuales designan a los Eva que hasta ahora no ven y pronto podrán ver a Dios por la razón del mundo. “endereza a los encorvados” nos habla de lo mismo.
En (10) hace referencia a cómo los planes del Señor se llevan a cabo de Tiempo en Tiempo, pues hasta ha encontrado una manera de, en justicia, abrir el entendimiento a los Eva. Esto solo podía ser en el fin del mundo para nivelar, ya lo he dicho varias veces, la desventaja que supondrá dejar de actuar repentinamente en la historia de todos nosotros, y a su vez, nivelar la desventaja de los Eva que en el mundo, de no cortarse repentinamente, podrían en justicia salvarse por los Adán, tal y como ocurrió al revés en el cielo (los Adán traicionamos por los Eva).
Sal 147:1-20 Alabad a Yahvé, que es bueno cantar, a nuestro Dios, que es dulce la alabanza. 2 Yahvé reconstruye Jerusalén, congrega a los deportados de Israel; 3 sana los corazones quebrantados, venda sus heridas. 4 Cuenta el número de las estrellas, llama a cada una por su nombre; 5 grande y poderoso es nuestro Señor, su sabiduría no tiene medida. 6 Yahvé sostiene a los humildes, abate por tierra a los impíos. 7 Cantad a Yahvé dándole gracias, tañed la cítara en honor de nuestro Dios: 8 El que cubre de nubes los cielos, el que dispensa lluvia a la tierra, y llena de hierba las montañas, de plantas para el uso del hombre; 9 el que dispensa alimento al ganado, a las crías de cuervo cuando graznan. 10 No se deleita en el brío del caballo, ni se complace en los músculos del hombre. 11 Yahvé se complace en sus adeptos, en los que esperan en su amor. 12 ¡Celebra a Yahvé, Jerusalén, alaba a tu Dios, Sión!, 13 que refuerza los cerrojos de tus puertas y bendice en tu interior a tus hijos; 14 que concede prosperidad a tu territorio y te sacia con flor de harina. 15 Que envía a la tierra su mensaje, y su palabra corre a toda prisa. 16 Que distribuye la nieve como lana y esparce la escarcha cual ceniza. 17 Arroja su hielo como migajas, ante su frío el agua se congela. 18 Envía su palabra y se derrite, sopla el viento y fluye el agua. 19 Revela a Jacob sus palabras, sus preceptos y normas a Israel: 20 no hizo tal con ninguna nación, ni una sola sus normas conoció.
Este Salmo también nos habla de unión de los pueblos, lo que está profetizado ocurrirá ahora (2) congrega a los deportados de Israel = “El lobo y el cordero pacerán juntos”, recordemos que Israel suele ser más general que Jacob = Adán y muchas veces incluye a los Eva. En (8) nos habla de este tiempo en el que el Espíritu estará en el mundo por doquier, en (9) el “alimento al ganado” igualmente a los Eva, a los necios que podrán ver; a las “crías de cuervo” quizá se refiera a esos Adán que se han dejado convencer por el mundo, porque aunque “pájaro” representa a los Adán, “cuervo” oscuro y eso, tiene otra imagen. (15) Envía Su mensaje a la tierra es su Palabra, claro, pero “su palabra corre a toda prisa” pudiera hacer referencia a estas revelaciones que darán pie a que el conocimiento del Señor se extienda en el mundo (ya, yo también me sorprendo de lo pretencioso que suena esto). En (19) “revela a Jacob sus palabras”, nos habla de lo mismo, porque a nadie reveló lo que escondían sobre sus planes de salvación a ejecutar en esos 3 ½ tiempos (“no hizo tal con ninguna nación…”, es literal, tampoco con Jacob hasta ahora, “ni una sola sus normas conoció”).
Sal 148:1-14 ¡Aleluya! ¡Alabad a Yahvé desde el cielo, alabadlo en las alturas, 2 alabadlo, todos sus ángeles, todas sus huestes, alabadlo! 3 ¡Alabadlo, sol y luna, alabadlo, estrellas lucientes, 4 alabadlo, cielos de los cielos, aguas que estáis sobre los cielos! 5 Alaben ellos el nombre de Yahvé, pues él lo ordenó y fueron creados; 6 el los fijó por siempre, por los siglos, les dio una ley que nunca pasará. 7 ¡Alabad a Yahvé desde la tierra, monstruos del mar y abismos todos, 8 fuego y granizo, nieve y bruma, viento tempestuoso, que hace su voluntad, 9 montañas y todas las colinas, árboles frutales y todos los cedros, 10 fieras y todos los ganados, reptiles y pájaros que vuelan, 11 reyes de la tierra y pueblos todos, dignatarios y jueces de la tierra, 12 jóvenes y doncellas también, los viejos junto con los niños! 13 Alaben el nombre de Yahvé: sólo su nombre es sublime, su majestad sobre el cielo y la tierra. 14 Él realza el vigor de su pueblo, orgullo de todos sus fieles, de los hijos de Israel, pueblo de sus íntimos.
Alabanza. Todos alabamos al Señor.
Sal 149:1-9 ¡Aleluya! ¡Cantad a Yahvé un cántico nuevo: su alabanza en la asamblea de sus fieles! 2 ¡Regocíjese Israel en su Hacedor, alégrense en su rey los de Sión: 3 alaben su nombre entre danzas, haciendo sonar tambores y cítaras. 4 Porque Yahvé se complace en su pueblo, adorna de salvación a los desvalidos. 5 Exulten los fieles ante su gloria, desde su lugar griten de alegría, 6 con elogios a Dios en su garganta, y en su mano espada de dos filos; 7 para tomar venganza de las naciones e infligir el castigo a los pueblos, 8 para atar con cadenas a sus reyes, con grillos de hierro a sus magnates, 9 para aplicarles la sentencia escrita: ¡será un honor para todos sus fieles!
Esto ya parece el juicio final, “un cántico nuevo”, en el que se tomará la venganza de las naciones: aquí atar cadenas a sus reyes, a sus magnates nos habla de los reyes y magnates reales del mundo, no a los que poseen el Espíritu como otras veces. Los grilletes o “grillos de hierro” en (8) puede hacer referencia a que los condenados irán con los demonios (el hierro simboliza al demonio según Daniel p.49).
Sal 150:1-6 ¡Aleluya! Alabad a Dios en su santuario, alabadlo en su poderoso firmamento, 2 alabadlo por sus grandes hazañas, alabadlo por su inmensa grandeza. 3 Alabadlo con el toque de cuerno, alabadlo con arpa y con cítara, 4 alabadlo con tambores y danzas, alabadlo con cuerdas y flautas, 5 alabadlo con címbalos sonoros, alabadlo con címbalos y aclamaciones. 6 ¡Todo cuanto respira alabe a Yahvé! ¡Aleluya!
En el cielo, finalmente, viviremos en alabanza de Dios. (6) “Todo cuanto respira” se refiere a todos los que hemos llegado al cielo o lo que lo mismo: Vivos = con Espíritu Santo.
Como veis el Señor es claro. Si este es el primer ensayo mío que leéis sabed que hay escrituras en profetas, el Génesis y el Apocalipsis aun más claras. Deberíamos preguntarnos por qué el Señor lo revela ahora. Sin duda porque se acerca el fin. Y lo revelado no es solo para los necios o sordos del mundo, también es para todos aquellos que viven apoltronados en sus asientos de poder, con miedo de hacer algo que rompa su cómoda vida, aferrados a los brazos de sus sillones por más que ven cómo el Señor los llama a levantarse. Pues esto es lo que ahora está ocurriendo; si el dueño de la finca deja a un mayordomo al cargo de sus empleados, pero tarda en volver y los empleados dejan sus tareas para dedicarse a sus quehaceres del mundo, ¿acaso, cuando se dé cuenta, antes de llegar, no le mandará el dueño de la finca un mensaje al mayordomo para que cambie su manera de proceder? Si fuera un amo vengativo y rencoroso seguramente no, pero hemos tenido suerte… Y si el mayordomo, una vez comprobada la autoría del mensaje, no hace nada, ¿qué creéis que hará con el mayordomo y con los empleados el dueño cuando venga? Lo que antes fue un sillón de Vida, ahora es tan solo un sillón donde esperar la muerte. Esto es peor para los dirigentes judíos que están intentando evitar la propagación de este mensaje, pues ellos conscientemente esconden la Vida a su pueblo; sus sillones emanan muerte, más cuanto mayores son.
Apéndice
TRES TIEMPOS Y MEDIO EN DANIEL
En el profeta Daniel veremos también nuestra historia iniciada desde el cielo, y se hará también en varias etapas (tres y media). La manera en la que el profeta lo expone es con los sueños de los reyes a los que sirve y sus propias visiones. Él hace una interpretación de estos sueños, pero la hace desde el mundo; si estas interpretaciones corresponden a hechos reales de la historia, entonces es porque el Señor se ha servido de la historia o la ha modificado para mostrarnos este mensaje escondido. No obstante, hay interpretaciones de Daniel que a todas luces no son reales, como cuando le predice (y se cumple) a Nabucodonosor que se convertiría en un animal durante 7 años. En estos casos prevalece el mensaje real de Dios hablando de nuestra historia desde nuestra traición en el cielo. Antes de iniciar los sueños, empezaré por el capítulo 5, saltando los dos primeros sueños de Nabucodonosor que después analizo.
Dan 5:3-6 Trajeron, pues, los vasos de oro y plata tomados del templo, de la Casa de Dios, en Jerusalén y bebieron en ellos el rey, sus dignatarios, sus mujeres y sus concubinas. 4 Y mientras bebían vino, alababan a sus dioses de oro y plata, de bronce y hierro, de madera y piedra. 5 De repente aparecieron unos dedos de mano humana que se pusieron a escribir frente al candelabro, en la cal del muro del palacio real, y el rey vio el trozo de mano que escribía. 6 Entonces el rey palideció, se le turbó la mente, se le aflojaron las articulaciones de las caderas y le entrechocaron las rodillas.
Dan 5:24-28 Por eso Dios ha enviado esa mano que trazó este escrito. 25 Lo que está escrito es: Mené, Mené, Téquel y Perés. 26 Y ésta es su interpretación: Mené: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha puesto fin; 27 Téquel: has sido pesado en la balanza y te falta peso; 28 Perés: tu reino se ha dividido y ha sido entregado a medos y persas."
Esta palabra separa los dos primeros sueños de Nabucodonosor de las dos visiones siguientes durante el reinado de Baltasar. Cabe reseñar que, en lo escrito por los dedos flotantes (5:25), se repite la primera palabra “Mené” por lo que hay algunas traducciones que eliminan una de ellas por considerarlo redundante y por lo tanto un error. Sin embargo, todo tiene sentido, pues estas palabras se corresponden a los sueños y visiones, y a nuestras etapas de salvación. En cuanto a que sean unos dedos flotantes los que escriben, nos dice que todo esto está puesto aquí por Dios, no por el hombre y que de alguna manera estos dedos aúnan todos los sueños y visiones.
Veamos los significados que da Daniel.
Mené: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha puesto fin.
Mené: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha puesto fin.
Téquel: has sido pesado en la balanza y te falta peso.
Perés: tu reino se ha dividido y ha sido entregado a medos y persas.
Los dos primeros Mené, nos hablan de nuestros dos primeros tiempos de la traición. 1º en el mismo momento de levantarnos y 2º junto a Dios, pero no en Dios; todavía no estamos en la tierra. Esta fase pre-tierra queda separada también porque son los sueños de Nabucodonosor, que curiosamente, como luego lo veremos, en su 2º y último sueño es avisado de que se convertirá (él) en un animal sin alma, lo que se cumple según dice durante 7 años hasta que reconoce a Dios. Esto es básicamente lo que nos ocurre tras ser expulsados del cielo (Dios ha contado los días de tu reinado y les ha puesto fin) y no poder recibir el Espíritu Santo hasta que Cristo nos rescata en su pasión o si queréis hasta el fin de nuestra vida aquí cuando seamos juzgados y volvamos (el que pueda) al cielo.
Téquel sería nuestro tiempo en el mundo (el tercer tiempo), antes de la pasión. Durante el cual, como digo, no podemos recibir el Espíritu Santo y estamos vacíos. Esto queda descrito aquí como que nos falta peso.
Perés es nuestro último medio tiempo. Ya podemos recibir el Espíritu. Aquí hace referencia a la palabra “reino”, el cual designa también a todos nosotros que alguna vez recibimos el Espíritu Santo. Dice que queda dividido, lo que creo se refiere a cómo quedamos después de la pasión. Algunos, los que pueden escuchar, que son los Adán, quedan enfrentados a los que no (los Eva). Esto solo queda patente cuando podemos recibir el Espíritu Santo, pues es el que nos distingue a unos y a otros. Además, el mismo Jesús lo dice: Mat 10.34 No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada. [Padre contra hijo… habla de división]. Por otra parte, al decir que ‘queda dividido en dos’, habla también de un tiempo divido entre dos = medio tiempo.
En cuanto a los sueños, veremos que también quedan divididos en dos grupos, los del cielo y los de la tierra, aunque hablan de lo mismo de diferente manera:
Primer sueño (de Nabucodonosor).
Dan 2:31-35 "Tú, oh rey, tuviste esta visión: una estatua, una enorme estatua de extraordinario brillo y aspecto terrible se levantaba ante ti. 32 La estatua tenía la cabeza de oro puro, el pecho y los brazos de plata, el vientre y los lomos de bronce, 33 las piernas de hierro, y los pies mitad de hierro y mitad de barro. 34 Mientras estabas mirando, una piedra se desprendió sin intervención de mano alguna, golpeó los pies de hierro y barro de la estatua y los hizo pedazos. 35 Entonces todo a la vez se hizo polvo: el hierro y el barro, el bronce, la plata y el oro; quedaron como la paja de la era en verano, que el viento se lleva sin dejar rastro. Pero la piedra que había golpeado la estatua se convirtió en una gran montaña que llenó toda la tierra.
En este sueño nos habla de los grupos que se revelaron en el cielo y de la propia rebelión. La cabeza de oro se refiere a los Adán, aquellos que traicionaron por amor (oro pues Dios es amor). Los pechos y brazos de plata, se refiere a los Eva. Esto, puede hacer referencia a lo ya mencionado: los Adán traicionan de pensamiento (marcados en la frente), los Eva son marcados en la mano,acción (Apo 13,16. Ver Un poco de Numerología). El vientre y los lomos de bronce, serían los demonios y los pies de hierro y barro es el satán. El barro quizá haga referencia a esa iniquidad que surge de él, y que debilita la estructura (la roca, también es algo terrestre, y, de hecho, luego se convierte en montaña que llena toda la tierra). Al final es la iniquidad, esa codicia, la que nos hace caer a todos. Más bien es el desencadenante, porque, aunque esa cabeza de oro caiga por amor, en realidad lo hace siguiendo a los Evas que caen antes y a los que amamos intensamente en el cielo. Entonces la piedra hace que todo se convierta en polvo (nos vaciamos del Espíritu) y junto con ella caemos como una gran montaña y llenamos toda la tierra.
Este sueño representa el primer tiempo, la rebelión. Justo después, incluido en este tiempo, vendrá el suceso en el que Dios salva del horno a Sidrac, Misac y Abdénago (Dan 3,14-93) lo que puede hacer referencia a que no destruye a los Adán, Eva, y demonios que llegarán a la tierra; esto tiene más sentido complementándolo con otras salvaciones de dos periodos más, puesto que estos tres en la lectura son enviados al horno por fidelidad a Dios, no obstante, como decía, la interpretación de Daniel en la escritura es diferente de lo escondido en estos capítulos por Dios. Así, por ejemplo, la palabra Abdénago proviene del nombre babilónico formado de la voz semítica ab-d, que significa "siervo, servidor", y Nebo, uno de los dioses de Mesopotamia. Si buscamos a Nebo (Nabu) en la Wikipedia, vemos que era un dios semítico occidental asirio, que en su sobrero lleva dos cuernos, y monta un dragón (que pertenecía a su padre –por adopción- Marduk, divinidad principal de Babilonia). Según esto “Abdénago” sería “servidor de Nebo”, lo que cuadraría más con esos demonios servidores del satán.
Segundo sueño (de Nabucodonosor).
Dan 4:10-17 "Estando en mi lecho tuve estas visiones: Miré y en medio de la tierra había un árbol cuya altura era enorme. 11 El árbol creció y se hizo corpulento; su copa llegaba al cielo y era visible desde todos los confines de la tierra. 12 Su ramaje era hermoso y su fruto abundante; tenía alimento para todos. Bajo él buscaban refugio las bestias del campo, y en sus ramas anidaban las aves del cielo; de él se alimentaba todo ser vivo. 13 Estaba en mi lecho contemplando las visiones de mi mente, cuando un vigilante, un santo, bajó del cielo, 14 y gritó con gran fuerza diciendo: “Derribad el árbol, cortad sus ramas, arrancad sus hojas y desparramad su fruto; huyan de debajo de él los animales salvajes, y de sus ramas las aves. 15 Pero el tocón con sus raíces, dejadlo en tierra, atado con cadenas de hierro y de bronce entre la hierba del campo; que se empape del rocío del cielo y comparta con las bestias el pasto de la tierra. 16 Le será cambiado el corazón de hombre y se le dará un corazón de bestia, y así pasará siete años. 17 Por decreto de los ángeles llega la sentencia, y por mandato de los santos la resolución, a fin de que los vivientes reconozcan que el dominio del Altísimo está por encima del reinado de los hombres; él lo da a quien quiere y eleva hasta el reino al más humilde de los hombres”.
El árbol (4:10) en el centro de la tierra es el reino de Dios. Puede incluso hacer referencia también al árbol de la Vida que está en el centro del cielo, en cualquier caso, se refiere al Espíritu Santo, la Esencia de Dios. En 4:11 ya nos comienza a hablar de la rebelión, pues fue la codicia de esa Esencia, que estaba disponible para nosotros en el cielo la que nos hace tomar de ella y crecer sin medida (creció y se hizo corpulento). Así esta Esencia, aunque indebidamente tomada seguía siendo la Esencia de Dios (ramaje hermoso, fruto abundante, comida para todos). De ella se nutren las bestias del campo (los demonios o los ángeles que codiciaron y se levantaron creyéndose tanto como Dios), las aves del cielo (los adán o ángeles que tomaron por amor a los Eva, que más tarde se podrán separar de la tierra), y demás vivientes (los no nombrados, Evas faltan). El vigilante santo, representa a los ángeles fieles y cortar el árbol es vaciar del Espíritu Santo a los traidores, ladrones de la Esencia. “Dejad solo en tierra el tocón con sus raíces, con cadenas de hierro y bronce entre los matojos del campo”, nos habla de nuestra caída a la Tierra, en la que estaremos todos sin Espíritu: el tocón con sus raíces, sin hojas, ramas, ni vida. El tocón en realidad nos representa a los Adán y antes de la pasión estaremos esclavizados por las cadenas de hierro (satán) y de bronce (demonios); esto enlaza con el primer sueño, el de la estatua. La hierba del campo pueden ser los Eva, no comparables al tocón con sus raíces, particularmente mencionadas, en la tierra. “Que se le quite su alma humana y se le dé un alma animal y viva así siete años”, nos habla de lo mismo, ese vaciado del Espíritu y ese periodo de prueba en la tierra que nos permitirá gracias a Dios salvarnos. En cuanto al rocío del cielo, puede referirse a la historia de salvación que tiene Dios con los hombres, incluso antes de Jesucristo. No estamos hablando de savia que fluye por el interior sino de algo exterior que empapa.
Como decía, en cuanto a la interpretación que da Daniel y luego se cumple para el rey, señalar que no tiene sentido desde la realidad del mundo. Este sueño no se ha ocultado con hechos aparentemente históricos, solo tiene sentido desde el cielo.
Hay referencias que nos hablan del 2º periodo (cerca de Dios, pero no en Dios), el tiempo de Caín y Abel y la torre de babel: El árbol creció y se hizo corpulento, su altura llegaba al cielo, es la misma imagen de los que se unen para alzar la torre de Babel hasta el cielo y que luego Dios destruye. Por otra parte, después, en el siguiente capítulo (5), nombrará los dedos invisibles que, como ya decía, parecen separar nuestras etapas en el cielo y las de la tierra. En este sentido, las dos interpretaciones de Daniel que hemos visto eran “Sueños”, que son los del cielo y las dos que quedan son “Visiones” que corresponderían a nuestras etapas en la tierra (nota, además, que la visión es al cuerpo –es más física- como el sueño al alma, quizá).
Por otra parte, después de este sueño viene cuando Dios salva a Daniel en el foso de los leones Dan 6:10-22. Esto, que se repetirá al final de la 4ª visión, puede significar que Dios salva a los Adán permitiéndoles escuchar y recibir al Espíritu Santo en su momento (no como a los sordos, Eva). Si antes salvó del horno a los 3 que creo designan grupos, ahora parece representar que las aves, Adán, podrán huir de las bestias (foso de los leones). Esto que parece un tanto arriesgado en la interpretación, hay que verlo en conjunto, en esas tres salvaciones de ejecución (dos de ellas exactamente iguales, pese a ser penas de muerte de reyes distintos: Darío el Medo, y Ciro el Persa).
Tercera Visión (durante el reino de Baltasar)
Dan 7:2-8 En mi visión nocturna vi cómo los cuatro vientos del cielo agitaban el océano, 3 y cómo cuatro bestias gigantescas, todas diferentes entre sí, salían del mar. 4 La primera parecía un león con alas de águila. Mientras yo la miraba, le arrancaron las alas, la levantaron del suelo, se incorporó sobre sus patas como un hombre y le dieron una mente humana. 5 A continuación apareció una segunda bestia, semejante a un oso, erguida sobre un costado, con tres costillas en las fauces, entre los dientes. Y le decían: "Levántate y devora carne en abundancia." 6 Luego, mientras seguía mirando, vi otra bestia parecida a un leopardo con cuatro alas de ave en su dorso y cuatro cabezas, a la que dieron el poder. 7 Después, en mis visiones nocturnas vi una cuarta bestia, terrible, espantosa y muy fuerte. Tenía enormes dientes de hierro; comía, trituraba, y pisoteaba las sobras con sus patas. Era diferente de las bestias anteriores y tenía diez cuernos. 8 Estaba yo observando los cuernos, cuando entre ellos despuntó otro cuerno pequeño y tuvieron que arrancarle tres de los cuernos anteriores para hacerle sitio. Este cuerno tenía ojos humanos y una boca que decía barbaridades.
Este sueño nos narra de nuevo la rebelión, hablándonos de los grupos rebeldes como hizo el sueño de la estatua. Como es el tercero parece hacer referencia al tercer periodo: estamos en la tierra. En realidad, no hay muchos datos para afirmar esto, salvo el orden, la mano escribiendo en la pared que separaba los dos sueños previos del cielo (Mené, Mené... de Nabucodonosor), la asignación Téquel (te falta peso, sin Espíritu) y el inicio de la visión: “En mi visión nocturna”, siendo la noche nuestro tiempo en la tierra.
Empieza hablando de los 4 vientos del cielo agitaban el océano. Estos pueden hacer referencia los 4 puntos cardinales de la tierra, aunque seguramente hable de los grupos o agentes participantes en la rebelión, que ya conocemos: Adanes, Evas, demonios y satán. Dice “(7:3) y cómo cuatro bestias gigantescas, todas diferentes entre sí, salían del mar”, la traducción correcta es “suben del mar” (ascendebant), que no implica salir fuera del mar (muerte). Nótese que estábamos hablando de un océano, no de un mar que simboliza la muerte, esto puede ser relevante o solo una manera de hablar.
Las bestias entonces son los grupos del cielo:
El león (1ª bestia) con alas de águila hace referencia los Adán, a los que se les quita las alas y serán hechos hombres, aunque su pecado fue por amor. Los Adán son, de entre estas bestias, los mejores; ellos aún tienen amor.
El oso (2ª bestia) semejante a un oso, erguida sobre un costado, con tres costillas en las fauces, entre los dientes… devora carne. Estos son los Eva y las tres costillas se refieren a otros Eva a los que convencen, a Adán y a demonios; es decir, ellos convencen a otros ángeles que finalmente por la motivación que los lleve hasta la traición (amor, codicia, odio) se convertirán en una u otra cosa. Cuando dice que el oso se apoya en el costado puede hacer referencia a que en la tierra serán puestos gracias a los Adán (de la costilla de Adán se crea a Eva), es decir, Dios intenta especialmente salvar a los que traicionaron por Amor, los Eva traicionaron por codicia, sin ser tan malos como los demonios que odiaron, igualmente se alejaron por completo de Dios (que es amor). Esa “costilla de Adán” puede ser también una de las que tiene en la boca el oso. El hambre del oso representa la codicia de los Eva por engordar con el Espíritu Santo.
El leopardo (3º bestia). “Luego, mientras seguía mirando, vi otra bestia parecida a un leopardo con cuatro alas de ave en su dorso y cuatro cabezas, a la que dieron el poder.” El leopardo es un felino que caza, no representa la realeza como el león, sino la astucia y habilidad para cazar. Creo que estos son los demonios en general. Cuando dice que se les da el poder y que tiene cuatro cabezas creo que se refiere al poder que Dios les da de tentarnos en el mundo (4 puntos cardinales), porque este realmente es dado por Dios cuando estos ya estaban vencidos, con el fin de podernos justificar en la lucha del mundo y en nuestra libertad. En cuanto a las alas que no cuadran demasiado, pueden referirse a que fueron ángeles también o quizá a la habilidad que tendrán de susurrar en nuestros oídos “volando” sin cuerpo alguno. Hay otra referencia en la última visión (4ª) al macho cabrío que representa ahí al demonio y los suyos, en el que este recorría “la tierra sin tocar el suelo”. Nótese, además, que son 4 alas (4 puntos cardinales).
Bien, este orden cuadraría con la estatua de oro, el primer sueño, quizá me equivoque y el oso y el leopardo se intercambien.
La 4ª Bestia, es espantosa y terrible. Es satán que fue ángel extremadamente bello y grande en Esencia de Dios. Fue por él que entró la iniquidad y al que muchos siguieron. Es el peor, el padre del odio.
Dice que tiene 10 cuernos y que luego salió uno por el que tres cayeron. Esto es importante: los cuernos son todo con lo que se hiere a Dios, es decir, un cuerno también puede designar a un grupo de ángeles o al daño que reciben estos (lo cual hiere a Dios); así la “muerte” de estos hiere al Señor, de la misma manera que nuestros pecados también lo hacen porque Él nos ama.
El cuerno que despunta pequeño se trata del chantaje (quiero el mismo destino que los Adán que también son traidores) por el que tres grupos (cuernos) caerán a la tierra: los Adán, los Evas y los demonios. Efectivamente el chantaje es algo que también hiere a Dios, siendo algo pequeño: una mentira, hace que caigan tres cuernos. Dice que tiene ojos humanos, pudiéndose referir a lo que conseguirá, que caigamos como hombres en la tierra (solo ojos quizá porque los demonios no tienen cuerpo). Las barbaridades son las mentiras del chantaje y seguramente todas las mentiras de los demonios en la tierra.
Así quedan en el cielo 7 cuernos, que son las naciones o grupos por capacidad del cielo (7 iglesias también en la tierra, las 7 naciones por edades, si queréis, en cuanto al alma por las que Dios ha puesto distintos caminos para llenarnos aquí en la tierra con cantidad suficiente según sea nuestra capacidad) y además ese chantaje allí presente (en el cielo) hasta que todo concluya (10+1-3= 7+1). Recordemos que a estos 7 grupos que quedaron en el cielo (que originalmente estaban antes de la traición en el cielo), también el demonio atacó en la guerra y por estos sufrió Dios, de ahí que sean “cuernos que hieren”.
Continuando con la misma Visión:
Dan 7:9-14 Mientras yo seguía mirando, prepararon unos tronos y un anciano se sentó. Sus vestidos eran blancos como la nieve; sus cabellos, como lana pura; su trono, llamas de fuego; las ruedas, fuego ardiente. 10 Fluía un río de fuego que manaba delante de él. Miles y miles le servían, millones lo acompañaban. El tribunal se sentó, y se abrieron los libros. 11 Seguía mirando, fascinado por las barbaridades que decía aquel cuerno, y vi que mataron a la bestia, destrozaron su cuerpo y lo arrojaron al fuego abrasador. 12 A las otras bestias les quitaron el poder, pero las dejaron vivas hasta un momento determinado. 13 Yo seguía mirando, y en la visión nocturna vi venir sobre las nubes del cielo alguien parecido a un ser humano, que se dirigió hacia el anciano y fue presentado ante él. 14 Le dieron poder, honor y reino y todos los pueblos, naciones y lenguas le servían. Su poder es eterno y nunca pasará, y su reino no será destruido.
Entonces, el chantaje de la bestia tiene sus consecuencias y es que Dios (anciano -7:9-) destroza a la bestia echándolo al fuego y las otras tres bestias quedan vivas para después dejarlas en la tierra (un momento determinado). Estos somos los Adán, Eva y demonios. “(7:13) Alguien parecido a un ser humano” y lo siguiente, se refiere a Jesús. En cuanto a la bestia y el cuerno que decía barbaridades y que arrojan al fuego (7:11), puede referirse también a la destrucción del chantaje (cuerno emergente), el cual quedará anulado mediante la creación del mundo y la pasión del Señor (aunque seguirá presente hasta que todo termine), no creo que sea una destrucción de satán para siempre. Es más, parece como una manera de plantearlo todo concluido; a diferencia de la siguiente visión que queda inacabada, en esta, lo único que queda abierto es el hecho de dejar “7:12 hasta un momento determinado” a las otras tres bestias con vida. Como nota la verdadera traducción de esto debería ser: “les había sido prolongada la vida tiempo y tiempo” (ad tempus et tempus) ¿Puede el Señor ser más claro? (recordemos que en esa parte está describiendo el momento de la rebelión en el cielo y que con seguridad nosotros vivimos la 1ª + 2ª + [3ª o 4ª: tierra] etapa).
Cuarta Visión (durante el reino de Baltasar).
Dan 8:3-14 Levanté la vista y vi un carnero que estaba en pie junto al río. Tenía dos cuernos; los dos cuernos eran altos, pero uno más que otro y el más alto había despuntado el último. 4 Vi que el carnero embestía contra el oeste, el norte y el sur. Ninguna bestia podía hacerle frente, nadie escapaba a su poder. Hacía lo que quería y dominaba. 5 Estaba todavía reflexionando, cuando vi un macho cabrío que venía de occidente, recorriendo toda la tierra sin tocar el suelo; el macho cabrío tenía un cuerno magnífico entre los ojos. 6 Llegó hasta el carnero de dos cuernos que yo había visto en pie junto al río y se lanzó contra él con todo el ímpetu de su fuerza. 7 Vi cómo se acercaba al carnero y le embestía, enfurecido contra él, rompiéndole los dos cuernos, sin que el carnero tuviera fuerzas para hacerle frente; lo derribó en tierra y lo pisoteó, sin que nadie librara al carnero de su poder. 8 El macho cabrío se hizo muy grande y cuando era más fuerte, el cuerno grande se rompió y en su lugar despuntaron otros cuatro orientados a los cuatro puntos cardinales. 9 De uno de ellos salió otro cuerno pequeño, que creció mucho hacia el sur, hacia el este y hacia la Tierra del Esplendor. 10 Creció hasta alcanzar el ejército del cielo, derribó por tierra una parte del ejército y pisoteó sus estrellas. 11 Llegó incluso hasta el Jefe del ejército, suprimió el sacrificio perpetuo y socavó los cimientos de su santuario. 12 Le entregaron el ejército, en lugar del sacrificio instauró la iniquidad y tiró por tierra la verdad; y en todo cuanto emprendió tuvo éxito. 13 Oí entonces a un santo que hablaba, y a otro santo que le preguntaba: "¿Cuándo tiempo durará la visión: el sacrificio perpetuo, la iniquidad desoladora, el santuario y el ejército pisoteados?" 14 El otro respondió: "Dos mil trescientas tardes y mañanas; después el santuario será rehabilitado."
Este es el medio tiempo. Y esto no es solo por el orden (4º de 3 tiempos y medio), sino porque es el único no concluido. En los demás sueños se concluye el periodo de salvación o bien, su periodo del cielo: en la estatua de oro, desde el cielo se narra la rebelión y termina con la consecuencia de esta (se llena la tierra por la roca que se desprende); en el árbol también del cielo, nos cuenta la rebelión y cómo cae, pero ya se nos plantea la solución: el hombre reconoce que “el Altísimo es dueño de los reinos humanos”, después de lo cual (7 años ahí) Nabucodonosor vuelve a ser hombre, pues se convirtió en bestia. Sin embargo, tras este sueño, continúa Daniel preguntando:
"¿Cuándo tiempo durará la visión: el sacrificio perpetuo, la iniquidad desoladora, el santuario y el ejército pisoteados?” De manera que se sitúa en un tiempo inacabado de la historia del mundo (aunque hable o pregunte por un futuro desde su lugar en el tiempo). La respuesta a esta pregunta es la segunda parte de las profecías de Daniel y también inciden en la separación de los tres tiempos y medio, como se verá. Parece entonces, que en Daniel este medio tiempo queda determinado por el hecho de ser inacabado lo relatado, y no ocurre como en otros lugares de la Biblia en los que se nos habla de los 3’5 tiempos y el último medio queda claramente determinado por la pasión de cristo. No obstante, como decía después explica con números esos tres tiempos y medio. De hecho, Daniel es el que más claramente habla de ellos en la biblia, si no recuerdo mal.
Pero volviendo al sueño vemos que hay un carnero con dos cuernos; uno despunta al otro. Estos cuernos son los Adán y los Eva. Siendo los Eva, “el que despunta al otro”, ya que el grupo Adán como decíamos son los que siguen a los Eva por procesarles amor (caen por ellos). Dice que el carnero “embestía contra el oeste, el norte y el sur” lo que viene a decir que se le dio libertad para hacer todo menos ir contra Dios (el este es por donde sale el Sol=Dios). Es otra forma de decir: “come de cualquier árbol menos del de la Vida”.
Viene un macho cabrío desde occidente (=donde se pone el sol => muerte) y ataca al carnero. Este es el satán y sus seguidores. Derriba al carnero en tierra y le rompe los cuernos. Esto hace referencia ya a la futura caída de los Adán y Eva a la tierra, al mundo, o en cualquier caso al vaciado del Espíritu. “(8:8) El macho cabrío se hizo muy grande y cuando era más fuerte, el cuerno grande se rompió y en su lugar despuntaron otros cuatro orientados a los cuatro puntos cardinales;”esto hace referencia a cómo aumentó la rebelión y a que, al final, el demonio y los suyos fueron vencidos (se rompe el cuerno). Ahora se divide en 4 cuernos. Como decía en el 3er sueño los cuernos son todo con lo que se hiere a Dios o con lo que se puede herir a Dios, es decir, un cuerno también puede designar al hecho de dañar a un grupo de ángeles, lo cual a su vez herirá a Dios. De manera, que la rebelión termina, pero ahora es cuando toca discernir y ver quién es el culpable o qué culpa tiene cada uno. Se distinguen entonces 4 grupos por tipo de traición: Los Adán, que traicionaron por amor hacia los Eva. Los Eva que codiciaron. Los demonios que codiciaron y en la lucha odiaron y por último el satán que es el promotor, el que fue más bello y grande, el padre del odio. De este sale uno pequeño, este cuerno pequeño es el chantaje (que hiere profundamente a Dios), y que va haciéndose más grande pues por él (quiero el mismo destino que los Adán que son también traidores), irán cayendo a la tierra, no solo los demonios, sino los Evas y los propios Adán. “Llegará hasta al jefe del Ejército” es porque finalmente todo esto solo se podrá solucionar mandando a Jesús, quien ya se ofrece en el cielo, a salvarnos en el mundo. Así, la dirección en la que crecen estos 4 cuernos en los que se separó el cuerno único, son este = Adán (caen por amor), sur = Evas (en algunos sitios hace referencia al sur como los Evas por ser desde donde viene la reina de Saba, creo que esto era en Job), y la Tierra del Esplendor que hace referencia al Espíritu Santo en sí mismo, al Jefe de los Ejércitos, o a Jesús que será enviado a la tierra, o en general a los tres, a Dios.
Entonces ese sacrificio perpetuo (12), la iniquidad, y todo lo demás que viene después se refiere a nuestro tiempo alejados de Dios, vacíos del Espíritu Santo (hasta la pasión) o incluso hasta el fin del mundo. Cuando dice “le entregaron el ejército” se refiere a que Dios revive o permite la vida del satán y los demonios (su ejército) entre nosotros para mediante nuestra lucha personal con ellos podamos justificarnos, en nuestra libertad podamos elegirle a Él, podamos revivir pues llegamos muertos a la tierra.
Después de esta no hay más visiones, por lo que los siguientes capítulos los podemos encuadrar dentro de este tiempo. Esto es relevante porque el último capítulo como decía, termina también con la salvación de Daniel por parte de Dios del foso de los leones (no sé si es el mismo foso u otro, lo sitúa en “Babilonia”). Dado que este medio tiempo, no viene delimitado como en el resto de lugares en la Biblia por la pasión, sino por el hecho de ser un relato inacabado, podemos de nuevo pensar en que esa es la salvación de los Adanes, ya sea porque pueden recibir el Espíritu tras la Pasión o porque en general, el mundo y su historia completa se crea para intentar salvarlos a ellos, siendo los Eva o sordos, tan solo un acompañamiento que, de salvarse, lo harán por los Adán (de la costilla de Adán…).
Por resumir y antes de seguir con los números, vemos que Daniel también está estructurado como otras lecturas. Los 3’5 tiempos ya hemos visto que se muestran en los sueños y visiones, pero además vemos que Dios salva milagrosamente 3 veces y después de cada “gran” tiempo.
Cap | ||
Mené |
||
5 6 |
Dedos flotantes escribiendo (5:5-28) Dios Salva del foso de leones a Daniel (6:14-23) |
Mené |
1ª predicción contada a Daniel 3’5 años (7:16-27) |
Téquel |
|
12 14 |
Predicción contada a Daniel 2300 tardes y mañanas (8:13-17) Predicción contada a Daniel 70 semanas. No se corresponde con las otras, quizá indique la relación de los tamaños de los tiempos (del total 70,7 y 62, 1 y 0’5 semanas).(9:22-27) Predicción sin números (no la entiendo). (10:11-21, 11) Predicción contada a Daniel 1290 días. (12:8-13) Dios Salva del foso de leones a Daniel otra vez (14:36-41) |
Tiempo Perés |
Mené: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha puesto fin.
Téquel: has sido pesado en la balanza y te falta peso.
Perés: tu reino se ha dividido y ha sido entregado a medos y persas.
Las diez plagas también nos muestran
lo que ocurrió desde el cielo.
La escalera de Jacob
Si queréis compaginar, las plagas están en los capítulos del Éxodo 7,8,9,10,11,12. Además, esta lista de sucesos se refleja también en el Apocalipsis de manera encriptada como aquí.
Ya hemos visto a quién simboliza el Faraón en nuestra historia: el demonio. Y la esclavitud, al pecado, a la imposibilidad de recibir el Espíritu Santo, a la muerte interior. Voy a exponer la relación de las diez plagas que Dios envía para nuestra liberación (aunque como se verá, también muestran nuestra caída desde el cielo), y la correspondencia de estas con los diez escalones (o acontecimientos que nos acercan al cielo), presentes en el Éxodo. Constituyéndose las plagas como escalones hacia abajo y los hechos ocurridos en el Éxodo, como escalones hacia arriba (todos perfectamente ordenados como aparecen en la Biblia). Dado que como afirmo fuimos ángeles y en la tierra acabamos, ¿No será esta la Escalera de Jacob que se le prefiguró en un sueño a Isaac? Os ruego leáis esto con atención y comprobéis que no es un disparate.
En el Inicio, antes de las plagas, el cayado se torna en serpiente. Hace referencia al momento en el que Satán cambia de Ángel, o ser que contiene la Esencia de Vida, el Espíritu Santo simbolizado como el Árbol de la Vida en el Antiguo testamento (ya se ha explicado esto), a serpiente. De una parte del Árbol de la Vida (tu cayado) pasa a serpiente. Una “parte” de Dios delante del Faraón (Satán), de su pensamiento o iniquidad o libertad, se convierte en serpiente; es decir, Satán que antes era ángel se convierte en serpiente. Pero sus magos convierten también los báculos en serpientes, que quiere decir que por obra de Satanás otros se volvieron también ángeles caídos.
El hecho de que la vara de Moisés se convierte en serpiente también, hace referencia a Jesucristo, quien siendo parte del ‘Árbol de la vida’ toma forma de hombre. Este se comerá a las otras serpientes haciendo ya referencia a lo que ocurrirá en la pasión.
Éxo 7:8 Habló Yahveh a Moisés y Aarón, y dijo: 9 «Cuando Faraón os diga: Haced algún prodigio, dirás a Aarón: "Toma tu cayado y échalo delante de Faraón, y que se convierta en serpiente."» 10 Presentáronse, pues, Moisés y Aarón a Faraón, e hicieron lo que Yahveh había ordenado: Aarón echó su cayado delante de Faraón y de sus servidores, y se convirtió en serpiente. 11 También Faraón llamó a los sabios y a los hechiceros, y también ellos, los sabios egipcios, hicieron con sus encantamientos las mismas cosas. 12 Echó cada cual su vara, y se trocaron en serpientes; pero el cayado de Aarón devoró sus varas.
La 1ª plaga El agua se convierte en sangre.
El agua del Nilo, es el agua que riega a Egipto. De nuevo, agua simboliza a la Esencia de Dios. Antes todos compartíamos “algo” de esa Esencia (aquí y ahora en la tierra, también los que están en Gracia). Dice que convierte con el báculo (el que representaba parte del árbol de la vida antes), esa Agua en sangre. El Agua desaparece y solo queda sangre. Aquellos que se levantan o dudan dejan de estar regados por la Esencia de Dios. Se vacían. Los peces cuyo medio natural es el Agua, mueren. Morimos como deseos de Dios. Ya no tenemos su Esencia. En realidad, esto ocurre primero a los que se levantaron y por obra del demonio (los magos que también convierten agua en sangre), los demás sufren la misma suerte. Estos últimos son los ángeles Eva y por amor a estos también los ángeles Adán.
Habrá sangre … hasta en los árboles y las piedras. Los árboles representan a las ‘personas’ libres, quizá se refiera a los Adán-Eva o solo a los Adán; y las piedras a los Eva (piedra que no siente, no oye) o el otro caso a los caídos (piedra muerta).
Como nota a tener en cuenta, esta plaga no consta que se retira como otras plagas en las que el faraón se arrepiente y le pide a Moisés que las aparte; lo que significa que perdemos para siempre nuestra naturaleza celestial y ya solo los que lo consigan volverán a contener el Espíritu Santo en la naturaleza hombre (punto este no alcanzado todavía en estas plagas). Por supuesto los levantados o ángeles caídos no podrán nunca porque ni siquiera llegarán a tomar cuerpo de hombre.
Éxo 7:17 Así dice Yahveh: En esto conocerás que yo soy Yahveh: Mira que voy
a golpear con el cayado que tengo en la mano las aguas del Río, y se
convertirán en sangre. 18 Los peces del Río morirán, y el Río quedará apestado de modo que los
egipcios no podrán ya beber agua del Río.» 19 Yahveh dijo a Moisés: «Di a Aarón: Toma tu cayado, y extiende tu mano
sobre las aguas de Egipto, sobre sus canales, sobre sus ríos, sobre
sus lagunas y sobre todos sus depósitos de agua. Se convertirán en
sangre; y habrá sangre en toda la tierra de Egipto, hasta en los
árboles y la piedras.» 20 Moisés y Aarón hicieron lo que Yahveh les había mandado: alzó el
cayado y golpeó las aguas que hay en el Rió en presencia de Faraón y
de sus servidores, y todas las aguas del Rió se convirtieron en
sangre. 21 Los peces del Río murieron, el Río quedó apestado de modo que los
egipcios nos pudieron beber el agua del Río; hubo sangre en todo el
país de Egipto. 22 Pero lo mismo hicieron con sus encantamientos los magos de Egipto;
y el corazón de Faraón se endureció y no les escuchó, como había dicho
Yahveh.
La 2ª plaga. Las Ranas.
Con el báculo Moisés hace que salten las ranas del Nilo por todo Egipto. Esto es en lo que hemos quedado: ranas que son anfibias, pero no como peces. De estar en el río pasamos a estar fuera de él, como si fuéramos débiles bolsitas verdes. Es un salto previo a vivir en la tierra (quizá el momento en el que ya no estábamos en Dios sino cerca de Él). Como siempre esto es para los que se levantaron, pero igualmente ocurre para los Adanes y Evas. Por obra del Demonio (sus magos) muchos cayeron. Esto quizá se deba al concepto de Justicia, pues, aunque algunos odiaron, todos los que acabamos en la tierra nos vaciamos (ver Justicia y Redención en Jesucristo). Satán y sus demonios exigen el mismo destino que nosotros por habernos quedado vacíos como ellos.
Éxo 8:1 Dijo Yahveh a Moisés: «Di a Aarón: Extiende tu mano con tu cayado sobre los canales, sobre los ríos y sobre las lagunas, y haz que suban las ranas sobre la tierra de Egipto.» 2 Aarón extendió su mano sobre las aguas de Egipto; subieron la ranas y cubrieron la tierra de Egipto. 3 Pero los magos hicieron lo mismo con sus encantamientos, e hicieron subir las ranas sobre la tierra de Egipto.
La 3ª plaga y 4ª plaga (mosquitos y tábanos)
Esta es la primera plaga que no pueden repetir los “magos del Faraón”. Los mosquitos aparecen sobre los hombres y sobre los ganados. Vamos a pensar que ganados se refiere a Evas tal y como ocurre en Noé y en otros lugares (en el Arca se meten aves = adanes -se pueden separar del mundo- ganado = evas -víctimas indefensas ante los réptiles, para los que solo tienen oídos- y reptiles = demonios). Los hombres pueden ser los adanes o bien los levantados. Los mosquitos, y los tábanos después, creo que son los ángeles en lucha con los levantados. Creo que en estos se habla de la batalla de ángeles y arcángeles con los vacíos de Dios.
Éxo 8:12 Dijo Yahveh a
Moisés: «Di a Aarón: extiende tu cayado y golpea el polvo de la tierra
que se convertirá en mosquitos sobre todo el país de Egipto.» 13 Así lo hicieron: Aarón extendió su mano con el cayado y golpeó el
polvo de la tierra; y hubo mosquitos sobre los hombres y sobre los
ganados. Todo el polvo de la tierra se convirtió en mosquitos sobre
todo el país de Egipto. 14 Los magos intentaron con sus encantamientos hacer salir mosquitos,
pero no pudieron. Hubo, pues,
mosquitos sobre hombres y ganados.
Exo 8:17 Si no dejas salir
a mi pueblo, mira que voy a enviar tábanos contra ti, contra
tus siervos, tu pueblo y tus casas, de manera que las casas de los
egipcios y hasta el suelo sobre el cual están se llenarán de tábanos. 18 Pero exceptuaré ese día la región de Gosen, donde está mi pueblo, para
que no haya allí tábanos, a fin
de que sepas que yo soy Yahveh en medio de la tierra; 19 haré distinción entre mi pueblo y el tuyo. Este prodigio sucederá
mañana.» 20 Así lo hizo Yahveh, y un enorme enjambre de tábanos vino sobre la casa
de Faraón y la casas de sus siervos; y toda la tierra de Egipto; la
tierra fue devastada por los tábanos
Cabe resaltar en la plaga de los tábanos, que no hay opción para el Faraón, es decir, no hay consulta; no quita los mosquitos una vez que se arrepiente el Faraón y luego salen los tábanos. Probablemente sea porque los mosquitos y los tábanos corresponden al mismo momento en el cielo: a esa batalla celestial en la que atacaron los ángeles y arcángeles juntos contra los caídos. Pero había que hacer una diferenciación entre los participantes. Nombrar que primero fueron los ángeles y luego se unieron los arcángeles, porque más tarde será Dios mismo el que intervenga. La razón por la que se indica la jerarquía es que todos, antes o después lucharemos según nuestra capacidad, esto se complementa con los escalones correspondientes a esta plaga, los escalones 8 y 7.
La 5ª plaga: Muere el ganado.
Los Evas comenten peor falta que los Adanes, pues desean la Esencia de Dios, aunque no se levantan y además por estos se vacían también los adanes que más bien consintieron por amor a ‘ellas’. Como ya he dicho varias veces, por justicia, los Eva no pueden recibir en la tierra a Dios salvo por obra de los adanes; tal y como estos recibieron la condenación por los primeros. Creo que esta es la plaga que borra a los Eva del Libro de la Vida. Aquí “ganado de Israel” en contraposición, serían los Adanes o bien los ángeles fieles.
Éxo 9:2 Si te niegas a dejarles salir y los sigues reteniendo, 3 mira que la mano de Yahveh caerá sobre tus ganados del campo, sobre los caballos, sobre los asnos, sobre los camellos, sobre la vacadas y sobre las ovejas; habrá una grandísima peste. 4 Pero Yahveh hará distinción entre el ganado de Israel y el ganado de los egipcios, de modo que nada perecerá de lo perteneciente a Israel.» 5 Y Yahveh fijó el plazo, diciendo: «Mañana hará esto Yahveh en el país.» 6 Al día siguiente cumplió Yahveh su palabra y murió todo el ganado de los egipcios; mas del ganado de los israelitas no murió ni una sola cabeza.
La 6ª plaga: Las úlceras.
Se refiere a cómo nuestra alma o bolsa contenedora del Espíritu vacía entonces, queda deteriorada (ulcerada) incapaz de recibir el Espíritu Santo. Ya no somos deseos de Dios ni siquiera cuando pasemos luego a ser hombres. Esto ocurre a hombres, ganado y magos, es decir a Adanes, Evas y demonios (o levantados).
No es lo mismo que lo ocurrido en la plaga anterior porque las úlceras simbolizan la rotura del alma, no solo el vaciado, y son producidas a todos los que pierden el espíritu, a los caídos además no se les da cuerpo (son odio), y los Eva en el mundo tienen la imposibilidad de escuchar al Señor por sí mismos. Son de los millones de muertos andantes que hay por ahí, pero además incapaces de cambiar su situación por sí mismos. Bien es cierto que como he comentado ya, los Adanes pueden revivirlos por medio de su amor (pueden mostrarles a Dios en su vida) de la misma manera que ellos fueron muertos por amor hacia los Eva
Éxo 9:8 Dijo Yahveh a Moisés y a Aarón: «Tomad dos grandes puñados de hollín de horno, y que Moisés lo lance hacia el cielo, en presencia de Faraón; 9 se convertirá en polvo fino sobre todo el territorio de Egipto, y formará erupciones pustulosas, en hombres y ganados, por toda la tierra de Egipto.» 10 Tomaron, pues, hollín de horno y presentándose ante Faraón, lo lanzó Moisés hacia el cielo, y hubo erupciones pustulosas en hombres y ganados. 11 Ni los magos pudieron permanecer dtelante de Moisés a causa de las erupciones; pues los magos tenían las mismas erupciones que todos los egipcios.
La 7ª plaga: El granizo.
Dice aquí que mandará todas las plagas a la vez (14). Los mosquitos y los tábanos se referían a la lucha de los ángeles y los arcángeles, pero aquí es Dios Padre el que se hace presente. Da un golpe en la mesa. El granizo haciendo referencia al agua endurecida puede hablarnos de eso. Que morirán todos los ganados y los hombres que no se metan en la casa; dice que los temerosos de Dios lo hicieron y los que no, murieron. Quizá se refiera a que era necesario el arrepentimiento de lo hecho para poder seguir adelante. Hemos visto que solo el arrepentimiento no bastaba para recuperar el Espíritu Santo, pues por justicia si lo recuperábamos los Adán o los Eva lo debían recuperar también los demonios, pues todos nos vaciamos del Espíritu por desamor o infidelidad. Aun así, el arrepentimiento, el temor de Dios era necesario para un día poder recuperar el Espíritu en los planes de Dios o simplemente los que no se arrepintieron llegado este momento terminaron como caídos, demonios. La casa puede hacer referencia a nuestra alma como se verá en la 10ª plaga. A reportarnos a nosotros mismos. No querer más de lo que somos.
Es interesante comprobar como en esta plaga (la única), hay egipcios que ponen al abrigo a sus siervos y ganados. ¿Quiénes son estos siervos y ganados? Vuelve a hablar de los Eva y quizá de los Adán, puesto que estos (más los Eva) han idolatrado a los caídos, siguiéndolos y dando la espalda a Dios. También puede hacer referencia a que fue la última oportunidad para los caídos de arrepentirse. Si estos eran activistas pro-rebelión, y tenían seguidores Eva-Adán (de los cuales estos dice en la Biblia, que idolatraban reptiles…), quizá se les dio un ultimátum para aplacarse. O quizá ninguno era todavía caído (demonio) hasta este punto; cuando tras este momento o ultimátum no se rindieron. Después en el versículo (31) dice: El lino y la cebada se estropearon, pues la cebada estaba en espiga y el lino estaba floreciendo. (32) El trigo y la espelta no se estropearon, por ser tardíos.
Esto, un poco oscuro, parece que se refiere también a los distintos tipos de ángeles. Creo que cebada se refiere a los demonios (la espiga es flor masculina y creo recordar que pincha), lino a los Eva (en flor) y trigo a los ángeles fieles. La espelta seguramente a los Adán, pues estos fueron tardíos en la rebelión, iban siguiendo (detrás) de los Eva, los ángeles fieles por supuesto no se unieron a la rebelión, quizá pueda calificarlos así por su tranquilidad (tardíos). En el tercer sello del apocalipsis utiliza términos parecidos, pero ahí creo que se refiere al Espíritu o falta de él, y a la libertad; más que a personas o tipos de ángeles, a características.
Otra anotación es que esta es la 7ª plaga, número este (7) que como ya se ha explicado simboliza la perfección.
Éxo 9:14 porque esta vez
voy a mandar todas mis plagas contra ti, tus servidores y tu pueblo,
para que sepas que no hay nadie como yo en toda la tierra.
Exo 9:18 Pues mira que
mañana, a esta hora, haré llover una granizada tan fuerte, como no
hubo otra en Egipto desde el día en que fue fundado hasta el presente. 19 Ahora, pues, manda poner a salvo tu ganado y cuanto tienes en del
campo; porque el granizo descargará sobre todos los hombres y animales
que se hallan en el campo, y cuantos no se hayan recogido bajo
techumbre perecerán.» 20 Aquéllos de los siervos de Faraón que temieron la palabra de Yahveh pusieron al abrigo a sus siervos
y su ganado; 21 mas los que no hicieron caso de la palabra de Yahveh, dejaron en el
campo a sus siervos y su ganado. caso de la palabra del Señor dejaron en el campo a sus esclavos y
ganados.
Éxo 9:22 El Señor dijo a
Moisés: «Extiende tu mano hacia el cielo, y caerá granizo en toda la
tierra de Egipto: sobre los hombres, los ganados y sobre toda la
hierba del campo en Egipto». 23 Moisés extendió su
bastón hacia el cielo y el Señor lanzó truenos, granizo y rayos a la
tierra. El Señor desencadenó una lluvia de granizo sobre la tierra de
Egipto. 24 El granizo, con
los rayos formados entre el granizo, fue tan fuerte que jamás se
había visto algo semejante en la tierra de Egipto desde que comenzó a
ser nación. 25 El granizo
golpeó en toda la tierra de Egipto cuanto había en el campo, desde los
hombres hasta los ganados. Machacó también el granizo toda la hierba
del campo y tronchó todos los árboles del campo. 26 Solo en la región de
Gosén, donde habitaban los hijos de Israel, no hubo granizo. 27 Entonces el faraón
mandó llamar a Moisés y a Aarón y les dijo: «Esta vez he obrado mal;
el Señor es justo, mientras yo y mi pueblo somos culpables. 28 Rogad al Señor que ya
basta de truenos y granizo. Yo os dejaré marchar y no os retendré
más». 29 Moisés le respondió:
«Cuando salga de la ciudad, extenderé mis manos hacia el Señor y
cesarán los truenos y no habrá más granizo, para que sepas que del
Señor es la tierra. 30 Aunque sé que tú y tus
servidores no teméis aún al Señor Dios». 31 (El lino y la cebada
se estropearon, pues la cebada estaba en espiga y el lino estaba
floreciendo. 32 El trigo y la
espelta no se estropearon, por ser tardíos). 33 Moisés salió de la presencia del faraón y de la ciudad, y extendió sus
manos hacia el Señor; cesaron los truenos y el granizo, y la lluvia
dejó de caer sobre la tierra. 34 Viendo el
faraón que habían cesado la lluvia, el granizo y los truenos, volvió a
obrar mal y se obstinó de nuevo, él y sus servidores. 35 Se obstinó,
pues, el faraón y no dejó marchar a los hijos de Israel, como había
dicho el Señor por medio de Moisés.
La 8ª plaga: Las langostas.
Es el momento en el que Dios nos tiene a todos firmes y pide explicaciones. Y, sobre todo, es el momento en el que satán y los suyos hacen el chantaje a Dios; claman a la justicia para recibir el mismo destino que los Adán-Eva. Razón por la que se desarrolla el mundo o nuestra historia de salvación como lo hace.
El Señor quiere salvar a los Adán especialmente (3 … Deja machar a mi pueblo para que me rinda culto, 9… iremos con nuestros niños, ancianos…)
Se refiera también, al momento real de la expulsión. Las langostas cubrirán la tierra, que hasta entonces era el jardín del Edén.
Es el castigo que cae sobre todos nosotros, los que quedamos después de la granizada, después de que Dios mismo pusiera orden en la batalla. Es tan grave lo ocurrido en el cielo que quizá hasta los propios ángeles fieles quedaron en entredicho, por ser Luzbel antes un ángel y haber concebido iniquidad. Pero finalmente estos permanecen: ’11 marchad si queréis solo los hombres’.
Desaparecen los árboles, y sus frutos, quizá la libertad y persona de los caídos (en toda la tierra de Egipto). Nuestra existencia vacíos de Dios, pasa a otro lugar.
Éxo 10:3 Moisés y Aarón
se presentaron al faraón y le dijeron: «Así dice el Señor, el Dios de
los hebreos: “¿Hasta cuándo te negarás a humillarte ante mí? Deja marchar a mi pueblo para que me rinda culto 4 Si te niegas a dejar salir a mi pueblo, mira que mañana traeré langostas sobre tu territorio; 5 y cubrirán la superficie del país, de suerte que ni podrá verse el
suelo. Devorarán lo que os quedó
de la granizada, y comerán todos los árboles que os crecen en el
campo. 6 Llenarán tus casas, las casas de todos los egipcios,
como nunca vieron tus padres, ni los padres de tus padres, desde el
día en que existieron sobre la tierra hasta el día de hoy.» Y
retirándose salió de la presencia de Faraón.
7 Los servidores del
faraón le dijeron: «¿Hasta cuándo va a ser ese una trampa para
nosotros? Deja marchar a esa gente para que rinda culto al Señor su
Dios. ¿Aún no te das cuenta de que Egipto se está arruinando?». 8 Hicieron, pues, volver a
Moisés y a Aarón ante el faraón, que les dijo: «Id a rendir culto al
Señor vuestro Dios; pero decidme ¿quiénes van a ir?». 9 Moisés respondió:
«Iremos con nuestros niños y nuestros ancianos, con nuestros hijos y
nuestras hijas, con nuestras ovejas y nuestras vacas, pues hemos de
celebrar la fiesta del Señor». 10 Él les contestó: «¡Así
esté el Señor con vosotros, como que yo os deje salir con vuestros
pequeños! ¡A la vista están vuestras malas intenciones! 11 No; marchad si queréis
solo los hombres y rendid culto al Señor, pues eso es lo que pedíais».
Y los echaron de la presencia del faraón. 12 El Señor dijo a Moisés:
«Extiende tu mano sobre la tierra de Egipto y que venga la langosta e
invada la tierra de Egipto y devore toda la hierba de la tierra y
cuanto quedó del granizo». 13 Moisés extendió su
bastón sobre la tierra de Egipto y el Señor hizo soplar el
viento del Este sobre la tierra todo el día y toda la noche. Al
amanecer, el viento del Este había traído la langosta.
Éxo 10:15 Cubrieron toda
la superficie del país hasta oscurecer la tierra; devoraron toda la
hierba del país y todos los frutos de los árboles que el granizo había
dejado; no quedó nada verde ni en los árboles ni en las hierbas del
campo en toda la tierra de Egipto.
La 9ª plaga: Las tinieblas.
Este es el momento en el que Dios se esconde a nosotros. Pasamos a tener una nueva “vida” en la nueva naturaleza hombre, en la que nacemos sin saber de dónde venimos ni a dónde vamos. También es representado esto como la torre de Babel y Noé, y aunque en la torre de Babel se hace hincapié en la distinción de religiones, el origen es el mismo: las tinieblas o escondimiento de Dios que nos permiten elegirle sin miedo a sus represalias, es decir, en libertad. Las tinieblas aquí en el mundo, tampoco nos permiten vernos entre nosotros. En el cielo éramos capaces de sentirnos mutuamente, pues el Espíritu Santo fluía por todos nosotros, aquí ya no hasta la pasión y entonces, aquel que se llene del Espíritu no lo hará en la intensidad celestial y tampoco sentirá al hermano de la misma forma que allí.
Éxo 10:21 Yahveh dijo a
Moisés: «Extiende tu mano hacia el cielo, y haya sobre la tierra
de Egipto tinieblas que puedan palparse.» 22 Extendió, pues, Moisés su mano hacia el cielo, y hubo por tres días
densas tinieblas en todo el país de Egipto. 23 No se veían unos a otros, y nadie se levantó de su sitio por espacio
de tres días, mientras que todos los israelitas tenían luz en sus
moradas. 24 El faraón llamó a
Moisés y dijo: «Id a ofrecer culto al Señor; también los niños pueden
ir con vosotros, pero dejad las ovejas y las vacas». 25 Respondió Moisés:
«Tienes que dejarnos llevar víctimas para los sacrificios y
holocaustos que hemos de ofrecer al Señor nuestro Dios. 26 También el ganado tiene
que venir con nosotros, sin quedar ni una res, pues de ello tenemos
que ofrecer al Señor, nuestro Dios, y no sabemos qué hemos de ofrecer
al Señor hasta que lleguemos allá».
Éxo 10:29 Respondió
Moisés: «Tú lo has dicho: no volveré a ver tu rostro.»
La 10ª plaga: La muerte de todos los primogénitos.
Así dice Yahvé: A media noche Yo pasaré por en medio de Egipto. Morirán en el país de Egipto todos los primogénitos.
A media noche parece referirse a la mitad de nuestro periodo de tinieblas, la vida de la humanidad en el mundo. Veamos por qué dice todos los primogénitos. Jesucristo es la primera persona creada por la que fluye la Esencia en la intensidad de Dios (única en esto último salvo Dios Padre y la propia Esencia o Espíritu Santo).
En la medida en la que todos participábamos de la Santísima Trinidad por ser personas creadas y mantener en una ínfima parte o intensidad la Esencia de Dios, para todos nosotros Jesucristo es el primogénito.
Si yo soy el más pequeño de una familia de cuatro hermanos, mi hermano mayor para mí es mi hermano primogénito. Siendo así, Jesucristo es el Primogénito de todas las siguientes personas creadas. Tanto de los que se convirtieron en demonios, como el ganado (Evas) como todos nosotros.
Si yo soy el más pequeño de una familia de cuatro hermanos, mi hermano mayor para mí es mi hermano primogénito. Siendo así, Jesucristo es el Primogénito de todas las siguientes personas creadas. Tanto de los que se convirtieron en demonios, como el ganado (Evas) como todos nosotros.
El resto ya lo he dicho varias veces: Es la muerte del primogénito, su sacrificio en la cruz y su infinito acto de amor el que hace capaz a la naturaleza hombre de volver a llenarse del Espíritu Santo, es decir: ESCAPAR DE LA ESCLAVITUD DEL FARAÓN. Recordemos: muere el cuerpo, la persona de Cristo como contenedora de Dios no deja de ser, y aunque se le aparta el Espíritu durante la Cruz, muere amando de manera absoluta, y por la permanencia de la persona en el amor absoluto (exclusivamente como hombre) vuelve el Espíritu Santo en la misma intensidad de Dios, en la nueva naturaleza forjada al crisol, (esto ocurre justo un segundo antes de morir el cuerpo quizá). ¿Y por qué debía ser Jesucristo? Porque Jesucristo, fue el primero creado. Aquel que complació a Dios. El que amó tanto a Dios como Dios a él y comparte la Esencia de Dios o está en la misma fuente. El que valida la naturaleza “creación” como capaz de recibir el Espíritu Santo. Gracias a él Dios creará nuevos seres independientes a Él capaces de recibir el Espíritu Santo en una medida u otra (ángeles). Y los creará a imagen y semejanza, también de la relación Dios-Jesucristo compartiendo Espíritu Santo. Nos creó ya en el cielo como Uno + Otro + Espíritu Santo en medio. Porque nuestra razón de ser y nuestra felicidad reside en amar y donarse. Y no solo a tu pareja sino a Dios y al prójimo; estos están representados por el Espíritu Santo, Esencia de Dios mismo compartida por todos en el cielo y por muchos como hombres tras la pasión. Jesucristo es el principio fundador que permitió ser a los ángeles, y después también a nosotros los traidores. Debe ser el mismo principio fundador mostrando el mismo amor el que haga digna la naturaleza hombre, sin que nadie pueda reclamar injusticia. Porque hacer una nueva naturaleza salvadora, arbitrariamente para un criminal y para otro no, podría ser tachado por injusto por el segundo.
Éxo
11:1 El Señor dijo a Moisés: «Todavía tengo que enviar una plaga al faraón
y a Egipto, tras lo cual os dejará marchar de aquí; más aún, os
expulsará definitivamente de aquí.
Éxo 11:4 Moisés dijo:
«Así dice Yahveh: hacia media noche pasaré yo a través de Egipto; 5 y morirá en el país de Egipto todo primogénito, desde el primogénito
de Faraón que se sienta en su trono hasta el primogénito de la esclava
encargada de moler, así como todo primer nacido del ganado. 6 Y se oirá un inmenso
clamor en la tierra de Egipto como nunca lo ha habido ni lo habrá. 7 Mientras que a
los hijos de Israel ni un perro les ladrará, ni a los hombres ni a las
bestias; para que sepan que el Señor distingue entre Egipto e Israel.
Hay algunos detalles a tener en cuenta en la descripción de las plagas. La primera y más importante es que Dios obceca al Faraón (refiriéndose al de la tierra, no a Satán) para manifestar su poder y para que se proclame su nombre por toda la tierra. Efectivamente, Dios no tiene tiempo. Aunque respete nuestras decisiones, Él puede ir a su antojo, del principio al final de la historia de la humanidad y actuar en ella para nuestra salvación, en el conocimiento de lo que ocurrirá, pero respetando nuestra libertad.
Así, aquí, Él dibuja nuestra historia de salvación con lo que pasó antes de todos los tiempos y con lo que habría de pasar en la cruz de Cristo. Por eso obceca al faraón, para hoy mostrarnos lo que ocurrió en el cielo. Así, Él hizo coincidir el día del sacrificio de los corderos o cabritos sin mancha del día de la Pascua Judía, con el día del sacrificio de Jesucristo, el día de nuestra Pascua; porque vienen a representar lo mismo, nuestra liberación de la esclavitud faraón, del demonio.
Así, Él hizo untar las dos jambas y el dintel de sus casas con la sangre de los corderos para que la muerte no entrara en ellas. Porque esto será signo de que con la sangre de Cristo (el cordero sin mancha) se cierra esa espita o puerta que, rota, abierta y ulcerada, impedía que pudiéramos retener el Espíritu Santo; impedía que entrase la vida en nosotros y nos mantenía en la muerte. Equiparando así, a aquellas casas con nuestra propia alma.
Hay otros detalles, como que en algunas plagas especifica que no tocarán a su pueblo, al pueblo de Israel. Entiendo que, en lo referente al cielo, se refiere a los ángeles fieles, otras veces, entre nosotros, a los adanes.
De todas formas, no he podido profundizar mucho en estas lecturas porque urge que termine ya el libro. Los que conozcan un poco la Biblia podrán llegar a conclusiones más precisas que las mías, pero aun así creo que todo va encaminado tal y como lo describo aquí, y, además, como el resto de lo escrito, cuadra milimétricamente con la Biblia y la palabra de Dios desde antes del origen de los tiempos. Tampoco he podido comparar traducciones; como anotación os diré que en la Biblia de Jerusalén dice que los primeros versículos de la 1ª plaga, según lo aquí descrito, provienen de la tradición yahvista, lo que realmente no sé qué quiere decir. Por eso sé que los entendidos podrán sacar mucho más fruto desde la perspectiva que aquí describo, del que yo he sacado; al final eso es lo que importa. Y cuando se den cuenta de lo evidente, no quedará otra que unirnos en el amor de Dios, pues realmente todo queda desvelado por Su voluntad. Aquello que Él quiso ocultar, hoy lo revela. ¡Qué significativo es esto! En sí mismo es una señal que nos habla de la proximidad de su nueva venida.
Las plagas tienen un orden lógico según lo ocurrido en el cielo también; quizá algunas que hablan de cómo quedó nuestro ser pudieron pasar casi al mismo tiempo que otras (por ejemplo, la 1ª y 2ª); ¿todo esto sugiere que en el cielo hubo algún tipo de tiempo? En los Escalones que se verán, casi todo lo descrito es consecuencia o son ‘gracias’ ganadas en la pasión, por lo que serían casi inmediatas. No obstante, parece claro que se colocan en riguroso orden en el Éxodo para coincidir con las plagas. Incluso el 6º escalón (agua de la piedra, en referencia a la cura de los Eva) que aún no se ha producido, está alineado con la 5ª plaga (la sordera de los Eva o necios).
La escalera de Jacob (subida)
El 1er Escalón. y 10ª plaga. El sacrificio de los primogénitos.
Según decíamos Cristo es el primer creado y único por el que fluye la Esencia de Dios en la intensidad de Dios. Pero Él se hace hombre (pecado, ciudadano de Egipto), para librarnos de la justicia que nos reclamaba Satán, hacernos aptos y salvarnos.
La pasión es el momento real a partir del cual podremos recibir el Espíritu Santo, volver a ver a Dios, quien tenga su Espíritu. Los siguientes escalones son consecuencia de este, que hará que el sentido hacia abajo rebote hacia arriba.
Cabe destacar (35) que piden plata oro y ropa; todos representativos del Espíritu Santo. Quizá la plata (tesoro también) algo inferior, pudiera hacer distinción entre los Adán y los Eva. Este escalón podemos verlo desde el cielo y en la tierra tras la pasión. En el cielo cuando Cristo ya se ofrece para nuestra salvación. En ese momento los planes de Dios ya están trazados; “Pedir el Espíritu” puede ser parte de esto, el vaciado de los Adán, Eva, Demonios, pero si tenemos en cuenta que los objetos de oro, plata… se piden a los egipcios (demonios) puede que simbolice nuestra futura lucha en la tierra contra ellos y sus tentaciones que dará como fruto ganar Espíritu que ya podemos albergar (a esto la biblia lo llama comerciar). Desde la tierra y tras la pasión los egipcios quedan despojados de su escudo (el chantaje).
Tras muchos años secuestrados (42), el Señor, despierto (en vela) en la noche (nuestro mundo) nos saca de Egipto.
Abrir el mar que simboliza la muerte (14:21), y luego cerrarlo sobre el faraón, es romper las cadenas de nuestra esclavitud entonces (Israel) y después (toda la humanidad). Al validar la naturaleza hombre en la pasión, se rompe el chantaje de Justicia al que estábamos sometidos por el demonio (faraón): ‘si me condenas a mí, a ellos también, pues también traicionaron’. Dios hizo coincidir la Pascua Hebrea con la de Jesús para hacérnoslo ver desde el futuro.
Éxo 12:34-36 El pueblo recogió la masa sin fermentar y, envolviendo las
artesas en mantas, se las cargaron al hombro. 35 Además, los hijos de Israel
hicieron lo que Moisés les había mandado: pidieron a los egipcios
utensilios de plata y de oro, y ropa. 36 El Señor hizo que el pueblo
se ganara el favor de los egipcios, que les dieron lo que pedían. Así
despojaron a Egipto.
Éxo 12:41 Cumplidos los cuatrocientos treinta años, el mismo día, salieron
de Egipto las legiones del Señor. 42 Fue la noche en que veló el
Señor para sacarlos de la tierra de Egipto. Será la noche de vela, en
honor del Señor, para los hijos de Israel por todas las generaciones.
14:21 Moisés extendió su mano sobre el mar, y Yahveh hizo soplar durante toda la noche un fuerte viento del Este que secó el mar, y se dividieron las aguas. 22 Los israelitas entraron en medio del mar a pie enjuto, mientras que las aguas formaban muralla a derecha e izquierda. 23 Los egipcios se lanzaron en su persecución, entrando tras ellos, en medio del mar, todos los caballos de Faraón, y los carros con sus guerreros. 26 Yahveh dijo a Moisés: Extiende tu mano sobre el mar, y las aguas volverán sobre los egipcios, sobre sus carros y sobre los guerreros de los carros.» 27 Extendió Moisés su mano sobre el mar, y al rayar el alba volvió el mar a su lecho... Así precipitó Yahveh a los egipcios en medio del mar, 28 pues al retroceder las aguas cubrieron los carros y a su gente, a todo el ejército de Faraón, que había entrado en el mar para perseguirlos; no escapó ni uno siquiera.
El 2º Escalón. La Columna de Fuego, la columna de nubes protectora.
Este escalón es que anula o contrarresta a la novena plaga en la que Dios se hizo desaparecer de nosotros. Ahora el Espíritu Santo en nuestro interior (Dios mismo) nos guía entre la penumbra del mundo; esto simbolizado como la columna de fuego, pero, además, el que Lo posee vive los sufrimientos con esperanza y de manera más ‘suavizada’; esta es la columna de nubes. El que tiene el Espíritu Santo en su interior ya tiene el reino de los cielos en él; de alguna forma ya ve a Dios.
Éxo 13:21 El Señor caminaba delante de los israelitas: de día, en una
columna de nubes, para guiarlos por el camino; y de noche, en una
columna de fuego, para alumbrarlos; para que pudieran caminar día y
noche.
3er Escalón.
Paso del Mar Rojo.
Este escalón elimina a la octava plaga en la que Satán clamó a la justicia para recibir el mismo destino de nosotros por haber quedados vacíos como nosotros. Esto es lo que ‘ataba’ a Dios, pues no podía salvarnos sin salvarlos a ellos, y dado que eran odio no puede mezclarse con ellos (no pueden recibir el Espíritu Santo). Abrir (21) el mar Rojo habla de abrirnos un camino entre la muerte. Ya podemos pasar a través de ella, y cerrar el mar Rojo detrás nuestra, sobre los egipcios, quiere decir que se corta el vínculo de justicia que teníamos con ellos. Nuestro destino se desvincula del suyo, que era y es la muerte (simbolizado en su ahogamiento por el mar).
El primer versículo (14:20), puede referirse a la separación de los demonios a los que no se les da cuerpo o quizá hace referencia a cómo Dios evitó que los justos que vivieron antes de Cristo (pasión), al morir fueran torturados por los demonios en el infierno. Él los mantuvo separados hasta que los ‘recogió’ Jesucristo cuando bajó a los infiernos.
Éxo 14:20 poniéndose entre el campamento de los egipcios y el campamento de
Israel. La nube era tenebrosa y transcurrió toda la noche sin que los
ejércitos pudieran aproximarse el uno al otro. 21 Moisés
extendió su mano sobre el mar y el Señor hizo retirarse el mar con un
fuerte viento del Este que sopló toda la noche; el mar se secó y se
dividieron las aguas. 22
Los hijos de Israel entraron en medio del mar, en lo seco, y las aguas
les hacían de muralla a derecha e izquierda. 23 Los
egipcios los persiguieron y entraron tras ellos, en medio del mar:
todos los caballos del faraón, sus carros y sus jinetes. 24
Era ya la vigilia matutina cuando el Señor miró desde la columna de
fuego y humo hacia el ejército de los egipcios y sembró el pánico en
el ejército egipcio. 25 Trabó las ruedas de sus carros, haciéndolos avanzar
pesadamente. Los egipcios dijeron: «Huyamos ante Israel, porque el
Señor lucha por él contra Egipto». 26 Luego dijo el Señor a Moisés: «Extiende tu mano sobre el
mar, y vuelvan las aguas sobre los egipcios, sus carros y sus
jinetes». 27
Moisés extendió su mano sobre el mar; y al despuntar el día el mar
recobró su estado natural, de modo que los egipcios, en su huida,
toparon con las aguas. Así precipitó el Señor a los egipcios en medio
del mar. 28
Las aguas volvieron y cubrieron los carros, los jinetes y todo el
ejército del faraón, que había entrado en el mar. Ni uno solo se
salvó. 29 Mas los hijos de Israel pasaron en seco por medio del mar,
mientras las aguas hacían de muralla a derecha e izquierda. 30
Aquel día salvó el Señor a Israel del poder de Egipto, e Israel vio a
los egipcios muertos, en la orilla del mar.
Éxo 15:12 Extendiste tu diestra: se los tragó la tierra; 13 guiaste con misericordia a tu pueblo rescatado, los llevaste con tu
poder hasta tu santa morada. 14 Lo oyeron los pueblos y temblaron, el terror se apoderó de los
habitantes de Filistea. 15
Se turbaron los príncipes de Edón, los jefes de Moab se estremecieron,
flaquearon todos los habitantes de Canaán. 16 Espanto y pavor los asaltaron, la grandeza de tu brazo los dejó
petrificados, mientras pasaba tu pueblo, Señor, mientras pasaba el
pueblo que adquiriste. 17 Lo introduces y lo plantas en el monte de tu heredad, lugar del
que hiciste tu trono, Señor; santuario, Señor, que fundaron tus manos. 18 El Señor reina por siempre jamás».
Extendiste tu diestra, se los tragó la tierra (15:12)
Jesucristo está sentado a la derecha del Padre. La diestra del Señor
es el mismo Jesucristo, al decir extendiste hace referencia a la vida
de Jesús en la Tierra, en concreto al momento de la pasión de nuevo.
El momento en el que nos rescata Dios de nuestros secuestradores y nos
guía hasta su Santa morada, que en la tierra viene a ser que: lleva su
Espíritu Santo, el Reino de los Cielos a nosotros.
Sigue hablando del terror que sintieron los demonios, pues les dejó
sin escudo.
‘Mientras pasaba tu pueblo’, habla de la historia de la humanidad, pues no fue al principio sino en la época de los romanos.
El 4º Escalón. Se endulza el agua.
Este escalón, contrarresta la 7ª plaga, el del granizo. Simboliza el Amor de Dios; si el granizo simbolizaba que Él mismo se levantó ‘enfadado’ para poner orden en sus ‘filas’ o mejor dicho nos muestra la incompatibilidad del Espíritu Santo con aquello en lo que nos convertimos; esta nos muestra a Dios tal y cómo es: Amor, pues no es que Dios cambiara, sino que cambiamos nosotros, pero ahora no rehúye de nosotros, pues antes lo hacía. Ahora ya viene a nuestro alrededor y pronto lo podremos beber otra vez o contener en nuestro nuevo envase, el hombre (esto se simboliza en la siguiente). Otra vez hace referencia a la cruz, el madero que hace posible esto, que lo cambia todo. Además, hace referencia también a unas normas o leyes, adelantando los mandamientos, que también son un escalón posterior.
Éxo 15:22 Moisés hizo partir del mar Rojo a Israel, que se dirigió hacia el desierto de Sur. Caminaron tres días por el desierto sin encontrar agua. 23 Llegaron a Mará, pero no pudieron beber el agua de Mará, porque era amarga. Por eso se llamó aquel lugar Mará. 24 El pueblo murmuró contra Moisés, diciendo: «¿Qué vamos a beber?». 25 Moisés clamó al Señor y el Señor le mostró un madero. Él lo echó al agua y el agua se volvió dulce. Allí el Señor dio leyes y mandatos al pueblo y lo puso a prueba, 26 diciéndoles: «Si obedeces fielmente la voz del Señor tu Dios y obras lo recto a sus ojos, escuchando sus mandatos y acatando todas sus leyes, no te afligiré con ninguna de las plagas con que afligí a los egipcios; porque yo soy el Señor, el que te cura». 27 Después llegaron a Elín, donde hay doce fuentes y setenta palmeras, y acamparon allí junto al agua.
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El 5º Escalón. Codornices y Maná
Este escalón, contrarresta la 6ª plaga, la de las úlceras. Si recordamos, las úlceras hacen que no podamos recibir el Espíritu Santo. El desamor ha ‘roto’ nuestra alma y nos hemos vaciado. En este escalón volvemos a ser capaces de elevarnos del mundo, de separarnos. Esto está simbolizado con las codornices; ya he comentado que, en varias partes de la Biblia, las aves simbolizan a los Adanes, que tienen oídos para Dios. Como anotación, en Num 11,31 especifica que las codornices vienen desde el mar (símbolo de la muerte). Pero aun con oídos necesitábamos ser capaces del Espíritu. Así, se nos da esa carne simbolizando que nuestras úlceras están curadas, pero, además, en este mismo escalón se nos da aquello que perdimos cuando nos ulceramos: el Espíritu Santo, simbolizado como ese maná caído del cielo. Lo uno aparece por la tarde (pasión) y lo otro al día siguiente, el Espíritu Santo.
En el (16:18) creo que se hace referencia a que cada uno tiene necesidades específicas del Espíritu o tamaños diferentes, pero que cuando lleguemos al cielo, todos seremos plenos en nuestro tamaño; quizá el que haya cogido menos, por medio del purgatorio se complete… no sé, esto es especular más que nada.
Este Espíritu Santo ya está disponible desde el escalón primero (la pasión) hasta el fin del mundo o la llegada a la tierra prometida (35) para los que lo consigan.
Éxo 16:11 El Señor dijo a Moisés: 12
«He oído las murmuraciones de los hijos de Israel. Diles: “Al
atardecer comeréis carne, por la mañana os hartaréis de pan; para que
sepáis que yo soy el Señor Dios vuestro”». 13 Por la tarde una bandada de codornices cubrió todo el campamento;
y por la mañana había una capa de rocío alrededor del campamento. 14 Cuando se evaporó la capa de rocío, apareció en la superficie del
desierto un polvo fino, como escamas, parecido a la escarcha sobre la
tierra. 15 Al
verlo, los hijos de Israel se dijeron: «¿Qué es esto?». Pues no sabían
lo que era. Moisés les dijo: «Es el pan que el Señor os da de
comer. 16 Esto manda el Señor: “Que cada uno recoja lo que
necesite para comer: una ración por cabeza; cada uno recogerá
según el número de personas que vivan en su tienda”». 17 Así lo hicieron los hijos de Israel: unos recogieron más y otros
menos. 18 Y, al pesar la ración, no sobraba al que
había recogido más, ni faltaba al que había recogido menos: cada uno
había recogido lo que necesitaba para comer.
Éxo 16:35
Los hijos de Israel comieron maná durante cuarenta años hasta que
llegaron a tierra habitada; comieron maná hasta atravesar la frontera
de la tierra de Canaán.
Núm 11:31 El Señor hizo que se
alzara un viento que trajo bandadas de codornices de la parte del mar,
y las hizo caer sobre el campamento…
El 6º Escalón. Moisés hace salir agua de una piedra.
Este escalón, contrarresta la 5ª plaga, la muerte del ganado. Tal y como decía, este ganado representa a los Eva que son sordos. Hacer brotar agua de la piedra representa eso mismo. Este escalón no se ha dado todavía, pues los llamados necios en la Biblia lo siguen siendo. No obstante, ha sido profetizado en varias ocasiones. Por ejemplo:
Hechos de los apóstoles 2:17 Y sucederá en los últimos días, dice Dios, que derramaré mi Espíritu sobre toda carne y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán y vuestros jóvenes verán visiones y vuestros ancianos soñarán sueños;
‘Toda la gente se marchó del desierto de Sin por etapas’ (1), puede referirse al paso de la humanidad por el mundo, de generación en generación. Finalmente se da el milagro de la piedra, al final de los tiempos.Bien, esto no se puede demostrar hasta que suceda, pero creo que falta poco.
Éxo 17:1 Toda la comunidad de los hijos de Israel se marchó del desierto de Sin, por etapas, según la orden del Señor, y acampó en Refidín, donde el pueblo no encontró agua que beber. 2 El pueblo se querelló contra Moisés y dijo: «Danos agua que beber». Él les respondió: «¿Por qué os querelláis contra mí?, ¿por qué tentáis al Señor?». 3 Pero el pueblo, sediento, murmuró contra Moisés, diciendo: «¿Por qué nos has sacado de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?». 4 Clamó Moisés al Señor y dijo: «¿Qué puedo hacer con este pueblo? Por poco me apedrean». 5 Respondió el Señor a Moisés: «Pasa al frente del pueblo y toma contigo algunos de los ancianos de Israel; empuña el bastón con el que golpeaste el Nilo y marcha. 6 Yo estaré allí ante ti, junto a la roca de Horeb. Golpea la roca, y saldrá agua para que beba el pueblo». Moisés lo hizo así a la vista de los ancianos de Israel. 7 Y llamó a aquel lugar Masá y Meribá, a causa de la querella de los hijos de Israel y porque habían tentado al Señor, diciendo: «¿Está el Señor entre nosotros o no?».
El 7º y 8º Escalón. Batalla contra Amalec y Consejo de Jetro.
Estos contrarrestan las plagas 4º y 3º, en las que los mosquitos y las moscas o tábanos atacan al pueblo de Egipto. Curiosamente, aunque hacía distinción de las dos plagas, no daba la oportunidad al faraón de arrepentirse entre una y otra, como en las demás plagas. Según esto, como decía, se hace distinción entre el ataque de ángeles y arcángeles, pero es una única batalla. Especificando una jerarquía de ‘lucha’.
Aquí también nos habla de una batalla y de una jerarquía y también es lucha de familia (descendencia de Esaú y Jacob)
Pero Amalec representa a los demonios en la tierra (16) y esta vez nosotros luchamos contra ellos, pero ayudados por Dios (Padre e Hijo -brazos en cruz). Lo contrario que pasaba en las plagas paralelas.
El consejo de Jetro, justo después (18:1), invita a Moisés a delegar en hombres justos, de manera que se establece una jerarquía para el desarrollo de la vida en el campamento. Esto, además de hablarnos de que aquí mantenemos nuestros tamaños de ‘alma’, nos dice que seremos tentados por demonios equiparables; Dios no nos carga con lo que no podemos. Como en las plagas estos dos escalones se podían haber hecho uno solo. Y los de uno y otro lado nos hablan de jerarquización en el cielo y en nuestras almas.
Éxo 17:8
Amalec vino y atacó a Israel en Refidín. 9
Moisés dijo a Josué: «Escoge unos cuantos hombres, haz una salida y
ataca a Amalec. Mañana yo Aarón y Jur subían a la cima del monte. 11
Mientras Moisés tenía en alto las manos, vencía Israel; mientras las
tenía bajadas, vencía Amalec. 12
Y, como le pesaban los brazos, sus compañeros tomaron una piedra y se
la pusieron debajo, para que se sentase; mientras, Aarón y Jur le
sostenían los brazos, uno a cada lado. Así resistieron en alto sus
brazos hasta la puesta del sol. 13 Josué derrotó a Amalec y a su pueblo, a filo de espada. 14
El Señor dijo a Moisés: «Escribe esto en un libro para recuerdo y
trasmítele a Josué que yo borraré la memoria de Amalec bajo el
cielo». 15 Moisés levantó un altar y lo llamó «Señor, mi estandarte», 16
diciendo: «Porque su mano se ha levantado contra el estandarte del
Señor, el Señor está en guerra con Amalec de generación en
generación». Estaré en pie en la cima del monte, con el bastón de
Dios en la mano». 10 Hizo Josué lo que le decía Moisés, y atacó a Amalec;
entretanto, Moisés, …
Éxo 18:20 Incúlcales los mandatos y las instrucciones, enséñales el camino que
deben seguir y las acciones que deben realizar. 21 Después busca entre todo el pueblo algunos hombres valientes,
temerosos de Dios, sinceros y enemigos del soborno, y establece de
entre ellos jefes de mil, de cien, de cincuenta y de veinte. 22 Ellos administrarán justicia al pueblo regularmente: los asuntos
graves, que te los pasen a ti; los asuntos sencillos, que los
resuelvan ellos. Así aligerarás tu carga, pues ellos la compartirán
contigo. 23 Si haces lo que te digo, cumplirás lo que Dios te manda y podrás
resistir, y el pueblo se volverá a casa en paz».
El 9º Escalón. Israel en el monte Sinaí.
Este escalón, contrarresta, solo en parte, la 2ª plaga, en la que salimos del agua como ranas ya no como peces, y nos alejamos de Dios. Ahora es Dios el que se acerca a nosotros: sobre el monte Sinaí, dice que ‘os he llevado sobre alas de águila (Espíritu Santo) y os he traído hasta mí’.
Pero aun así no podemos llegar hasta Él como antes. No podemos subir al monte Sinaí. Ahora tendremos la naturaleza hombre para siempre, y aunque lleguemos al cielo en una infinita felicidad, no seremos lo que fuimos una vez: ángeles. Si el paso del agua (Dios), peces, a estar vacíos, se simbolizaba con la rana y sus saltos, ahora Dios se presenta en la cima del Sinaí al que no nos podemos ni acercar. Pese a haber llegado el Espíritu Santo hasta nosotros, no alcanzaremos la naturaleza celestial perdida. Tal y como la rana nos hablaba de la imposibilidad de habitar con el Espíritu, pues voluntariamente salen a morir fuera del río, este paso nos habla de la recuperación de esa posibilidad de cohabitación, pero a la vez nos informa, como la hacía la segunda plaga, de nuestro cambio de naturaleza. Este escalón está muy relacionado con el siguiente.
Éxo 19:3 Moisés subió hacia Dios. El Señor lo llamó desde la montaña diciendo: «Así
dirás a la casa de Jacob y esto anunciarás a los hijos de Israel: 4 “Vosotros habéis visto lo que he hecho con los egipcios y cómo os he
llevado sobre alas de águila y os he traído a mí. 5 Ahora, pues, si de veras me obedecéis y guardáis mi alianza,
seréis mi propiedad personal entre todos los pueblos, porque mía es toda la tierra. 6 Seréis para mí un reino de sacerdotes y una nación santa”. Estas
son las palabras que has de decir a los hijos de Israel».
Éxo 19:10 El Señor dijo a Moisés: «Vuelve a tu pueblo y purifícalos hoy y
mañana; que se laven la ropa 11 y estén preparados para el tercer día; pues el tercer día descenderá el Señor
sobre la montaña del Sinaí a la vista del pueblo. 12 Traza al pueblo un límite alrededor y dile: «Guardaos de subir a
la montaña o de tocar su borde; el que toque la montaña, morirá..
El 10º Escalón. Los 10 Mandamientos
Este escalón invierte la primera plaga. El agua, signo del Espíritu Santo se convierte en Sangre. Nos desconectamos de Dios; esta es la primera plaga, aunque luego habla de las consecuencias (rana, mosquitos…). Por esto se inicia todo. Dejamos de estar en Dios y compartir su Espíritu para pasar a ser sangre (ahí símbolo de muerte). Los mandamientos son una ‘estructura’ que nos rehace y reconecta. Como los palos y cintas que a modo de andamios unen un injerto en una planta, los mandamientos nos unen de nuevo a Dios y ¿por qué? Porque la mayor parte de ellos están fundamentados en el Amor y otros en fidelidad. Si los escalones eran necesarios para llegar, los mandamientos son el enganche que nos agarra al cielo
Pero se entregan dos veces los 10 mandamientos. ¿Qué quiere decir esto? La primera vez hace referencia a nuestra primera naturaleza que perdimos: la celestial. Por eso nos habla de la traición a Dios en la Idolatría al carnero (32:1). De nuevo el Espíritu Santo es representado o simbolizado por el oro, que es ‘extraído’ más de las mujeres que de los hombres: (mujeres, hijos e hijas). Esto hace referencia a los Eva que codician la manzana, la Esencia de Dios o hacerse dioses de sí mismos. En los ‘hijos’, veo a los Adanes, pues representan inocencia que se deja llevar por los Eva (por las madres aquí). Fijémonos en que la primera vez que entrega estos 10 mandamientos, (naturaleza celestial) salen de Dios Padre (31:18); no sólo lo escrito, también las propias tablas, pero no en la segunda, pues es Cristo el que redime nuestra nueva naturaleza.
Éxo 20:1 El Señor pronunció
estas palabras: 2 «Yo soy el Señor, tu Dios,
que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de esclavitud. 3 No tendrás otros dioses
frente a mí. 4 No te fabricarás ídolos, ni
figura alguna de lo que hay arriba en el cielo, abajo en la tierra, o
en el agua debajo de la tierra. 5 No te postrarás ante
ellos, ni les darás culto; porque yo, el Señor, tu Dios, soy un Dios
celoso, que castigo el pecado de los padres en los hijos, hasta la
tercera y la cuarta generación de los que me odian. 6 Pero tengo
misericordia por mil generaciones de los que me aman y guardan mis
preceptos. 7 No pronunciarás el nombre
del Señor, tu Dios, en falso. Porque no dejará el Señor impune a quien
pronuncie su nombre en falso. 8 Recuerda el día del
sábado para santificarlo. …
Éxo 31:18 Cuando acabó de
hablar con Moisés en la montaña del Sinaí, le dio las dos tablas
del Testimonio, tablas de piedra escritas por el dedo de Dios.
Éxo 32:1 Viendo el pueblo que
Moisés tardaba en bajar de la montaña, se reunió en torno a Aarón y le
dijo: «Anda, haznos un dios que vaya delante de nosotros, pues a ese
Moisés que nos sacó de Egipto no sabemos qué le ha pasado». 2 Aarón les
contestó: «Quitadles los pendientes de oro a vuestras mujeres,
hijos e hijas, y traédmelos». 3 Todo el pueblo se quitó los pendientes de oro y se los trajeron a
Aarón. 4 Él los recibió, trabajó el oro a cincel y fabricó un becerro de
fundición. Entonces ellos exclamaron: «Este es tu dios, Israel, el que
te sacó de Egipto».
Así la tabla en sí misma es hecha por Moisés (prefiguración de Cristo), aunque no lo escrito en su interior (34:1). Tras la rotura de las primeras tablas, él (Moisés) personalmente las hace como copia de las primeras para que Dios (Él, dice al principio -34:1-), vuelva a cincelar los mandamientos ¿Qué nos dice esto? Que cristo valida nuestra naturaleza hombre (simbolizada aquí como las tablas sin inscripción), para que podamos albergar en nuestro interior el Espíritu Santo (= lo escrito en nuestro interior por el dedo de Dios). Pero, aunque en 34: 1 dice que Él (Dios) escribirá en ellas las palabras, en 34:27 se lo dice a Moisés ¿Por qué? Porque Moisés es prefiguración de Cristo y Él está en Dios Padre y viceversa, y porque está hablando ahora de la validación de la naturaleza hombre, hecha por Jesucristo. Si Dios Padre creó la persona de Cristo y este complació, es Cristo en quien, y por quien, se reinserta o recrea lo muerto, lo perdido (nosotros); en la pasión. Veamos, en los versículos (6,7) dice: El Señor pasó delante de él proclamando ‘Señor, Señor, Dios…’ Pero no es la persona de Dios (padre) hablando de Sí mismo, sino Cristo intercediendo por nosotros en el cielo tras la traición; todavía no tiene naturaleza humana (no se ha dado la pasión, aunque sí la prefiguración de esta en la salida de Egipto). Nos escenifica también lo que ocurrió antes de la creación del mundo, como una visión que viene del cielo (5), pues ya en el cielo, después de la traición, Jesús se ofrece para salvarnos; siendo así, no se está proclamando Dios Padre para Sí mismo sino Dios Hijo al Padre. En el Versículo siguiente el (8), dice: Moisés se inclinó y postró en tierra, esto hace referencia al momento en que Cristo se hace hombre (tierra). En el siguiente (9) dice ‘Si he obtenido tu favor, que mi Señor vaya con nosotros’ haciendo referencia al momento en el que valida la naturaleza hombre para recibir al Espíritu Santo (el momento de la pasión), ya Él puede venir o entrar en nosotros. La respuesta a esto está en el (11), la alianza por la que con su ayuda recuperaremos la tierra prometida (el cielo), expulsando a los amorreos, cananeos...
En 34,27 además Dios habla de la alianza que toma con ‘Moisés’ (prefiguración de Cristo) y con Israel. Efectivamente, nuestra nueva alianza está hecha en Cristo; gracias a Él podemos volver a enlazar con Dios, no en vano, nombra antes a ‘Moisés’ (prefiguración de Cristo) que a Israel, haciéndolo pieza clave o angular, de lo contrario ¿por qué no nombrar solo al pueblo? ¿Es que Moisés no era parte del pueblo?
Éxo 34:1 El Señor dijo a
Moisés: «Labra dos tablas de piedra como las primeras y yo
escribiré en ellas las palabras que había en las primeras tablas que
tú rompiste. 2 Prepárate para mañana, sube
al amanecer a la montaña del Sinaí y espérame allí en la cima de la
montaña. 3 Que nadie suba contigo, ni
aparezca nadie en toda la montaña; ni siquiera las ovejas o las vacas
pastarán en la ladera de la montaña». 4 Moisés labró dos tablas de
piedra como las primeras, madrugó y subió a la montaña del Sinaí, como
le había mandado el Señor, llevando en la mano las dos tablas de
piedra. 5 El Señor bajó en la nube y se quedó con él allí, y Moisés pronunció el nombre del Señor. 6 El Señor pasó ante
él proclamando: «Señor, Señor, Dios compasivo y misericordioso, lento
a la ira y rico en clemencia y lealtad, 7 que
mantiene la clemencia hasta la milésima generación, que perdona la
culpa, el delito y el pecado, pero no los deja impunes y castiga la
culpa de los padres en los hijos y nietos, hasta la tercera y cuarta
generación».
Éxo 34:8 Moisés al
momento se inclinó y se postró en tierra.
Éxo 34:9 Y le dijo:
«Si he obtenido tu favor, que mi Señor vaya con nosotros, aunque es un
pueblo de dura cerviz; perdona nuestras culpas y pecados y tómanos
como heredad tuya». 11 El Señor dijo a Moisés: «Yo voy a
concertar una alianza: en presencia de tu pueblo haré maravillas como
no se han hecho en ningún país ni nación, para que el pueblo con el
que vives vea las obras terribles que voy a hacer por medio de ti. 11 Cumple lo que yo te mando hoy; expulsaré delante de ti a
amorreos, cananeos, hititas, perizitas, heveos y jebuseos.
Éxo 34:27 El Señor dijo a Moisés: «Escribe
estas palabras: de acuerdo con estas palabras concierto alianza
contigo y con Israel». 28 Moisés estuvo allí con el Señor cuarenta días con sus cuarenta noches,
sin comer pan ni beber agua; y escribió en las tablas las palabras
de la alianza, las Diez Palabras
El final La Llegada al Cielo.
Ya está dicho. Hemos sido salvados de nuestra incapacidad de recibir a Dios. Desde la pasión podemos volver al cielo, algo a lo que el Espíritu Santo nos ayuda.
Muchas de las normas de convivencia, más allá de los 10 mandamientos (inspirados muchos en el Amor), que Dios proporcionó al pueblo de Israel, eran para sujetar artificialmente lo que de manera natural se sujeta con el Amor. Bien es cierto, que otras precisamente fueron dadas para que sin amor pudieran convivir. Para mantener una gran bolsa de plástico abierta boca abajo, sujetándola con manos, de manera que esta quede abierta en todo su volumen, harían falta muchas manos y aun así no quedaría hinchada del todo; sin embargo, con un secador o una manguera de aire insuflando desde abajo, se llenaría por completo y aun nos empujaría hacia arriba. Este es el Espíritu Santo del que nos desconectamos, que desde la pasión puede volver a nosotros.
Bien, ya Salomón, sabio entre sabios, encontró esta relación antagónica entre algunas de las plagas y algunos de los hechos ocurridos en el Éxodo (lo vemos en el libro de la Sabiduría), pero el Señor le ocultó el sentido de esto. No podía imaginar que las plagas describían nuestro descenso hasta aquí desde el mismísimo cielo y que esos acontecimientos iniciados en la pascua de Cristo describían la escalera que nos guiaba de nuevo hasta allí.
Todo lo dicho queda meridianamente claro para el que lea esto con atención. Si yo fuera judío estaría orgulloso por haber sido elegido mi pueblo para introducir al salvador de la humanidad; por haber sido elegido para dibujar la historia de la Salvación y poderse hacer presente ésta a nosotros que moramos aquí abajo. Si yo fuera judío sería el más ferviente de los cristianos, pues esto que será claro para otras naciones, para el pueblo judío debería ser cristalino.
En el sueño de Jacob, Gén 28:10, a Isaac se le mostró una escalera por la que bajaban y subían los ángeles. Tal y como he descrito, los acontecimientos del Éxodo a partir de la Pascua tienen un significado enlazado con las plagas correspondientes. De esta manera las plagas en la exégesis se revelan como hechos que nos ocurrieron desde que morábamos en el cielo hasta llegar a la tierra. En realidad, hasta la pascua de Cristo, primer acontecimiento o escalón de subida sin el que no se podrían haber hecho los siguientes. Estos escalones, además, están en estricto orden y corresponden a cada una de sus respectivas plagas.
Así, como decía, la escalera queda constituida de bajada como las plagas y de subida como los siguientes acontecimientos del Éxodo. Pensar que a Isaac se le mostró de manera figurada esta escalera, no solo coincide con el mensaje de su sueño, sino que confirma lo que creo haber ya demostrado o demostraré en este ensayo. Efectivamente fuimos ángeles y a la tierra bajamos en otra naturaleza para nuestra salvación. Gracias a Dios podemos volver al cielo y la manera de hacerlo quedó descrita en el Éxodo hace miles de años, como estos escalones cuya base o escalón angular es la pasión de Jesucristo.
Os invito a haceros estas preguntas:
¿Por qué el Señor quiso que sucediera todo de esta manera: con claros escalones hacia abajo y hacia arriba que se corresponden? A Isaac le bastó con mostrarle el sueño. ¿Tan importante era dejarlo así expuesto para nuestro tiempo? Quizá sea una evidencia más para el pueblo de Israel, pero en cualquier caso ¿Por qué el Señor quiere que esto se revele ahora? Parece un signo más de que la profetizada unión de las naciones y el posterior ‘apaga y vámonos’ están próximos. ¿Quizá sean nuestros hermanos Israelitas los primeros en reconocer la Verdad? ¿Reconocerán los musulmanes a Cristo como aquel que justifica su fe (también verdadera)? ¿Otros? ¿O será todo a la vez? No sé cómo lo hará el Señor, pero lo hará porque está escrito: no solo los que escuchan de las religiones sino también los sordos escucharán.
Gén 28:10 Jacob salió de Berseba en dirección a Jarán. 11 Llegó a un determinado lugar y se quedó allí a pernoctar, porque ya se había puesto el sol. Tomando una piedra de allí mismo, se la colocó por cabezal y se echó a dormir en aquel lugar. 12 Y tuvo un sueño: una escalinata, apoyada en la tierra, con la cima tocaba el cielo. Ángeles de Dios subían y bajaban por ella. 13 El Señor, que estaba en pie junto a ella, le dijo: «Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abrahán y el Dios de Isaac. La tierra sobre la que estás acostado la daré a ti y a tu descendencia. 14 Tu descendencia será como el polvo de la tierra, y te extenderás a occidente y oriente, a norte y sur; y todas las naciones de la tierra serán benditas por causa tuya y de tu descendencia. 15 Yo estoy contigo; yo te guardaré donde quiera que vayas, te haré volver a esta tierra y no te abandonaré hasta que cumpla lo que he prometido». 16 Cuando Jacob despertó de su sueño, dijo: «Realmente el Señor está en este lugar y yo no lo sabía».
Un Poco de Numerología
Hablemos de algunos números utilizados en la Biblia.
El número 1 simboliza a Dios por ser único.
El número 7 simboliza la perfección, lo absoluto. Todo se realizó en 7 días; después del trabajo (6 días) llega el descanso como llegará el cielo para los que tengan suerte después del mundo.
Evangelio según San Mateo 18:21-22
Pedro se acercó entonces y le dijo: «Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas que me haga mi hermano? ¿Hasta siete veces?»
Dícele Jesús: «No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.»
Es lo perfecto, lo que debe ser.
El número 3 simboliza la totalidad. Hay tres tiempos pasado, presente y futuro. El 3 es siempre.
El número 6 es el del demonio según dicen. En realidad, representa el número del hombre y como tal, bien podría ser el del demonio pues como sostengo hemos dejado de ser lo que fuimos para ser los mediocres hombres por culpa de la traición, azuzada por el demonio. Luego el ser hombres sería un logro del demonio.
Es el número del hombre porque al 6º día Dios lo creó.
El 6 además es un número perfecto=suma de sus divisores exceptuándose a sí mismo => 1+2+3 = 6 que también puede simbolizar que el 6 (demonio), sustituye a las tres personas Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Los Superlativos
Apocalipsis 13:16-18
Y hace que todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se hagan una marca en la mano derecha o en la frente, 17 y que nadie pueda comprar nada ni vender, sino el que lleve la marca con el nombre de la Bestia o con la cifra de su nombre. 18 ¡Aquí está la sabiduría! Que el inteligente calcule la cifra de la Bestia; pues es la cifra de un hombre. Su cifra es 666.
Además, el superlativo que hacían los Israelitas era repetir tres veces la misma palabra (Santo, Santo, Santo, es el más Santo). Con el 6 ocurriría lo mismo.
Si quitamos al superlativo de lo perfecto 777, la Santísima Trinidad Dios 111 (superlativo de 1 Dios único y además 1+1+1 suman 3 personas; 3 =totalidad, siempre, eternidad. Luego el 111 representa a Dios Trinidad; un solo Dios, tres personas), nos queda 666.
Perfecto (777) – Dios (111) = Diablo (666)
Que es básicamente lo que, afirmo, pasó en el cielo. Estando en la perfección del cielo, intentamos quitar a Dios engañados por el demonio y nos encontramos muertos y además fuera del cielo junto al Diablo. Y a la vez es el número del hombre, como ya he dicho, lo que somos ahora por haber quitado a Dios de nosotros.
Luego: “pues es la cifra de un hombre. Su cifra es 666” se refiere a que es la cifra del ‘hombre’ pues el hombre es la consecución de la bestia. En cuanto a que unos se marcan con este número en la mano y otros en la frente (creo que lo explico por ahí), ya ocurrió en la rebelión del cielo, los que traicionaron y obraron o actuaron (Eva), en la mano, y los que lo hicieron de pensamiento o dudaron, en la frente (Adán). Una vez vacíos de Dios permanecemos muertos, “tirados”; solo podremos ejercer nuestra libertad cuando Dios nos ponga nuestras prótesis, los cuerpos. Esa libertad es comprar y vender. Gracias a Dios y a la pasión los hombres luego tendremos la posibilidad de recibir el Espíritu Santo, no así los demonios que solo odian y no tienen cuerpo, no son hombres, no tienen la marca de la bestia 666 paradójicamente. Ganar y perder Espíritu Santo (haces el bien o el mal).
Además, en cuanto a que es la cifra de un hombre, es la mejor manera de decir también, que la bestia era un deseo (ángel) como nosotros sin hablar de nuestro origen en el cielo o sin mencionarlo realmente. Por último, creo que cada 6 representa también a cada uno de los actores de este mundo, de los que aquí caímos por dejar a Dios: Adanes 6, Evas (sordos) 6 y demonios 6.
Como curiosidad os pongo este versículo que nos habla de una creación conjunta de todos antes de (en) la creación del mundo y de cómo venimos marcados ya (de no ser así, qué arbitrario sería inscribir a unos y a otros no).
Apocalipsis 17:8
«La Bestia que has visto, era y ya no es; y va a subir del Abismo pero camina hacia su destrucción. Los habitantes de la tierra, cuyo nombre no fue inscrito desde la creación del mundo en el libro de la vida, se maravillarán al ver que la Bestia era y ya no es, pero que reaparecerá.
Relación entre el 7 y el 12.
A lo largo del ensayo he nombrado mucho el número 7. No sólo lo hemos estudiado como representación de la perfección, sino que además lo hemos visto como clasificación de los tipos de tamaño (de alma) de los que estamos en la tierra. Esto a su vez hacía posibles esos 7 caminos paralelos guiados por la misericordia que Dios pone entre nosotros para llevarnos hasta Él, para salvarnos. Estos son caminos para las distintas “naciones” o, más bien, para esos distintos tamaños de alma. Poníamos el ejemplo de las distintas edades en los hombres, que merecen distinta enseñanza e incluso diferente juicio (no es lo mismo un niño que un adulto).
Hemos visto el 7 mostrándonos esos grupos por tamaño, en los 7 Espíritus de Dios, en las 7 Iglesias (hablando crípticamente), en las 7 estrellas en su mano derecha, en los 7 sellos que somos también cada uno de esos tipos o grupos, incapaces de recibir el Espíritu Santo desde nuestra traición, y que sólo cristo puede abrir. A veces se enumeran 7 accidentes geográficos, por ejemplo, para designar veladamente, estos “tipos”. 7 armas, designando a los 7 tamaños de demonios entre nosotros (que al fin y al cabo hablan de los mismos 7 tamaños, pues caídos hubo de cada uno de los 7 grupos). Sin olvidar que Dios divide su “creación” en 7 días; (¿En serio? Si el sol, la luna y las estrellas se crearon en el 4º día, ¿cómo se sabía que eran los primeros días, aquellos días en que se hacía lo primero? Por supuesto, esto está escrito para hablarnos de esa agrupación de la creación).
Estos sietes con valor profético o, cuando menos significativo, quedan escondidos entre otros muchos sietes que se utilizan en la rutina de Israel y que parecen números simbólicos; se suelen usar en sacrificios (7 cabras, 7 ovejas…) y tiempos sobre sacrificios o castigos. Quizá no sean solo simbólicos, después de todo, quizá fuera normal que se ofreciera, aun sin ellos saberlo, un animal por cada grupo o tipo de los que cayeron del cielo…
Muchas más ocurrencias del 7 encontramos incluso en el mundo físico (7 tipos de estrellas equiparando esa intensidad de luz al tamaño del alma, 7 colores del arco iris, símbolo también de la alianza de Dios con nosotros…).
Pero hemos dejado de lado el número 12, que está muy presente también en la simbología de la Biblia. Y además, está presente desde el cielo nada menos.
Decía, que el Árbol de la Vida representa al Espíritu Santo, y este fue codiciado por los ángeles rebeldes, convirtiéndose paradójicamente en ídolo entre ellos. Así, ese Árbol de la Vida da, según el apocalipsis 12 frutos al año. No son frutos diferentes, sino el mismo que brota 12 veces durante el año. Esto nos viene a distinguir ese mismo fruto o Espíritu Santo en 12 grupos.
Así, en la Biblia, esa jerarquización o agrupación se verá varias veces más; trataré de establecer la relación o equiparación entre ambas jerarquizaciones de 12 y de 7 (esta última tan revisada en este ensayo).
Pero antes vamos a revisar la jerarquía del 12 en la Biblia.
Cuando se nombra el 12, hay uno de ellos que suele salir mal parado (esto ocurría de manera parecida con el 7 cuando, por ejemplo, nombraba accidentes geográficos, y uno de ellos eran las islas, apartadas y rodeadas del mar = muerte; el 7º día -creación- se menciona aparte de los otros, en este Dios no actúa).
Igualmente, de alguna manera, lo veremos en una de las 12 tribus de Jacob, la de Benjamín, que tras luchar contra el resto de las tribus después de cometer un grave pecado, fue diezmada y todas sus mujeres asesinadas. A los supervivientes se les asignó las mujeres de un poblado de Israel cuyos hombres fueron muertos a manos de las otras tribus por no presentarse ante Yahvé. Posteriormente completaron el número con otras Israelitas que fueron secuestradas. Así se consiguió que la tribu de Benjamín no desapareciera (Jueces 19:22 - 21:25).
Pero en cuanto al Árbol de la Vida, ¿hay realmente un fruto que también se ha estropeado? Sí, así fue para muchos, ya que si equiparamos esos frutos del árbol, no solo a esa jerarquía de ángeles en el cielo, sino a los frutos que conocemos del Espíritu Santo: caridad, gozo, paz, paciencia, longanimidad, bondad, benignidad, mansedumbre, fidelidad, modestia, continencia y castidad. 12 en total, vemos que el pecado que hizo entrar la iniquidad en el cielo fue el orgullo, es decir, falló en muchos el fruto de la humildad o la modestia. Posteriormente, debido a este ya falla la fidelidad, pero ese es el pecado que rompió todo. Más adelante, como pasa con Benjamín esta humildad se repondrá en los que se salven. No es que haya fallado como fruto del Espíritu, sino en la libertad de muchos este fruto se desechó.
Pero, hablando del número 12 ¿realmente hay una simbología coincidente o solo es una casualidad que estos coincidan? Vayamos al nuevo testamento. Los doce apóstoles de cristo, en los que de nuevo hay un traidor, Judas, no fueron tomados en este número porque hubiera 12 tribus en Israel, Jesús no tuvo en cuenta la tribu de cada uno (parece, además, que entonces ya habían desaparecido varias tribus), sino que los fue añadiendo conforme los encontraba. Cierto es que en el A.T. hay muchas ocurrencias del 12 debido a las 12 tribus de Israel, pero no en este caso (hay 180 en toda la Biblia).
Y por supuesto, lo que termina de confirmarnos esta clasificación es el Apocalipsis, donde se nos habla de la Jerusalén celeste con 12 puertas, y asentada sobre 12 piedras. Que vendría a decirnos algo como que el cielo se sustenta en 12 pilares y tiene 12 entradas, lo que de nuevo me lleva a esa jerarquización o agrupación, si queréis, y de nuevo a esos distintos caminos por los que entrar en el cielo (¿en este caso serían 12? ahora veremos esto…).
Apo 12:1 Un gran signo apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza;
Apo 21:12 Tenía una muralla grande y alta con doce puertas; y sobre las puertas, doce ángeles y nombres grabados, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel;
Apo 21:14 La muralla de la ciudad se asienta sobre doce piedras, que llevan los nombres de los doce apóstoles del Cordero.
Apo 21:21 Y las doce puertas son doce perlas, cada una de las puertas hecha de una sola perla; y la plaza de la ciudad es de oro puro, trasparente como el cristal.
Apo 22:2 En medio de la plaza, a una y otra margen del río, hay un árbol de vida, que da fruto doce veces, una vez cada mes; y sus hojas sirven de medicina para los gentiles.
Pero tengamos en cuenta el segundo, Apo 21:12 y volvamos al Evangelio, donde encontramos esto dicho por Jesús:
Mat 19:28 Jesús les dijo: "Yo os aseguro que vosotros que me habéis seguido, en la regeneración cuando el Hijo del hombre se siente en su trono de gloria, os sentaréis también vosotros en doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel.
¿No sabemos que cristo es el Salvador de la humanidad? Y él, ¿no lo sabía? Por supuesto que sí, siempre habla de manera global: se refiere a sí mismo como el “hijo del hombre”; no viene a juzgar a este mundo sino a salvarlo; la salvación viene de los judíos… ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre, adorarán al Padre en Espíritu y Verdad… (Juan 4,21-24). Entonces ¿por qué sentarse a juzgar a las 12 tribus de Israel, que vienen a ser insignificantes, cuantitativamente hablando, si los comparamos con todos los habitantes del mundo de todas las épocas? Y, sobre todo, ¿Por qué el cielo tiene 12 puertas y 12 pilares? ¿Por qué el Árbol de la Vida tiene 12 frutos? Nos habla de esa jerarquización entre las criaturas celestiales, del cielo, de dónde caímos, de nosotros mismos.
Pero entonces, ¿en qué quedamos, hay 7 tipos o 12? Bien, es un poco desconcertante, porque habla de manera parecida refiriéndose al 12 y al 7 en cuanto a jerarquización, pero quizá estas palabras de Jesús nos aclaren algo:
Mar 8:16-21 Ellos hablaban entre sí que no tenían panes. (17) Dándose cuenta, les dice: "¿Por qué estáis hablando de que no tenéis panes? ¿Aún no comprendéis ni entendéis? ¿Es que tenéis la mente embotada? (18) ¿Teniendo ojos no veis y teniendo oídos no oís? ¿No os acordáis de (19) cuando partí los cinco panes para los cinco mil? ¿Cuántos canastos llenos de trozos recogisteis?" "Doce", le dicen. (20) "Y cuando partí los siete entre los cuatro mil, ¿cuántas espuertas llenas de trozos recogisteis?" Le dicen: "Siete." 21 Y continuó: "¿Aún no entendéis?"
Ahora vamos a jugar con los números, ya sé que no os convence a muchos andar haciendo cuentas pero veamos.
5 panes para 5000 quedan 12 canastos (5 : 5000 = 0,001)
7 panes para 4000 quedan 7 canastos (7 : 4000 = 0,00175)
El pan simboliza también el Espíritu Santo. Parece decir que repartiendo el Espíritu entre los que somos, quedarán grupos de 12 o de 7. De hecho, dividiendo unos y otros hasta el tercer decimal da el mismo resultado (0,001). Parece que equipare estos valores, el 12 y el 7. Pero además da primero 5 y luego 7 (5 panes+7 panes=12) como diciendo: hay 5 (+ 2 peces que ahora ignoramos pues hablamos de panes Marcos 6,41-43) en el cielo que tienen exactamente 0’001 cada uno y en la tierra los 7:4000 que dan esos 0’001 y además, el 7 y el 5 de nuevo como 4º y 5º decimal ≅ en los 7 panes está incluido el 7 y el 5, es decir el 12.
Para rizar el rizo, si sumamos todos los panes y todos los comensales y los dividimos: (5+7):(5000+4000)= 0,001333…, recordándonos ese 3 periódicamente infinito a Dios Trinidad. ¿Sería como si todo el Espíritu repartido, también entre nosotros, completara a Dios por entero? ¿Quiere decir esto que si en nosotros mora algo del Espíritu, ese Espíritu, con el que estamos en comunión, forma parte aunque sea ínfimamente de Dios Trinidad? ¿Y eso dónde nos deja a nosotros?
Lo que sugiere varias teorías, pero yo me quedo con lo más importante para mí, y es esa Jerarquización ya desde el cielo. Quizá el 7 y el 12 son simplemente diferenciados por mantener el secreto hasta hoy, ya que parece igualarlos ahora. Sería demasiado visible que se hubiera usado siempre el 12 o el 7. Hemos visto ya el 7 en nuestro día a día, y no solo en lo mencionado hace un momento, sino en los días de la semana que son 7 (6 días tardó Dios en hacer el mundo y al 7º descansó); pero también vemos el 12 en lo cotidiano, pues 12 son los meses del año y 12 las horas del día. En la biblia el sentido simbólico de ambos, en cuanto a la jerarquización (que no en cuanto a la perfección del 7), parece ser el mismo.
Jua 11:9 Jesús respondió: "¿No son doce las horas del día? Si uno anda de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo;
Y dado que nombra en ambos grupos uno aparte, ¿no se referirá a lo mismo?
Si nos fijamos en la jerarquía de los ángeles que se deduce de las Escrituras (según parece), tenemos: querubines, dominaciones, principados, serafines, virtudes, arcángeles, tronos, potestades, y ángeles. Total 9. Podríamos pensar que la estructura se va completando hasta 12 en el cielo sumando al demonio, ya que él era especialmente bello, por encima de los querubines diría yo. Y para seguir por arriba estaría Jesucristo como criatura celestial y Dios Padre encima de todos. Lo cual encajaría con esos frutos del Espíritu Santo. Sin embargo, esto no encaja en los versículos que hablan sobre juzgar a todas las tribus de Jacob, aunque sí con el del apocalipsis que muestra a la Virgen sobre la luna y una corona de 12 estrellas sobre su cabeza, ya que ella como mujer quedaría por debajo de la naturaleza celestial y por encima de la humanidad (así esas 12 estrellas son esos grupos, no tanto los apóstoles como he puesto por ahí).
Entonces dejaremos eso como una opción y colocaremos a los tres actores que hemos llegado a la tierra para completar ese 12 (9+3). Los demonios, o ángeles caídos, los Adán, y los Eva. En este caso, el 12 nos hablaría de la estructura del Cielo, no solo por tamaños, sino por cómo quedó tras la traición. Y entonces no se diferenciaría nuestro tamaño de alma como hombres, pues aunque este permanezca en nosotros (razón de los caminos paralelos de Dios), también al llegar al cielo los que lleguen (esto lo vemos en el templo de Ezequiel, que en realidad es el cielo p.77), quedaremos muy diferenciados de lo que fuimos, muy inferiores a los ángeles aunque volvamos allí. A este respecto Jesús también dice a Santiago y a su hermano (creo) cuando le piden estar a su lado en el cielo: “no sabéis lo que estáis pidiendo”.
Pero, aun contando con esos añadidos, de nosotros los traidores, si es que ese es el caso, ¿por qué reducirlos a 7 en la tierra? Es decir, si hay 9 tipos de ángeles por el tamaño (o 10 si contamos al demonio), porque pasarlos a 7 en la tierra, o al revés, planteemos primero lo contrario: ¿por qué se hace presente también el 12 en la tierra, con las 12 tribus de Jacob, los 12 canastos (unidos a los otros 7) o los 12 apóstoles (más allá de los 12 frutos de Árbol de la Vida, los 12 frutos del Espíritu, las 12 estrellas que coronan a la virgen, las 12 puertas del cielo)? Puede que solo sea para hacernos saber lo que pasó en el cielo; simplemente para hablarnos de nuestra historia allí, o cómo quedó aquello tras la traición. A este respecto, también los salmos huérfanos, nos describen 11 veces + 1, los 3 ½ tiempos de los que tanto hablo en el ensayo, siendo la vez general, la que está suelta, la que engloba todos los salmos huérfanos, la más grave, pues forma su primer tiempo directamente con la traición a Yahvé y su Ungido (1º y 2º Salmos). Ver Salmos huérfanos p. 143.
En cuanto a por qué reducirlos a 7 aquí abajo, quizá se deba a que hubo algún tipo de los más altos que no traicionaron y no están presentes en la tierra, por supuesto el demonio no tiene camino, por lo que quedaría descartado.
De cualquier manera, solo me interesaba mostrar esa relación entre el 12 y el 7. Son formas de reflejar esa agrupación ya desde el cielo, que influyen de manera directa en los caminos que Dios ha puesto aquí para salvarnos, caminos que nos enseñan (o nos recuerdan lo que éramos, si queréis), conforme a nuestra capacidad original en la que Dios nos creó en el cielo. Tan solo basta esto para comprobar que Dios nos pone pistas relacionadas y coherentes que hablan en la misma dirección. Y ahora no hablo de los 3 ½ tiempos, pues estos ya no son pistas, son claras enseñanzas que de conocerlas solo pueden ser ignoradas por aquel que conscientemente quiere dar la espalda a Dios. El que tenga oídos que oiga, pues así dice Jesucristo:
Mat 10:32-33 "Por todo aquel que se declare por mí ante los hombres, yo también me declararé por él ante mi Padre que está en los cielos; 33 pero a quien me niegue ante los hombres, le negaré yo también ante mi Padre que está en los cielos.
¿Qué será de aquél que directamente niega al Padre ante los hombres, o, mejor niega a los hombres la posibilidad de ver al Padre? Escalofríos me dan solo de pensar en ponerme en su pellejo…
Una Prefiguración del A.T. o Torá
Hoy, podemos mirar atrás al antiguo testamento y ver la prefiguración de Jesucristo cientos de años antes de su llegada. Dios se sirvió de la historia de Israel para dibujar nuestra historia desde nuestro origen en el cielo. Sólo pongo esta aquí.